The Bet (Justin POV's)

11. Un traidor!

A la mañana siguiente desperté en una habitación que no era mía, me levante de la cama y Chris estaba acostado en el suelo. Comence a reír y él despertó.

–¿de que te reías cerebro de maní? –preguntó riendo y rodee los ojos. Ese era el apodo que Fredo me había puesto, ellos decían que yo era muy tonto, que tenía síndrome de Dawn y que jodía mucho, pero aunque los estreso mucho, ellos me aman.

Decidí ir a mi casa y apurarme para poder tomar algo y que se me quite el dolor de cabeza. Alfredo me llevo en su coche.

–ire a saludar a tus padres, vamos –dijo sonriendo. Camine con él, por el enorme jardín y antes de entrar me agarro del brazo. –¿como es la relación con ellos? –preguntó.

–igual, desde Cait ya no confían en mi, Pattie muy en el fondo sigue decepcionada. Y Jeremy también.

–¿recuerdas por qué te apode
cerebro de maní? –preguntó y asentí.

–estábamos hablando sobre Selena, ustedes me decían que no me quería y...

–...que no vale la pena soportar un sentimiento que no es mutuo –me interrumpió. –Justin, te dije que eras un chico con cerebro de maní, por dejar que ella te lastimará. –término de hablar y sonreí. Recordando esos tiempos en Canadá, quería regresar allá, quería ver a Selena, pero también quería estar aquí, regresar el tiempo y nunca haber hecho esa apuesta con Chris.
Quería enamorarme de ___, pero no podía.

-x-

–Hola, te ves hermosa –dije y le di un beso en las mejillas.

–gracias –le abrí la puerta, para que entrará y luego fui a la mía.
Encendí la radio, sonaba una canción de Ed Sheeran.

Al llegar baje del auto y fui a su lado, abrí su puerta y la ayude a bajar, la agarre de la cintura y caminamos juntos hacia la casa.

–Justin... Justin, ¿por qué vinimos aquí? –preguntó.

–quería mostrarte mi escondite, aquí me escondo cuando tengo miedo –dije sonriendo. Aquí venía cuando tenía miedo, porque todo me estaba saliendo mal.

–¿que? –la mire y seguí caminando, abrí la puerta y extendí la mano para que pasará.

–yo no soy como tu crees, yo... ___ yo soy diferente –dije.
Me senté en la cama y ella solo se quedó viéndome, parada.

Parecía que pensaba en algo y después de unos minutos se acerco a mi, tenía miedo. La agarre de la cintura y le indique que se sentara en mis piernas, tenía vergüenza, así que insistí, al final lo hizo y la abrace.

–¿puedes explicarme a que te refieres con que eres diferente? –preguntó. La solte.

–¿tienes miedo? –pregunté mirándola fijamente. Estaba nerviosa, se le notaba, temblaba un poco, como si temiera que en cualquier momento la atacará. Sé que piensa que la traje para tener sexo, pero no era así, sólo quería decirle lo de la apuesta, decirle que lo sentía, que me arrepentía.

No fue mi intención quise decir, pero las palabras no salían de mi boca. Estaban como atrapadas en mi garganta.

–¿que?

–te noto nerviosa... Yo... yo no te haré daño –ella sonrió.

–lo sé, lo sé, es solo que... Justin yo nunca he estado sola en una habitación con un chico, mucho menos en una casa tan lejos de la ciudad –bese su mano.

–si piensas que te voy a violar, luego te voy a matar y voy a tirar tu cuerpo al lago, estas equivocada, además si te gusta, lo cual es obvio, no sería violación –dije sonriendo.

–espera... ¿hay un lago aquí? ¿violar? ¿matar? ¿y que me va a gustar?, okay, pensé que era yo la que leía todo el día –ella comenzó a reírse.

–es broma, por eso me gustas –dije lo último inconscientemente.

–¿de que forma te gusto? –preguntó ella y mi corazón se hizo un puño.
Ella no me gustaba, me encantaba, me volvía loco, me hacia olvidarme de todos y de todo, y eso me gustaba.

–no eres como las otras chicas, porque si hablamos de mi ex-novia, todos mis amigos ya le conocían el cu** –conteste. Era verdad, cada chica con la que estaba alguno de mis amigos ya había estado con ella, la mayoría había estado con Ryan, que era él más mujeriego después de mi.
Ella acaricio mi mejilla, así que yo acaricie la suya.
Paso su brazo alrededor de mi cuello y me acaricio, coloque mi mano en su pierna y se estremeció, estas pequeñas caricias eran lo más romántico de mi asquerosa vida.

–me gusta como te queda esa falda –dije sonriendo coqueto y ella se ruborizó. Era tan preciosa.

–Justin, ¿me dirás que vinimos hacer aquí? –asentí.

–quiero conocerte...

–ya me conoces bobo –me interrumpió.

–___ no seas tonta –dije y ambos reímos –me refiero a que me cuentes de ti, de tu pasado, de lo que planeas para el futuro, cosas así.

–no me gusta hablar del pasado, ni del futuro, todo lo que tenemos es el ahora, nada más. –la abrace.
Ella también me abrazo, así que la abrace más fuerte.

–okay, que tal si nos vamos conociendo poco a poco. –ella asintió.

Ed Sheeran sonaba en la grabadora.
Me senté en una silla, ella estaba en la cama y yo sólo la miraba. Haría que ese cielo nocturno llorará. Haría una tormenta en sus ojos si en este momento le digo que solo me acerque a ella por una apuesta. Pero sin darme cuenta comencé a enamorarme y creó que Chris tiene razón, me enamore primero yo.

–creo que empiezo a sentir cosas nuevas contigo –dije. Ella sonrió. Me acerque a ella, moría por besarla, desde hace tiempo, moría por presionar mis labios con los suyos.

–Justin...

–shhh –la calle.
Me acerque más a ella y sin rodeos la bese. Al principio fue lento, pero luego fue rápido, nuestros labios eran como un rompe cabeza, la mitad el uno del otro. Como si la luna, besará al sol. Lo habían esperado hace tiempo. –hablo enserio cuando te digo que empiezo a sentir cosas nuevas... –dicho esto, hice que el sol besará nuevamente a la luna.

Mi corazón era un traidor, porque estaba brincando de alegría, era un traidor!