Enredados pero jamás juntos (Trilogía ENREDADOS){en Edición}

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Realmente fue complicado bajarlo del coche, para meterlo en su casa »mini mansión« le diría yo, es que en realidad es de tamaño normal, nada extravagante... pero por dentro, suelto un silbido al ver todo a mi alrededor, si bien no es como las Mansiones de los multimillonarios de hoy en día, mínimo ofrece la mayor comodidad, tal vez lo veo así, por que vivo en el departamento que me regaló tía Clara, un departamento pequeño, modesto y apto para una sola persona... tiene lo necesario para vivír tranquila, pero vaya que la casa del doctor Mauricio me supera y por mucho, hasta me atrevería a decir que todo el lugar parece ser de mármol pulido, unas hermosas escaleras como salidas del Palacio de Cenicienta en el centro del recibidor... a la derecha una gran cocina, amplia... muy buena como para un chef, y a la izquierda una hermosa sala con los sofás color gris con negro y un televisor tan grande como mi armario o mas, sin hablar de los muebles relucientes, igual que los pequeños detalles... Ya había estado aquí antes, pero jamás había pasado de la puerta.

- Mariaaan...- se queja Mauricio, por más que lo considere, no me sentí capas de subirlo a su habitación, haci que lo recoste en el sofá, logre quitarle su camisa, que habia terminado manchada tras que el doctorsito vómito en el taxi sin previo avisó,y vaya que tuve que soportar las ganas de tomarle unas fotos, este hombre debería ser "modelo de Calvin Klein", logre limpiarlo un poco, y le puse algunos paños húmedos, en la cabeza pues su temperatura hiba subiendo... conseguí una mantita rosada que encontre en la sala y lo deje tapado mientras preparaba un poco de té, es más de medio día y esta es su primera señal de vida...

- ¿como se siente? - preguntó ofreciéndole té, se acomoda sobre su lugar y mira a su alrededor.

- ¿Como llegue aquí? - pregunta confundido.

- yo lo traje, disculpe el atrevimiento... lo encontré tirado en su oficina...- respondo nerviosa, se ve mal... pálido con sus ojos rojos... mi sensible corazón empieza a golpear como loco por dentro, provocándome ganas de llorar...

- no tienes por que disculparte, pero pudiste enviarme en un taxi...- Dice quitándose el paño de su cabeza, es verdad podría pero ¿Debía?

- es que... usted estaba en muy mal estado.- digo tratando de no llorar y no mirar su abdomen cuando se sienta...

¿Que pasa? Emma esto es serio, concentrate.

- lamentó que hayas tenido que verme en ese estado...- añade haciendo a un lado la mantita y sentándose, deja sus codos reposar sobre sus rodillas y sostiene su cabeza, como si quisiera quitarse la... no me jueguen por ser dramática, lo conozco hace dos años y de alguna manera me afecta verlo mal...

- doctor... yo no tengo problema con esto, es más me preocupa verlo así, si hay algo que yo...

- tu ¿que? Emma... que crees que podría hacer otra mujer por mí!!! Si todas son iguales...- suelta con rabia caminando hasta mí...- dime Emma que hice para que mi mujer se fuera sin darme la cara y dejarme los papeles de divorció en la cama donde dormimos los últimos 3 años...- grita sujetando mis hombros y agitandome como si fuese un muñeco... el miedo se apodera de mí, ahora me pregunto si fue buena idea quedarme con él.