Magic Nature

Examen; Medicina

Al día siguiente, no era tan temprano el examen, así que decidí relajarme un rato bebiendo un té de hierbas que yo misma rescaté del bosque y preparé. 

Al salir a ver la mañana despejada, Argos se acercó a mí.

  —¿Lista para tu examen?—lo miré y asentí—recuerda que medicina en realidad es el examen de magia, evita decir que sabes de plantas y demás—tomó la taza de barro donde mi delicioso té reposaba caliente y lo bebió de un sorbo. Se limpió la boca con su pañuelo de bolsillo y llamó a mis otros dos compañeros, iniciaría el examen.

Al llegar, tres camillas de metal estaban al lado de una mesa con varios utensilios. Alguna que otra planta medicinal y al fondo, varias plantas de distintas naturalezas, algunas medicinales, otras que realmente no hacían nada y por supuesto, unas venenosas.

—Bienvenidos a mi prueba—miré como Kalas se unía a nosotros mientras que Herma daba instrucciones—esta prueba no será tan larga como las anteriores, ni tan... difíciles, no se confíen, la presión física la tendrán en la mente. Kyle, Dimitri y Jury, serán intoxicados con una rara enfermedad que solo los magos pueden sanar, la enfermedad es mortal y en minutos pueden asesinar al paciente. Una de las muchas maneras de los magos para estabilizar al paciente es con las plantas medicinales, ustedes deberán saber cual usar, si se rinden, Kalas sanará a nuestros amigos, decidan a quién sanar—ella se apartó y los tres se pusieron en una fila para ser escogidos, miré a Dimitri, confiaba en él, quería sanar a Dimitri

—Dimitri—dije primero, todos me vieron y él asintió, se encaminó a la camilla y se acostó con una respiración pesada, estaba nervioso... seguramente, ¿quién no? podía matarlo.

Kyle y Jury hicieron lo mismo al ser escogidos y Kalas contaminó de la enfermedad a los tres lobos, quienes comenzaron a retorcerse y escupir una mucosa verde con amarillo, la sangre la mantenían en el escupitajo.

Corrí al lado de las plantas y lavando mis manos y atando mi cabello tomé seis plantas. Corrí nuevamente a donde mi amigo y lo analicé, había leído de esta enfermedad, pero siempre la traté con magia, nunca con plantas, sabía cuales utilizar. 

No podía tratarlo si estaba consciente, tomé mis dedos y las coloqué en su cuello haciendo que poco a poco su presión bajara y su cuerpo se relajara. Podría trabajar más fácilmente de este modo.

Tomé el borde de su camiseta y con mis dientes la rompí, dejando su esculpido cuerpo a mi vista. ¡No es momento de devorar a Dimitri Alex! 

Intentando concentrarme, tomé una de las plantas y con otras las revolví, haciendo de esto una especie de bebida, con unas hojas rojas venenosas debía calmar las pelotas que se formaban debajo de su piel, cubriendo su cuerpo con éstas, acerqué la mezcla y lo hice beber, comenzó a toser desesperado por oxígeno pues el sabor es horrible, pero las pelotas comenzaban a explotar y las heridas en su cuerpo aumentaban, mantenían el pus y la sangre salpicando por todas partes. Aunque fuese realmente desagradable, podía felicitarme a mí misma por ir en el camino correcto. 

Tomé de los utensilios una jeringa y comencé a succionar el pus con ella, en cada una de las pelotas. Corté un pedazo de lija y con fuerza las limpié, Dimitri gritaba y sus lágrimas salían, odiaba como sonaba su voz en ese estado, pero la hemorragia interna había cesado gracias a mi poción medicinal. 

Con una aguja e hilo cerré las heridas y limpié mi sudor con mi antebrazo, la calentura le agarraba al pobre, así que tomé la camisa de él y la empapé para dejarla sobre su cabeza y cada cierto tiempo ir rotando por la otra parte. Tomé una navajilla que reposaba en los utensilios y abrí la piel de su brazo, con otra jeringa inyecté un líquido viscoso realizado por tres plantas, entre ellas la sábila y marihuana, dos plantas medicinales realmente importantes para tratar esta enfermedad. 

