Conduje la noche entera, apagué mi celular y simplemente encendí la radio.
Probablemente no llegaría en un día a Oxpark, pero quería con todo mi corazón y fuerzas seguir manejando; El dolor en mi pecho era monumental, pero tenía que hacerlo no podía estar con alguien si no iba a dar todo de mi en el proceso.
Estaba huyendo, huyendo de mis emociones, de Sarah, de Katherine de mí mismo.... Pero, tenía que encontrarme de alguna manera.
El cielo estaba nublado, el viento arreciaba con fuerza y la nieve caía con frivolidad.
Aceleré mientras escuchaba todas aquellas canciones en la radio que me hacían sentir cada vez más mal; Era como si fuera descendiendo en una espiral de emociones la cual podría lanzarme de ahí de golpe.
Génesis me había prometido que el dolor pasaría después de saber la verdad, pero... A mí parecer el dolor era mayor y constante, los recuerdos que me arribaron en la gasolinera me habían destrozado por completo y no sabía con exactitud si eso era algo bueno o malo.Solo sabía que lo deseaba con todo mi corazón, anhelaba con todo mi ser el poder observar aquellas tenues imágenes nuevamente esa ansía de conocer la verdad, ese impulso de mi naturaleza humana por comprender y desentrañar cualquier curiosidad puesta enfrente.
Tenía por seguro las cosas, sabía que por mi actitud todo se había estropeado, pero.... << ¿Esa sería la verdadera respuesta?>> <<Y de ser así ¿No estaba ya curado del todo?>> Pensé con cierta intranquilidad.
Todo aquello me tenía tan cansado y frustrado, por haber sido tan débil, por haber sido tan tonto y por no tener el valor suficiente para enfrentar aquel miedo arraigado desde hacía meses... Morir.
Llegué por la tarde con un enorme cansancio sobre mi espalda; Tan pronto como entré a la ciudad busqué un hotel para dormir. Cada día revisaba las ganancias de mis servicios en internet, así como las acciones obtenidas por antiguas inversiones en la bolsa.
Todo era tan raro en un chico de mi edad... Pero ese era un sueño que había tenido desde hacía tiempo, el poder ser libre financieramente.
Renté un cuarto de hotel cerca de la aquella rivera pedregosa, el hedor a pescado no lograba escalar hasta mi doceavo piso. Y Aunque pudiera era la menor de mis preocupaciones.
Busqué en internet una manera especial de lograr conectar mis emociones para obtener sueños más... "Lúcidos"; Sin embargo, sólo encontraba cosas relacionadas con lo psicodélico y demás.
Por el cansancio del trayecto abandoné total esperanza y caí dormido; Qué ironía buscar algo para dormir placenteramente cuando el cansancio es el ingrediente principal en la sazón de los sueños.
20/Febrero/19
Fue algo ilógico, extraño e impotente; Y este último factor fue el que me hizo despertar de golpe, había sido un sueño poderoso como si de una visión divina se tratará.
Construía un barco... De madera pura y en la costa; Tal y como había soñado en mi juventud... Aún recordaba con dolor aquella tarde de abril en la cual debatía con Kat sobre porque si y porque no viajar conmigo.
Tal vez... Sólo tal vez esta sería mi verdadera manera de alcanzar aquel estado de paz mental que tanto estaba anhelando.
Pasé el resto del día buscando empresas que pudieran venderme materiales, así como contratistas y arquitectos. Gracias a haber vivido austera mente en casa de los Colleman había recaudado una cuantiosa suma de dinero la cual utilizaría para cumplir aquel sueño de mi juventud... Y si no iba a poder hacerlo con Katherine cómo me hubiera gustado, tendría que cumplirlo por mí solo.
???/???
No fue hasta dentro de una semana que logré reunir a mi equipo de trabajo; Había pasado todo aquel tiempo en la habitación del hotel, me veía tan demacrado, ordenaba comida para llevar e iba al baño cada tanto, pero... ¿De verdad era esto a lo que llaman depresión?; Yo lo sentía más como un sueño... O bien una pesadilla.
Me miré en el espejo, tenía largas ojeras y mi barba demasiado desaliñada al igual que mi cabello.
