Narra Mar:
Thiago deja a Bruno en mis brazos y mira detenidamente a por todos los lugares del cuarto. Mientras, mezo a Bruno y le canto para que deje de llorar y esté tranquilo. Cuando Thiago termina de revisar todo, vuelve conmigo a la cama.
— No hay nada Mar, te lo juro.
— ¿Y entonces por qué se ha caído la figurita de la mesa Thiago?
— Tal vez estaba mal puesta o algo. Mar, no te pongas nerviosa por todo, mirá como se pone Bruno de nervioso cuando se asusta, y más si te ve así. Así que por favor, tranquilizate, tampoco nos han tirado un tiro, solo se ha caído una figurita de porcelana. Mañana nada más despertar, llamo a Tina para que limpie el desastre. Y vos enano, te tenés que acostumbrar a dormir en la cuna y no en los brazos de mamá. Sé que son cómodos, pero se la cansan, ¿sabés?
Hago puchero cuando Thiago termina de decir todo eso:
— Déjalo que duerma donde quiera, no me importa si se me cansan los brazos, lo más importante es que él duerma. A veces me molesta que llore a la noche, pero es normal, no es más que un bebé y necesita los cuidados que le dan sus papás Thiago. No seas duro con él.
Thiago revolea los ojos:
— No soy duro, trato de no malcriarlo. Porque si sigue así, va a dormir en la cama con nosotros hasta que cumpla los 21, mi amor. Tiene que ser más autónomo, ¿entendés?
Niego con la cabeza:
— ¿Auto ki?
— Autónomo Mar. No acostumbrarse a dormir con nosotros, es decir, no estar tan pegado a sus papás, mi amor.
— Tiene 4 meses Thiago. Si está pegado, como vos decís, es algo completamente normal. Si querés lo dejamos en la cuna todo el día y que se cambie los pañales y se tome la mamadera él solo, ¿querés? Hacemos es, ¿dale?
Thiago suspira:
— Malentendés todo, Mar.
— ¿Cómo que malentiendo Thiago? Por vos Bruno tendría que nacer gateando también. ¿No entendés que tiene 4 meses? ¿Qué es un bebé nada más? Que estés enojado por lo de tu papá no tiene nada que ver con que nosotros tengamos la culpa.
— No te estoy echando la culpa.
— Estás diciendo que Bruno duerma solo.
— Y tiene que dormir solo. No creo que yo con 4 meses durmiera en la cama con mis viejos, y vos menos.
Suspiro:
— Por eso mismo, le quiero dar a Bruno lo que nosotros no tuvimos Thiago, le quiero dar una verdadera familia... A la que yo descubrí cuando era muy grande. Porque a mi me abandonaron de recién nacida en una iglesia. Y no quiero que a mi hijo le falte el amor que a mí me falto ni por un minuto. Y si no comprendes eso, es de primero de paternidad.
— Amo a Bruno, Mar. Amo a Bruno y te amo a vos — me mira con el ceño fruncido —. Estás haciendo de un nada un mundo. Dejá de decir las cosas que decís, no me hace falta saberlas, yo ya lo sé. Ya me conozco tu historia Mar, me conozco tu historia entera.
— ¡¿VES CÓMO TE IMPORTO UNA MIERDA?! — grito enojada, y entonces Bruno empieza a llorar más fuerte.
Thiago intenta agarrarlo pero yo le aparto rápidamente:
— Andate Thiago, no quiero verte.
— ¿Me estás echando de nuestro cuarto?
— Sí, te estoy echando — digo re caliente mientras mimo a Bruno para que se calme —. Andate.
— Sos estúpida — Thiago se levanta de la cama y sale del cuarto pegando un portazo. Y sí, creo que esta ha sido nuestra primera pelea en serio. Y delante de Brunito, que eso es lo peor.
Miro a Bruno, quién está rojo de llorar. Le hago mimos mientras intento calmarlo, rogando casi que eso dé resultado:
— Dale Bru, no llorés más, estás con mamá, y papá volverá en un rato, estoy segura de que papá va a volver en un rato.
-...-
Narra Thiago:
Bajo muy enojado a la cocina. Me siento en la silla y pego un golpe en la mesa de madera. Con Mar no se puede hablar, siempre quiere tener la razón. ¿Cómo puede haber dicho que ella me importa una mierda? Si me importara una mierda, ahora ella y Bruno estarían viviendo en un refugio para madres solteras, apenas tendrían ropa y alimentos. Hubiera separado a Mar de sus amigos, tampoco hubiera conocido nunca a sus papás... Pero, gracias a que me importa mucho y a que la amo, Mar y Brunito están bien.
Y lo peor es que me ha echado de mi cuarto. ¡DE MI PROPIO CUARTO!
De repente, mientras estoy inmerso en mi gran enojo, Rama entra en la cocina con el pijama y los ojos achinados de recién levantado:
— ¿Thiago qué pasa? Vengo a beber agua y te veo acá...
— Me peleé con Mar, Rama. Es una paranoica... Me grito que la importo una mierda, solo porque le quiero enseñar a Bruno que duerma en la cama.
— Tenés razón, Mar le mima demasiado. Pero también tenés que entenderla, es muy sobreprotectora con Brunito. Pero, sufren los tres si se pelean...
— Ya sé... Pero además, Mar me echó del cuarto.
— ¿Querés que hable con ella?
— Te dejo, pero no se si te escuchará...
— Bueno, yo hablo con ella, no te preocupes, y tranquilo. Todo va a estar bien amigo — Rama me abraza.
Todo va a estar bien, tal vez... ¿PERO CUANDO?
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Padres Adolescentes 2 - Continúan los problemas
FanfictionDe regreso en el Hogar Mágico, Thiago y Mar se enfrentan a la crianza de su hijo Bruno, la cuál no va a ser nada fácil. Por su parte, Jaz y Tacho, comienzan a tener relaciones sexuales sin ningún tipo de protección, de la cuál, nacerán consecuencias...