—Ya está mejor, gracias. —Murmuro Tae mientras inspeccionaba la rodilla vendada que JongHyun había curado. —No fue mordida así que me tendrás que soportar más.
—Eres un gran pedazo de idiota. —Escupió JongHyun, Tae sonrió.
—Sigo vivo, Jong. Prometí que te iba a proteger. —Murmuro Tae intentando sonar bromista.
— ¡Arg! Cierra la boca. —Se quejó y se alejó de ahí, Tae lo observo irse y miro a su lado. Caleel se encontraba con la espalda recargada en la pared y abrazando sus rodillas. Miraba un punto invisible en la punta de sus zapatos, estando en un estado de trance o shock por lo vivido.
—Jong sigue actuando tan infantil que a veces me pregunto si en verdad crece o no. —Caleel no respondió. —Vivíamos en Busan cuando todo paso ¿Sabes?—Tae frunció su ceño al mencionar su país, negó para sí y aclaro su garganta. —Bueno, si alguna vez existió algo llamado Busan —Caleel suspiro, no entendía porque Tae estaba contando algo privado y sobre todo a él. ¿Qué acaso no lo miraba con desconfianza como todos? —Mi papá había salido por provisiones y cuando regreso, regreso enfermo. Ataco a mi mamá. —Caleel miro a Tae, él miraba fijamente el piso. —Y después... Intento atacar a Jong...—Su voz tembló. —JongHyun tenía ocho años. Y yo trece. —Suspiro. —Creí que conforme creciera, sería difícil. Él solo era un niño cuando vio a nuestros padres morir... Cuando me vio matar a nuestro padre. —Su voz tembló con lo último y noto como se controlaba para no derramar lágrimas.
Caleel se aclaró la garganta.
—Ya no era tu padre. Él quería matar a Jong. —Hablo en un hilo de voz, Tae asintió.
—"Te prometo que no te va a pasar nada mientras estés conmigo" eso le dije a Tae cuando huimos de ese lugar. Pensé que él me odiaría pero... nunca lo hizo.
— ¿Por qué se molestó contigo?
—Porque soy su única familia. Él tenía solo ocho años, estaba aterrado y cada vez que salimos de expedición y vemos Alterados, pienso que recuerda eso. Por eso cuando me enfermo o me hiero se aterra, tiene pánico de que me vaya. Él es un chico de Busan, no mostramos sentimientos con facilidad, así que él simplemente se enoja cuando no quiere mostrar miedo o preocupación.
Caleel miro en dirección a donde se encontraba JongHyun y vio que ayudaba a Shannon a curar a otros chicos.
—Cuando te ayudamos. —Hablo Caleel sin quitar la atención de ambos chicos, después suspiro y miro a Tae. —Dijiste que era la sangre... ¿Qué significa?
Tae sonrió.
—Creo que el experto eres tú.
Caleel sintió culpa, se sentía un miserable.
—Son como pirañas. —Musito Tae. —Se vuelven locos cuando huelen sangre, de esa forma nos rastrean más rápido. Cuando dije eso, lo dije porque mi rodilla sangraba y corrían detrás de mí... Y ustedes estaban conmigo, tuve miedo de que me persiguieran con ustedes.
Evan había anunciado que todos iban a descansar hasta la mañana, al parecer el lugar estaba seguro. Y muchos habían terminado heridos, tenían que recuperarse para avanzar.
—No sé cómo le haré para levantarme mañana, pero ya me las ingeniaré. —Murmuro Tae mientras cerraba los ojos para dormir. JongHyun ya se le había adelantado y estaba recargado sobre el hombro de su hermano. Caleel intento dormir pero fue algo contraproducente, no descanso. Soñó con JongHyun de niño, un niño atemorizado mientras veía como su padre atacaba a su madre y después lo miraba a él con la boca llena de sangre, sangre que había pertenecido a su madre ahora muerta. Soñó como JongHyun lloraba desesperadamente rogándole a su padre que "No lo castigara". Soñó también con Tae, aquel niño de trece años que asesino al Alterado que antes había sido su padre con el fin de salvar a su hermano menor. Después volvió a soñar con aquella joven de cabello castaño.
«— ¡NO ME LASTIMES! —Rogo en aquella habitación, Caleel no sabía de qué hablaba, solo él se veía detrás del vidrio contemplándola mientras hacía anotaciones y seguía mirando las jeringas frente a él. Las analizo y señalo una con una sustancia de un tono lavanda. El hombre de traje negro especial asintió, tomo la jeringa y entro a la habitación. Caleel observo como la chica forcejeaba mientras intentaban inyectarle aquella jeringa.»
Mi nombre es Aria.
Resonó en su mente, no con su voz. Sino con una voz femenina.
Del área 2, Influyente.
Aria... Mi nombre es Aria...
Todo se volvió oscuro y lleno de pánico.
Aria...
Sintió como alguien lo sacudía de forma brusca, alguien lo estaba zarandeado.
Mi nombre es Aria...
— ¡Caleel!
Del área 2, Influyente.
—Hombre, despierta.
¡NO ME HAGAS DAÑO!
—Oye, Caleel.
— ¡ARIA! —Grito Caleel y se encontró con las miradas llenas de incredulidad de Tae, Jong y Shannon. Jong tenía una mano en el hombre de Caleel con el que lo estaba movimiento, Caleel fijo su vista en su mano y noto que abrazaba su muñeca donde tenía su marca.
— ¿Aria? —Interrogo Shannon.
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Renegados ©
Science FictionEN EDICIÓN En los años futuros el planeta Tierra dejo de existir como algún día lo conocimos. Los humanos olvidaron que lo eran y comenzaron a rendir tributo a la tecnología, la cual comenzó a sacar provecho de todo. La guerra dejo de suceder, aunqu...