Mi Lobo Posesivo [+18]

Capítulo 17

Narra Brynne

Mi hermoso y sensual Alpha acaba de salir por la puerta y yo estoy tumbada en la cama pensando en el hermoso trasero que se marcaba cada vez que andaba.

Salgo de mi mundo y me levanto para ir al closet y cogerme algo para ponerme, no sé que ponerme la verdad, me gusta todo y a la vez quiero impresionar a Ethan, quiero dejarle con la boca bien abierta y que me desee, la verdad, no sé en que pienso todo es tan increíble, él es increíble.

Decido ponerme un vestido azul clarito, bastante corto y bonito. Con unas sandalias blancas, me peino el pelo aunque aún está mojado pero me da igual, salgo del cuarto y voy hacía la cocina.

Al bajar escucho la voz de una mujer y Ethan hablando, me paro un poco pero luego decido salir a la cocina.

-Nana puede ayudarte con las dudas que tengas -Dice sonriéndole a la mujer que tiene enfrente-

Es muy bonita, delgada, bajita y con pelo largo pelirrojo, tienes algunas pecas por la cara y es de tez blanca. Me molesta no sé por qué pero no me va a caer nada bien.

-Llegue mi amor -Me acerco a Ethan y pongo un brazo al rededor de su cintura y poniéndome de puntillas para besarle en la mejilla, noto como la tal Nuria nos mira seria-

-Veo que has llegado... -Me mira de arriba abajo- Estás hermosa, pero... Creo que es un poco demasiado corto -Dice frunciendo el ceño-

-Me lo puse para que lo vieras tú y lo disfrutaras tú -Le miro con una gran sonrisa y él me la devuelve- Y ¿Quién es ella? -Pregunto con una sonrisa fingida y mirándola-

-Es una ayudante de Nana, su sobrina para especificar -Me dice Ethan- Solo estará aquí por un tiempo para practicar en ser sirvienta -Me mira y me coge de la mano, tirándome a la isla para que nos sentemos y comamos-

-Dios, Nana se ha superado con esta tarta, se ve deliciosa -Dije sorprendida y casi babeando por la hermosa tarta que había en la isla-

Nuria la puta, vino hacia nosotros y nos sirvo en unos platos unos grandes trozos de tarta, el mio más grande que el de Ethan, puede que no sea una puta después de todo.

Empiezo a comer está tan buena que no puedo parar de gemir, Ethan y Nuria ríen y yo me sonrojo.

-Veo que te gusta mucho, nena -Me dice Ethan poniendo su mano en mi muslo, llegando las descargas excitadoras-

Cuando por fin terminamos de desayunar, he de decir que me siento gorda, estoy comiendo mucha porquería, así que se me ocurre ir al cuarto a la báscula a saber cuanto de gorda me estoy poniendo.

Me levanto de la silla, le doy un beso a Ethan en los labios y subo al cuarto, entro al baño, sigo sin acostumbrarme a tanto lujazo. Una vez dentro del baño, veo mi archienemiga en el suelo tan blanquita y hermosa, me subo a ella y cierro los ojos, después de unos segundos los abro y veo que peso cuatro kilos más, cuatro malditos kilos de mierda más, joder, tengo que empezar ya con la vida sana, sino a que edad voy a morir y quiero estar muchos años con Ethan y viva.

Miro a mi derecha y veo a Ethan recostado en el marco de la puerta con una sonrisa y yo me enojo.

-¡Vete! Me estás volviendo una foca con tus mimos, eres de lo peor -Digo fingiendo llorar-