Padres Adolescentes 2 - Continúan los problemas

CAPÍTULO 25: "El amor de mi vida"

Narra Thiago:

Mar y yo estamos un buen rato besándonos hasta que ella se separa en primer lugar. Me sonríe y me dice:

— Gracias.

— Creo que es lo mínimo que puedo hacer — digo sonriendo —. En primer lugar, se merecen lo mejor, la tengo que poner a Tefi las cosas claras. Y en segundo lugar, le tengo que dar un buen ejemplo a mi hijito — miro a Bruno —. ¿Verdad, enano? ¿Verdad que papá te tiene que dar un buen ejemplo para que cuando seas grande trates bien a las mujeres?

Mar ríe, agarra a Bruno y lo coloca en mis brazos. Bruno comienza a mover sus bracitos y sus piernecitas y le sonríe a Mar:

— A pesar de todo, nuestro hijo es más tierno que yo — opino —. Tal vez va a tener a muchas más chicas atrás mío.

— ¡Thiago! — exclama Mar como retándome.

— Perdón, perdón... — me disculpo riendo.

— Igualmente, todos los bebés son tiernos, Thiago. ¿No ves que ninguno tiene maldad? Bruno pasa la mayor parte del día haciéndose encima, comiendo, durmiendo y pidiendo que le den cariño y amor. Leí en un libro de psicología de mamás... Osea de mamás primeras...

— ¿Querrás decir primerizas?

Mar suspira:

— Ufa Thiago — se queja —, no me corrijas. Primerizas, o como se llame. Siempre me corregís — Mar vuelve a suspirar divertida —. De chiquita no fui al colegio, da gracias que avanzo bastante deprisa.

Río:

— Sí, se que avanzás deprisa. Pero bueno, no te quejes tanto y explicame de una vez que leíste en ese libro.

— Está bien — ella sonrío —, leí que los adultos tienen el carácter ligado a lo que sienten ellos cuando son bebés. Es decir, cuando un bebé está mucho con sus papás, le están cargando en brazos todo el tiempo y cosas así, les cuesta más desprenderse de los padres cuando son grandes, en cambio, cuanto más tiempo dejas solo a un bebé, empiezan a ser autosuficientes, y por eso necesitan poco a los padres.

Sonrío:

— Con eso querés decir que Brunito va a ser poco autosuficiente, ¿verdad? Porque Bruno se pasa todo el día pegado a nosotros. Pero, entiendo que quieras estar todo el día pegado a él, por lo que vos pasaste de chiquita y todo eso...

— Sí, eso es... Quiero que esté acompañado la mayor parte del tiempo. No sé, creo que es demasiado...

— No, así está bien. Vos no te sientas mal por lo que puedas hacer... Un bebé necesita a sus padres la mayor parte del tiempo, porque sino está acompañado también pueden pasar cosas malas. Y es obvio que ni a vos ni a mí nos gustaría que a Bruno le pasara algo malo.

— Eso es obvio Thiago...

— Exacto — le doy un beso en la sien a Bruno y Mar sonríe de vuelta —. Por cierto, ¿puedo hacerte una pregunta? En fin, creo que ha pasado algo con Jaz...

— Ajá — dice Mar —, lo del embarazo de Jaz.

Asiento con la cabeza:

— Se lo he contado a Nico, creo que era necesario. Lo nuestro lo ocultamos y pudo ser peor. Así que lo mejor que he creído que podía hacer era decírselo a Nico.

Mar cierra los ojos. Sí, tal vez podría haber metido la pata... Pero Nico no haría nada en contra nuestra, eso lo tenía muy presente. Actuaría como debería hacerlo. No teníamos que temer a la actuación de Nico.