Tomé la máquina rasuradora que cargaba en la mochila y procedí a atacar a aquella barba.
Observé la fecha en mi celular justo antes de reservar una cita en la peluquería.
<<Vaya.... 1° de Marzo... Estoy empezando este año del asco>> Pensé mientras encendía el auto.
Mientras conducía al lugar escuché las noticias en la radio.
"En algunas semanas quedará lista la estructura del observatorio—" Mencionaba una voz a modo de respuesta.
<<Esa voz la conozco>> Mencioné a mi interior.
"Posiblemente cada cierto tiempo dejaré que los niños y niñas de Foxarc puedan observar a través de este enorme telescopio" Continuaba la voz.
<<Sarah>> Gritaba su nombre internamente mi corazón.
Cambié de estación y... Como si de una maldición se tratará no había más que estática.
Aparqué en el estacionamiento y entré a la estética; la chica no tardó casi nada en dejar mi pelo como nuevo.
Agradecí por el corte, pagué y dejé mi respectiva propina. Al abandonar el local marqué a mi asistente para saber en qué astillero iba a comenzar la construcción de mi bote.
Al momento de darme la ubicación, subí al vehículo y me dirigí a la posición. No sin antes pasar por una tienda de autoservicio a comprar algunas chucherías, si bien no había estado haciendo ejercicio con anterioridad, el comer chucherías tampoco ayudaría en mi forma física y eso lo lograba notar con mi aumento de peso (Aunque no era demasiado y ni siquiera se había reflejado) sabía que tenía que estar al pendiente de ello, no quería perder el cuerpo que desde niño había tenido.
Volví a estacionar mi vehículo y saludé a Marty (Mi asistente) el cual me presentó a Henry el primero al mando en la construcción del barco.
—Y bueno ¿Conoces algo de barcos chico?— Empezó.
—Para nada, solo es un sueño personal— Comenté sin ánimos.
—Oh... Entonces no debería tomarme tan enserio este encargo ¿O sí?—
—Claro que debería tomárselo enserio, no quiero cualquier barco, ¡Quiero una fragata para mí solo!— Mencioné.
—¿Está seguro de ello?— Soltó —No creo que una sola persona pueda tripular una nave de esa envergadura.
—Entonces que me recomienda conducir— Solté.
—Le recomiendo que lo acompañemos, un viejo lobo de mar como yo, desea acompañar a un chico en sus travesías; ¿Qué dices?, ¿Nos das la oportunidad?— Contestó señalando a sus compañeros.
—¿Como ves Marty?, ¿Quieres acompañarme?—
—Para esto me paga ¿O no señor?— Se limitó a contestar.
—Muy posiblemente, pero recuerda, soy tu amigo, no tu jefe, aún tienes libre albedrío... Así que ¿Qué decides?— Solté.
—Yo voy a donde usted vaya— Cortó.
—Entonces es un trato Henry— Mencioné —De ahora en adelante, quiero que me llamé capitán Román— Comenté con un tono burlón.
—Por supuesto Capitán, que empiece la construcción de esta bestia— Susurró al terminar.
Me despedí de los trabajadores y me senté en una roca de la costa, entré a mi aplicación de música y volví a dar usar aquella canción de Buckethead; Era tan... Tan deprimente... La herida en mi corazón volvió a expandirse... Y en justo momento ya que la noche caía con esmero.
A pesar de haber estado bien durante la semana y con mi sueño en claro, no podía dejar de pensar en Katherine y en Sarah... En todas las cosas estúpidas que había dicho y hecho: Cómo todo puede cambiar en un instante es tan triste y me produce un enorme coraje... Pero las cosas son así y... No me queda nada más que aceptarlo y tratar de superarlo.
Tal vez este viaje no sea simple casualidad... Tal vez el destino realmente tenga algo bueno preparado para mí.
ESTÁS LEYENDO
How Do You Feel?
Teen FictionRomán un chico que apenas está probando la vida, por azares del destino se ve entrelazado con una persona muy especial. El problema radica cuando un día después de pasar cierto tiempo apegado a Katherine los recuerdos sobre ella son borrados drástic...