Cuando logré que Dimitri abriera los ojos revisé su lengua, su color natural estaba devuelta. Miré a mis otros dos compañeros que con torpeza intentaban salvar a sus pacientes, no obstante, el timbre sonó y solo dos logramos salvar al paciente, Kalas ayudó a Jury a recuperarse y revisó a los otros dos, Kyle iba en buen camino a recuperación y Dimitri estaba en perfecta condición, lo que me llevó un gran alivio interno. Las heridas cosidas le sanarían por su rápida recuperación de lobo.

Herma miró desde el tercero hasta mi persona, me achicó los ojos fulminante y abrió la boca

  —ustedes dos, Jerey y Alex, felicidades, siguen en esta academia, tú, imbécil, ¿no sabes que pudiste matarlo? piérdete de mi vista escoria—apreté mis puños con fuerza molesta. Cuando mi compañero abrió la boca

—Solamente quedamos dos, nos quedan dos pruebas, lo que hará que si logramos pasar los dos la siguiente no importa, pero si uno de los dos falla en la siguiente, ¿qué sucederá con la prueba final? ¿se suspenderá?—pero Argos negó con una sonrisa

—Aunque solamente quedase una persona para la prueba, ésta realizará sin ningún problema la prueba—dicho esto, un escalofrío recorrió mi cuerpo. Dos más y lograría pasar el curso

—descansen, mañana les tocará una gran prueba física—Herma se volteó y se fue con todos los demás, Kalas se acercó a mí y me guiñó el ojo con su mano en mi hombro para irse a su academia, no sin antes decirme que nos viéramos al salir

Jerey caminó a mi lado a nuestro refugio y se fue a duchar, esperé mi turno y me puse ropa para salir en silencio, Kalas me esperaba sentado en un árbol fumando un cigarrillo. Escalé hasta la rama de él y miré el paisaje

—Esa enfermedad es muy rara, los lobos saben de plantas por su instinto, pero Jerey es hijo de doctores, claramente él sabía tratar la enfermedad, mientras que Carl, es hijo de dos lobos cazadores, lo que tenía un uno de probabilidad de aprobar la prueba. Pero tú, tu no eres un lobo, no eres nada, pues eres todo. ¿Cómo lo hiciste?—miré las nubes pasearse en el cielo y suspiré

—Cuando mi madre vivía, un señor llegó con esa enfermedad, mi madre la trató con magia, pero ciertamente, necesitaba de plantas y me las pedía, cuando lo salvó, otro hombre llegó con la misma enfermedad, pero mi madre no usó magia, pues era un cazador de magos, y utilizó solamente las plantas, lo apuntó en uno de sus libros y me los aprendí, sabía a la perfección que no podía utilizar la magia para salvar a Dimitri, pero memoricé la enfermedad. Aunque, mi madre duró horas en sanar al hombre, improvisé un poco y lo hice en menos tiempo. Me gusta la medicina natural—expliqué, Kalas chasqueó los dedos y una burbuja apareció frente nuestros ojos

—ven conmigo—ambos saltamos a la burbuja y la academia de magia se hizo presente—¿hace cuanto te gusta Dimitri?—lo miré asombrada, negué con la cabeza—¿te enamorarás de otro chico cada vez que cambies de academia?—se le veía molesto—Dimitri es la razón de que evolucionaras como lobo, ¿no es así?—asentí con timidez—no te relaciones tanto. Eres una Gruty, no es un juego Alex, él sabrá al respecto, pero no puedes andar a lo libre, Dimitri no es tu hombre—dicho esto caminó dentro del edificio

—Nunca dije que lo fuera—lo alcancé—pero tengo muchas dudas Kalas, si logro evolucionar como lobo, cuando vaya a la academia de vampiros, ¿tendré que beber sangre? ¿evolucionaré como vampiro?—él me miró de reojo y asintió

—Como Gruty, tu tienes la posibilidad de encogerte o ser gigante, tienes la posibilidad de sacar una cola, de sacar colmillos o de transformarte en un lobo. Pero Alex, tu verdadera forma, es de una bruja, no lo olvides, no pierdas tu esencia de maga, ninguna otra academia te dará tanto poder como lo dará Magic Nature.

Asentí comprendiendo cada una de las fases en las que podría estar. No me llamaba beber sangre, pero no sería durante mucho tiempo...

Al volver, Jerey dormía tranquilo, me acosté y cerré mis ojos. Dos últimas pruebas....