Abrí mis ojos levemente, me sentía tan cansada y… ¡Oh dios! Por poco me matan en esa sala maldita. Me levante en mi lugar, estaba acostada en mi cama, ¿Quién me traería? No lo sé, pero me siento tan cansada como si me hubiera aplastado un piano, teóricamente claro.
-¿Cómo te sientes?- me voltee asustada pero al verlo me relaje.
-Estoy bien gracias, pero siento como si me hubiera pasado un piano por encima-
-Creo que porque estuviste dormida más de doce horas- lo observe mejor, estaba serio, mucho diría yo ¿Qué le pasaba?
-¿Estas bien Alec?-
-¿Porque lo dices?-
-Estas muy serio-
-Perdona, pero alguien estuvo apunto de morir adentro de la sala, no tengo otra cara- contesto bruscamente. Rezongue la nariz un poco, ¿Por qué me contesto así?
-Yo… perdón- voltee a otro lado, sentirme así era patético.
-No, no tengo nada que perdonarte, no tienes la culpa- hizo que lo mirara de nuevo poniendo una mano en mi barbilla.
-Si me hubiera quedado en mi cuarto…-
-Estabas aburrida, además no sabíamos que pasaría eso-
-Si pero…-
-Buenos días, lamento interrumpir pero Aro me pidió que viniera a revisarla- ¡Oh dios, Carlisle Cullen! Estaba en mi habitación.
-Pasa Carlisle, acaba de despertar-
-Veamos…- observo mis ojos con una lamparita molesta y toco mi cabeza, ¡Pero si no me caí! También observo mi pierna.
-¿Tiene algo mi pierna?-
-¿Cuándo fue la última vez que te checaron ese yeso?- me pregunto algo pensativo.
-Bueno… si no me equivoco hace como dos o tres meses- dije algo pensativa, la verdad es que tampoco estaba al corriente con eso.
-Entonces creo que ya esta listo-
-¿Cómo?-
-Que ya podrías quitártelo-
-¿Enserio? Eso es genial, ¡Fantástico! ¿Escuchaste eso Alec? Me quitarán el yeso- estaba eufórica.
-Lo sé, si escuche, tranquila ¿Quieres?- me dijo sonriente.
-Pero es genial, me quitaran ya el yeso, podre caminar mejor y…-
-Y si no te calmas te pondré un sedante- me advirtió Carlisle sonriente.
Me calme solo un poco pero crucé mis brazos y fruncí el ceño.
-Bien ahora te lo puedo quitar, solo necesito un poco de agua y unas toallas-
-Yo las traigo, no tardare mucho-
Alec se ofreció para traer todo a mi cuarto. Estaba ansiosa porque me quitaran el yeso ya.
(******)
-¿Y cómo te sientes?-
-Siento… extraño, es como un cosquilleo-
-Es normal, tu pierna otra vez esta sintiendo el rose del viento en el, tendrás que tomar una pequeña terapia y tienes que caminar un poco más-
-Claro, ya quiero caminar, correr, saltar… ¡Genial!-
-Tranquila, no puedes correr ni saltar aun, solo caminar- Carlisle como siempre echando a perder la diversión.
-No te preocupes Carlisle, yo me encargare de todo- bufe cruzando mis brazos.
-Claro, bueno yo me tengo que ir, espero que estés bien Elizabeth-
-Gracias, yo espero visitarlos algún día ¿Alec crees que un día pueda ir?-
-Tal vez, tenemos que preguntarle a Aro- me sonrió amablemente.
-Bueno, fue un placer conocerte Carlisle-
-El placer fue mío- como siempre tan cortes.
Carlisle salió de mi habitación, dejándonos solos a Alec y a mí. Estaba feliz de que empezaría a caminar de nuevo yo sola, solo que primero tenía que caminar un poco con la ayuda de mis muletas. Bueno al menos tenía ya garantizado de que solo seria unas semanas usándolas y después ¡Fuera muletas! Ya quería salir a caminar pero esta vez con mis dos piernas.
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La posibilidad de un error... ¿Alec Vulturi en mi cuarto?
FanfictionOk, esta historia es para las aún fanáticas de Crepúsculo. Yo en lo personal, aún me gusta. Ya lo había subido en algún lugar 😬 pero quiero sibirlo aquí, historia escrita cuando tenía 17 años. Veamos como lo hacia...