Síntomas inusuales

16.4K 2K 126
                                    

El cielo estaba azul y despejado, dándole oportunidad al sol de alumbrar en todo su esplendor, picando la piel de quien se expusiera mucho, por eso Jimin se encontraba protegido, por las gruesas ramas llenas de hojas de un alto e imponente árbol, su cabeza reposando sobre el regordete muslo de su hermano mayor, ambos habían heredado las piernas de mamá.


El alfa reía con ganas, mientras soplaba burbujas de jabón, que enloquecían de inmediato a unas muy peludas y tiernas criaturas. Una fresca brisa paso con fuerza, desordenando el grueso pelaje marrón de los dos oseznos, quienes se encontraban en sus dos patas, corriendo y tratando de cerrar sus colmillos en torno a las esféricas pompas, sin éxito.


De pronto un oso adulto interrumpió la paz, aplastando la vegetación a su paso; lanzo un alarido de amenaza, mientras con ojos rojos y desviados, se dirigía a gran velocidad hacia las indefensas criaturas, que corrieron y lanzaron quejidos de ayuda, a lo largo de verde claro. Se oían como gemidos ahogados, apenas audibles sobre los gruñidos del loco oso, que aplastaba sin piedad las pocas flores. Atravesaron la débil corriente del río que cruzaba el lugar; fue allí lejos de las rocas, donde se les lanzo encima, atrapándolos y comenzó una encarnizada lucha en la fresca agua. La húmeda nariz del oso le daba vueltas a un cachorro, hasta ponerlo seguro en el suave pasto de la orilla, mientras el otro se le subía al lomo con facilidad, usando una pequeña elevación del desnivelado terreno; mordiendo en el acto, la oreja del atacante.


-Ese tonto ¿Qué le está haciendo a mi cachorro?- Gruño Yoongi, viendo con sorpresa como los dos oseznos humillaban al omega a punta de mordidas, sometiéndolo bajo sus pequeñas patas; fue ahora turno de pedir ayuda para el adulto, que trataba de proteger las partes sensibles de su cara, haciéndose bolita. Los cachorros aprovecharon para seguir intimidándolo, obligándolo a huir de ellos y sus muy feroces mordidas -Ese es mi cachorro, defendiéndose de los idiotas.


-Solo están jugando- Sonrió Seokjin, mirando orgulloso como su pequeño cachorro, se erguía orgulloso sobre su presa dominada, en una pose recta y digna, como se lo había enseñado -Viste como mi pequeño defendió al tuyo, será todo un alfa, estoy seguro.


-Disculpa, creo que viste mal como sucedieron las cosas- El alfa entrecerró los ojos, viendo molesto al mayor de todos -Desde mi perspectiva, Zelo se enfrentó hocico a hocico, tu mocoso ataco a traición por la espalda.


-¿A traición? Fue listo que es diferente, sabía que no le ganaría en un enfrentamiento directo- Rebatió el omega.


-Puf, en cambio Zelo, confió en su fuerza, no se va con jueguitos, esa si es una actitud de Alfa- Jimin siguió con los ojos cerrados, disfrutando la calidez del ambiente, los extraños sonidos de los osos jugando, hasta que sintió una mano en su vientre, despertándolo de un salto, totalmente alerta.


-¡Meoow!- Casi araña la mano de Jin, pero se frenó a tiempo -Me asustaste- Lo acuso con los ojos acuosos.


-Lo siento, es que es un bulto tan adorable- Se excusó pobremente, con una sonrisa nerviosa -¿Puedo?- El gatito refunfuño, volviendo a recostarse y dejar su vientre expuesto, dándole un si implícito.


-Estas demasiado susceptible a todo, parece que tuvieras constantemente un palo en el culo.....OH WOWOW- El Alfa comenzó a quejarse por la potente mordida -Jimin suéltame, no soy Jungkook para soportar esto- Pero el minino estaba molesto, siguió su ataque, mientras el mayor no podía quitarlo sin sentir que podría lastimarlo -No es justo, pequeño caprichoso, yaaaaa, los siento- Se rindió entre gruñidos hasta que el omega lo libero.

C.A II "Amar y ser amado" [2]/Kookmin (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora