XLII-The Decision.

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Pasaron las semanas en Foxarc, cada tanto lograba escabullirme lo cual era para mí el pan de cada día; a excepción del día de San Valentín. Tenía que dejar a Sarah hacer su trabajo y también quería estar sólo, las palabras de Katherine aún resonaban en mi cabeza y el dolor en mi pecho simplemente no se iba.
Cada noche la "Señorita Colleman" (como el arquitecto la llamaba) venía a mi cuarto con la esperanza de que le diera una respuesta; A pesar de que siempre se llevará la misma respuesta Sarah seguía insistiendo en pro de una respuesta afirmativa <<Sabía que tenía que contestar el problema era... ¿Qué debería de contestar?>> Sinceramente no me sentía preparado para llevar una relación pero... <<¿Cómo podría decírselo?>>, <<¿Cómo podría siquiera un hombre aguantar el llanto de una mujer y escuchar que muy dentro de sí la esperanza y la ilusión se irían desmoronando?>>.
Era algo difícil de afrontar pero... Sabía que si no la confrontaba pronto todo se tornaría de muy mal gusto.
<<Vamos Román... Acepta que aún no puedes soltar a Katherine, no ilusiones a la pobre chiquilla>> Me decía mi mente pensante cada tanto y bueno... Tenía razón, no había conseguido sacar de mi cabeza a Katherine ya que... Me costaba demasiado aceptarlo.
Me levanté de mi cama eran cerca de las 4:00 p.m. fui escaleras arriba hasta llegar a la parte donde sería el nuevo observatorio.
Al llegar al lugar pude encontrarme a Kat, Joseph y Sarah conversando <<Tal y como me había comentado Katherine en días pasados ayudaría a su padre con la nueva construcción>>
—Sarah, necesito hablar contigo— Dije con el corazón acelerado y tratando de mantener mis pensamientos en orden.
—Claro, discúlpenos un momento— Mencionó dirigiéndose hacia los otros presentes. —¿Qué sucede Román? —Contestó mientras me llevaba escaleras abajo. —¿Ya tienes respuesta sobre la propuesta? — Comentó con los ojos brillosos.
—Si, ya tengo respuesta— Conteste.
—¿Y bueno?, ¿Qué esperas para decírmelo? — Soltó con emoción.
—La verdad es que deberías calmarte... No creo que sea algo bueno, al menos no para ti— Tragué saliva tras mencionar aquellas últimas palabras —Veras, no me siento preparado para tener una relación, me gustas y mucho, pero eso no significa que quiera estar involucrado emocionalmente en su totalidad.
—¿Oh en serio?, ¿Entonces qué?, ¿Te gusta alguien más?— Preguntó asombrada.
—Déjame continuar por favor...
—Muy bien, continúa— Soltó.
—Como decía, no me siento preparado, no necesito una relación en estos momentos... Eh... Pues pasado unos momentos difíciles y lo mejor o al menos lo que creo que necesito es estar sólo, tal vez por unos días o semanas o meses; No puedo asegurarte nada con sinceridad, pero de verdad que necesito pensar todas estas cosas y aclarar de una vez por todas mi mente— Confronté.
—Vaya... Sí que no me esperaba esto— Contestó desilusionada.
—Perdón si no era lo que pensabas escuchar, pero tenía que decírtelo cuánto antes, eres una chica muy especial Sarah, pero yo, sinceramente no puedo con esto por el momento; Espero puedas entenderme algún día.
—Tratare de hacerlo— Respondió —Entonces... ¿Sólo te vas a ir y ya?—
—Volveré, cuando me sienta completamente, no hagas ninguna estupidez ¿De acuerdo?— Dije mientras besaba su frente.
Le di la espalda y caminé hacia mi dormitorios para sacar todas las cosas que allí se encontrarán, no sin antes escuchar las gotas de llanto que empezaban a caer del rostro de Sarah; pensé en regresar y abrazarla para decirle que todo iba a estar bien.
Aunque... Probablemente sería algo peor de lo que ya había provocado.
Salí del hostal no sin antes despedirme de Bess y el señor Goss; Bess me trató de manera distinta y era algo curioso ya que hasta el gato notó algo, pues se arqueó al verme.


