The Bet (Justin POV's)

51. Fui yo quien perdió

Leanlo con la canción, plis :3.

Negué con la cabeza, ____ se había desmayado y la había traído al hospital, estaba preocupado por ella, no quería que le pasará nada malo. No sabía si se estaba alimentando bien o si estaba durmiendo como debía. Quería preguntar, pero sabía cual seria su respuesta. Entonces cuando volvió a verme le sonreí, sólo quería platicar con ella y tratar de solucionar las cosas, pero ella fruncio el ceño.

–¿por qué estas aquí? –preguntó de manera arrogante, entendía que no quisiera hablar conmigo, pero me dolía.

–porque yo te traje, te desmayaste... –comencé a explicar, pero ella me interrumpió.

–eso ya lo sé –dijo molesta. Lamí mis labios, baje la mirada, no sabía que decir, sentía una presión en el pecho. Negué con la cabeza, que estúpido, lo tenía todo y me quede sin nada.

–¿quieres perdonarme de una vez por todas? –la pregunta había salido de mi boca sin pensarlo y me arrepentí al instante. –perdone a Selena por amor, porque la perdería sino lo hacia. –dije tratando de suavizar lo que dije antes, pero en realidad eso lo empeoro. –¿ves lo que has perdido? –pregunte, no me refería a que me perdía a mi, yo no valía nada, pero nuestra relación, eso lo valía todo.

–no he perdido nada. –dijo y sentí un nudo en la garganta, no sabía si lo decía enserio, pero si ella no había perdido nada, bien por ella, porque yo había perdido todo lo bueno que tenía en la vida.
Me levante de la silla, estaba desesperado, quería que me perdonará a como diera lugar. Camine hacia la ventana, mirando el suelo.

–te amo –le dije, volviéndola a ver, pero ella miro hacia otro lado. –si supieras como has cambiado... No solo mi vida, sino también mi actitud –volví a la silla en la que estaba y volví a sentarme. Agarre su mano y la apreté, imaginando que ella la quitaría, pero no lo hizo, ni siquiera lo intento, en ese momento mi corazón se aceleró. Cualquier cosa era una pequeña señal de esperanza para mi, pero en realidad nunca tuve oportunidad. –al principio sí, lo acepto, quería lastimarte. Solo quería enamorarte y si podía llevarte a la cama, ¿ok? –ella me miro y no pude mantenerle la mirada, así que mire al suelo, mis ojos se humedecieron y en menos de un segundo ya estaba llorando. No quería seguir con esto. –pero mis sentimientos comenzaron a mezclarse, mis heridas comenzaron a sanarse y todo fue gracias a ti. –reí –te veía tan hermosa y comencé a culparme por tener que herir a alguien como tu...

–¿tener que herir? –me interrumpió. –¿era algo obligatorio, Justin? –preguntó molesta. Tenía razón, eso lo sabía muy bien, pero no tenía respuesta, había sido una apuesta tan estúpida.

–No, no era obligatorio –sonreí –de verdad quise arreglarlo, algunas veces pensé en decírtelo, pedirte perdón antes de que fuese demasiado tarde, pero no podía... No podía borrar esa sonrisa de tu rostro. –ella sonrió y por un momento me sentí feliz nuevamente. –al principió si fue mi intención lastimarte, pero después me arrepentí, hermosa, ya no quería lastimarte y ahora no solo te lastime a ti, lastime a muchas personas. –expliqué, sacándome las lágrimas. Estaba diciéndole lo que sentía, por primera vez estaba abriéndome de par en par y siendo transparente con mis sentimientos y mis pensamientos.

–¿que ganabas con la apuesta?.

–no lo sé –respondí a la pregunta que hasta yo mismo me hacia hoy en día.

–genial, supongo que no valió la pena, ¿o sí?  –preguntó ella con sarcasmo.

–eso tampoco lo sé, lo único que puedo asegurarte es que realmente te amo.

–tragate tus sentimientos, porque a mi ya no me importa –sonrió y por un momento sentí que lo decía enserio.

–de acuerdo, supongo que me lo merezco. –dije resignado a sus palabras. Entendía que ella quisiera decir cualquier cosa que me lastimara y lo lograba.

–sí, eso y más. –asentí.

–decepcione a las personas que quiero, Jazzy ya no me quiere ver... Ni siquiera me habla. –sonreí triste, la pequeña decía que porque lastimaba a los que me querían y yo no sabía que responderle. –lo siento. Realmente lo siento. Mi amor, espero que algún día me puedas perdonar. –le solté la mano delicadamente, esperando que ella se aferrará a la mía, pero no lo hizo, solo derramo una lágrima, conteniendo el llanto. –espero que sepas que tu también estas perdiendo.–quería convencerla de perdonarme y quizás no encontraba las palabras adecuadas.

–¿perdiendo? –preguntó incrédula. –Justin, no estoy perdiendo nada. ¿sabes por qué? –negué con la cabeza, sabía que otra vez me diría algo hiriente. –porque quizás esto era sólo un tropiezo más para poder llegar al verdadero amor. –asentí sonriendo con dolor, aunque esperaba que fuera así. Ella merecía ser feliz y era demasiado buena para mi.
Me levante de la silla, supongo que había sido suficiente para los dos. Camine hacia la puerta, para irme, pero antes de hacerlo volví a verla, ella rodó los ojos, así que solo seguí con mi camino. Tratando de ir más rápido, porque todas las neuronas de mi cuerpo querían llevarme nuevamente hacia su habitación para besarla, abrazarla y decirle lo mucho que la amaba aunque ella no me creyera.

Y al final fui yo quien perdió, ella tenía razón, ella no estaba perdiendo nada, en cambio yo lo estaba perdiendo todo, estaba apunto de perderla para siempre y no lo sabía.
Cuando habia dicho que ella merecía ser feliz, lo decía enserio, aunque no hubiese sido conmigo, eso hubiese sido mucho mejor que lo que paso. Supongo que verla feliz, aunque fuera con otro y me doliera, me hubiera dado algo de felicidad y no aquel pozo de desesperación y tristeza.