Dreams; Chandler Riggs (EDITANDO)

15.

Aún me sentía deprimido, menos, pero aún ese sentimiento de la depresión seguía vivo, sólo espero que mi escuela sea grande y para nada aburrida.

El camino a nuestra nueva casa fue corto y aburrido, había un silencio abrumante en el auto, olvidé mencionar que también el trabajo le obsequió un auto nuevo muy lujoso y bonito a mi padre, era un Audi R8 nuevo color negro, aunque un deportivo estaría mejor.

Todo el tiempo estuve escuchando música, no quería saber nada de nadie, ahora sólo me importaba que a mi iPod no se le agotará la batería.

Sentí que movieron mi hombro.

Bufé -Que quieres mamá- dije irritado.

-Chandler Carlton Riggs, ya es suficiente, contéstame bien soy tu madre jovencito y cuando lleguemos a casa estarás castigado, ¡dame esos auriculares ahora!- dijo pronunciando más fuerte la última palabra, me sorprendió su actitud conmigo, ella nunca suele hablarme así.

Bufé y le entregue de mala manera los auriculares a mi madre, pero nunca dijo que también el iPod se lo tenía que dar así que me lo quede.

Apenas estaba abriendo un juego de zombies pero mi madre fue más rápida y me lo arrebató de las manos.

Ante este gesto sólo me queje y me recosté para quedar dormido.

Estaba besando a una chica rubia que no pude ver su rostro, sabía que era rubia por su cabello, pero el cabello de Rachel es un rubio diferente y me confundí.

A lo lejos pude ver a Grace observándonos con lágrimas en los ojos de inmediato me separe de aquella rubia y fui tras Grace, mi Grace.

La alcance y tome su mano para voltearla, pero al mirar su rostro, este me asusto, sus ojos eran completamente negros y se reía mostrando sus dientes afilados, mire su mano y luego su rostro, mi rostro tenía una expresión que demostraba que realmente estaba asustado, seguía observándola hasta que desapareció.

Me levanté de golpe, había sido una pesadilla, habíamos llegado, mis padres ya habían bajado el equipaje.

Entré a la casa y era muy bonita, pero también pude notar que unos señores estaban quitando un recibidor de cartas que decía "Familia Johnson".

Ya todo estaba arreglado y vaya que hicieron un muy buen trabajo, todo era muy hermoso, realmente hermoso, atrás hasta tenían una alberca (piscina, área con una poca profundidad y capacidad de llenarse de agua para pasar el tiempo libre haciendo actividades: nadar, etc, lo se soy su diccionario)

Fui a el que sería mi cuarto y estaba decorado justo como a mi me gusta, lo mejor es que no compartiría habitación con Grayson.

Grace' s POV:

Las palabras que brotaban de la boca de Chandler realmente me herían, jamás creí que el sería capaz de decirme cosas como esas.

Cuando las dijo mi mundo se derrumbó, sentía como si me hubiesen enterrado una cuchilla en el corazón, yo lo amaba o eso creía en mis sueños, tenía un nudo en mi garganta que no me permitía articular alguna palabra porque si lo hacia rompería en llanto.

Sólo me di la vuelta y me fui corriendo al baño de mujeres, abrí mi bolso y saque una cuchilla que conservaba para cortarme antes, ahora sólo la utilizaba para trabajos extra curriculares.

Presione aquella cuchilla sobre mi piel que se encontraba en mis muñecas provocando que las pequeñas gotas de sangre brotarán cayendo en el blanco e impecable piso de el baño.

Escuche el sonido de la puerta abrirse, así que tome un pedazo de papel higiénico y limpie el piso evitando dejar rastros de mi sangre sobre este, también deslice otro pedazo en mis muñecas quitando la sangre para después lavarla sin que nadie me vea.

¡Demonios! Soy una estúpida, ¡no debí de haber hecho eso! No de nuevo.

No sabía quien era la chica que abrió la puerta hasta que llamo mi nombre.

-¿Grace? ¿Grace, estas ahí?- dijo aquella chica, me sorprendí, pues esa voz pertenecía a nada más y nada menos que la mismísima Rachel Mackenzie.

Seque mis lágrimas, baje mi manga de el suéter que llevaba, me paré y me hice la fuerte, ella no debe saber que sufrí gracias a ella, ni debe saber que me derrotó.

Abrí la puerta del baño en el que estaba y salí para enfrentarla.

-¿Que es lo que quieres?- pregunte fría.

-Yo sólo quería disculparme por la forma en que te trato Chandler, lo vi todo, me gustaría que me escucharás para arreglar todo- dijo cabizbaja, ¿que se trae esta?

Bufé -así que ahora la causante de todo se quiere disculpar. Mira que gracioso, no te creo nada- dije pronunciando la última palabra y cruzandome de brazos.

Rachel suspiró -Mira sólo te pido que me escuches para que entiendas como sucedió todo, por favor, sólo escúchame, te lo ruego-

Sólo suspire de mala gana y asentí.

-Cuando te vi platicar con Chandler la primera vez me puse celosa y muy celosa, porque yo soy así, celosa, y más porque vi que te abrazo y repartió besos por tu cabeza, mira, a mi me da miedo de perder a Chandler porque lo amo, es por eso que molesto a cada chica que se le acerca y que veo que a el le interesa y tu le interesas Grace, quería sólo molestarte un poco pero lo que me dijiste, ¡realmente me enfureció y lastimo! por eso me lancé a ti y nos golpeamos, ante esto quise que Chandler hablara contigo, me sentía enojada, pero me mal entendió, yo sólo quería que hablara contigo no que te dijera esas cosas feas y me enoje con el, no me gustaría que pensaras que soy mala o una típica diva, ¡al contrario! una vez que me conoces bien no piensas lo mismo, ¡perdóname por favor! si no con el paso de el tiempo te darás cuenta quien es el verdadero enemigo-

Se oía muy sincera, pero que tal si era sólo parte de una apuesta o uno de sus juegos, no me dejaría engañar tan rápido, tendría que comprobarlo con el paso del tiempo. Pero podré probarla un poco.

Carcajee -¿En serio crees que me confiaré en ti?- dije señalándola -Me hiciste daño con eso y si algo aprendí en mi vieja escuela es que no debes confiar en todos- dije seria.

Ella sólo suspiro iba a abrir la boca para decir algo -Déjame terminar- la interrumpí antes de que dijera algo.

-Con el paso del tiempo quizá, sólo quizá te pueda hablar, porque se que esto podría ser parte sólo de una apuesta y no soy tan ingenua niña, que te quede claro que no voy a dejar que nada ni nadie me lastime y menos alguien como tu- dije para después darme vuelta y retirarme.

Pero me tomo de el brazo y me hizo mirarla -Pero no olvides que si necesitas una amiga, aquí estoy yo- dijo y luego me soltó o más bien me solté de su agarre.