Subí a mi auto y lancé una última mirada al lugar que me había acogido todo este tiempo pensando si realmente había hecho lo correcto, al final del día simplemente era un humano más y esto es lo que algunas personas a veces no llegan a comprender; La confusión, el dolor y la desesperanza se apoderan de los individuos transformándolos en algo que no quieren ser.
No era ninguna excusa para mí ya que yo había seguido el pequeño juego de seducción de Sarah, pero tenía que decirle lo que de verdad sentía de alguna manera, no puedes estar con alguien si realmente no sientes que quieres estar en ese lugar.
Sarah no salió a ver cómo me alejaba y eso solo confirmó aquel pensamiento que de alguna manera, me había hecho llegar a este desenlace <<¿Tendría ya a otra persona en su vida?>> <<Probablemente sí, no había hecho más que dar problemas y ser alguna especie de "Carga" para ella; además no le había prestado la atención que ella requería>> Estás cosas nublaban aún más mi sentir, tanto fue la emoción que aceleré a toda marcha huyendo de aquel lugar el llanto escurría por todo mi rostro y la presión en mi pecho era enorme.
<<¡Maldición Román!, ¡Perdiste a Katherine y ahora a Sarah!>>
<<¿Y todo por qué?, Por el debate de mis emociones>>
<<¿Cómo puede ser tan difícil saber que sentir?; Las personas probablemente objeten que es cuestión de madurez e intelectualismo pero... No estoy del todo de acuerdo con ello, si esto fuera real las guerras y los problemas entre parejas serian casos extraordinarios>>


Entré a la ciudad y me estacioné fuera de una estación de servicio, ya que mi cabeza ardía, y el dolor en mi pecho era sencillamente insoportable; tantas emociones tantos sentimientos entrelazados fueron el producto de mi estruendo mental.
Los recuerdos empezaron a bombardear mi mente como ya había ocurrido en múltiples ocasiones y... Aquello que no había sucedido en la plazuela todo eso que tanto había temido entró y estalló en mi mente.
Al principio, todo se tornó blanco, era como si las imágenes en mi cabeza fueran tan rápidas que los haces de luz derivarán en aquel enigmático color blanco; Hasta que de tanto bombardeo aquello se detuvo recapitulando todas esas memorias olvidadas, soltándome de lleno aquella que me había traído hasta este momento.


17/Febrero/18
—Tengo que... Decirte algo— Soltó aquella Katherine etérea.
<<Cómo había ocurrido en anteriores ocasiones observaba todo desde un plano "Astral" como simple espectador>> Mencionaba a mi persona.
—Vine lo más rápido que pude... Antes de que empiece sólo déjame disculparme por...
—No Román... No te preocupes por ello sólo y... Lo único por lo que hago esto es porque no quiero que lo que somos ahora derive en no ser nada.
—Desde que tú te fuiste yo no soy nada.
—Román... Por favor, no digas esas cosas de verdad, solo harás mucho más difícil todo esto—Mencionó preocupada.
—Muy bien... No te interrumpiré, ¿Qué es lo que tienes para decirme? — Contestó severamente aquel Román.
—Me iré a Foxarc... Mi papá quiere que estudie en esa ciudad y le ayude en el trabajo, además siento que mamá será mucho más feliz así— Soltó Kat.
—¡¿EH?!— Grité.
—Shh... Baja la voz Román...
—¡No puedes solo irte Katherine!
—¡Lo ves a esto es a lo que no quería llegar!, ¡¿Por qué simplemente no puedes dejarme ir?!, ¡YA NO SOY MAS TU PAREJA!, ¡¿QUÉ TAN DIFÍCIL PUEDE SER ENTENDER ESO?!— Gritó a la par.
—¡Pero no es justo!, ¡Todo estaba tan bien aquí!, ¡ERAMOS FELICES POR DIOS!— Había vuelto a alzar la voz el Román de mi recuerdo —¡NO ES JUSTO KATHERINE!— Y como si de un niño pequeño se tratará comenzó a golpear la pared y tirar los muebles.
—¡Yo lo di todo por ti!— Gritaba. —¡¿En qué fallé por un carajo?!— Berreaba.
—¡En esto!, ¡No te sabes controlar!, ¡No puedo pasar el resto de mis días con alguien como tú!— Gritó Katherine.
—¡Y todo por la culpa de tu estúpido padre!—
—¡A mi padre no te atrevas a insultarlo!— Condicionó ella mientras de su rostro caían algunas lágrimas.
—Sabes que es la verdad Katherine, tú sabes que si no fuera por el, tú y yo seguiríamos siendo felices... — Mencionaba tratando de recobrar la consciencia sobre los actos ya que su llanto había hecho que la llama de mi impotencia se tratará de apaciguar.
—Tu.. tu... Tú no eres el hombre del cual me enamoré algún día— Dicho esto cerró la puerta de mi casa en mis narices y huyó no sin antes haber soltado una carta justo en el umbral.
Ese día rompí muchas promesas...
Hacer llorar a Katherine fue la más importante y aquel gran juramento de ir tras la chica de tus sueños no era en esos momentos más que un lamento ahogado.


De vuelta al presente...
Salí disparado de aquella visión sólo para recobrar la conciencia en mi auto; todo aquello parecía como si el tiempo se paralizará solo para entregarme esos vestigios de mi mente, el llanto al contrario de detenerse se prolongó por largas horas mientras que mi reproductor y a través de mis auriculares solo arrojaba la misma canción en sentido de bucle.
"Watching the boats with my dad" de BucketHead.
Esa tarde-noche recobré aquella vieja impotencia y me dirigí hacia Oxpark sin aún saber aquello que el destino me tenía deparado.

How Do You Feel?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora