XXXII-Memories from the past.

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15/Dic/18
La creciente soledad inundaba mi corazón, el dolor en mi pecho aumentaba y las lágrimas se anegaban en mis ojos. Era lamentable, había venido a LeesVille con la oportunidad de ver a mis seres queridos una vez más antes de las fiestas, pero o todo era igual o todo era diferente.
<<Creo que vine con una alta expectativa>>Pensé por un momento.

Pero es que no era así, todo lo que pasaba por mi cabeza era real, y ahora sentado en el borde de mi cama las cosas se hacían cada más presentes.
Realmente había hecho una buena decoración en el lugar, adornado totalmente con posters de mis bandas y franquicias favoritas, tenía la computadora y ahí en un rincón seguía aquella base de datos improvisada.
<<Vaya, sí que estoy loco>>Profundicé.
Aún no podía terminar de creer todo lo que había hecho con tal de encontrar a Katherine, y a pesar de ello <<Nunca la encontré>>, todo mi esfuerzo, mes tras mes, quedó sepultado.
<<Bueno, al menos me esforcé>>
Había decorado bien la casa, me seguía sorprendiendo de mí, antes de salir (Ya que pasaría el resto del fin en casa de mis padres) decidí que era tiempo de dar una última limpiada a la casa.
La cocina ya estaba recogida, al igual que el comedor, ya que toda la semana solo bajé para comer y cosas así, lo sorprendente era el total desastre que había en el cuarto. Desde que me había ido había quedado todo patas arriba, en primera instancia pensé que alguien pudo haberse colado en la casa, pero esa idea se fue de mi mente ya que todas las cosas de valor aún seguían ahí.
Caminé por la habitación con delicadeza <<Vaya Román del pasado, te esmeraste bien.... ¡Pero no en recoger!>>
Bueno, bueno, no había razón para enojarme, de todos modos, había sido yo el que había dejado el cuarto en ese estado.

Sin darle más vueltas al asunto, tomé una escoba para barrer por el cuarto no sin antes recoger las cosas en el suelo; Encontré desde zapatos hasta envolturas de golosinas (más que nada de gomitas), hasta que, por fin, en un rincón casi oculto por la ropa que tenía encima, se encontraba una cámara fotográfica, la encendí y solo tenía una foto, éramos Katherine y yo con ropa de invierno; Mientras analizaba la foto con detenimiento mi cabeza comenzó a arder y acto seguido caí sobre mi cama.

9/Enero/18.
Entre en una especie de recuerdo, era como si pudiera ver lo que estaba sucediendo, No... No era, lo estaba viendo de verdad en eso Robert comenzó a hablar.
—¿Están listos Chicos? —Mencionó mientras apuntaba con la cámara a un Román completamente rasurado sosteniendo a una radiante Katherine.
—Vamos Robert, apúrate, no tenemos todo el día—Contestó aquel Román, Katherine lo sostenía con nerviosismo.
—Está bien, aquí va. *Click* Sonó e instantáneamente desperté de aquel trance.

Al caer en la cama había soltado al cámara, la cual ya estaba rota en el suelo, tanto la pantalla como el lente se habían roto por completo y el objetivo había caído cerca de la parte de abajo de donde estaba acostado.

<<Mierda, otra cámara ¿Es en serio?>>

Me agache para recogerla, pero al momento de querer tomarla la empuje hacia adentro, tomé mi celular y encendí la linterna, si de por sí mi cuarto era un asco, todo lo que había debajo de la cama era aún peor, preferiría mil veces estar en la cárcel a estar en un lugar como ese (Y ya lo estaba), mientras acercaba mi mano hacia el objetivo, rocé la madera de la cama y sentí una especie de desliz en la madera, introduje mi mano en aquel agujero, al momento de tomar el objeto que se encontraba adentro sentí un poco de miedo así que con rapidez lo retiré de ahí, como lo hice con demasiada fuerza caí de bruces hacia el centro de la habitación.

Me incorporé rápidamente, solo para darme cuenta que el objeto que tenía entre las manos, llevaba mi nombre y el de Katherine, antes de comenzar a hojearlo, me dispuse a acostarme en mi cama, por si sucedía algo como momentos atrás, abrí aquella especie de cuaderno, su portada estaba constituida por muchas estrellas y rezaba como título "El tiempo junto a ti".

How Do You Feel?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora