Capitulo 21

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Capitulo 21: Realidad

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Capitulo 21: Realidad

POV Aurora

Era un sonido entorpecedor, primero fue un enorme impacto que seguramente partió mis huesos, dolió más que la primera vez, luego vinieron los sonidos y finalmente... nada. La oscuridad me consumió todos los sentidos y por largo tiempo lo único que vi fueron los ojos de Robb antes de dejarme ir a través del extraño portal.

Para cuando abrí los ojos -y no estaba segura- ya había pasado un tiempo y estaba en una habitación blanca, sobre la camilla de un hospital, mis brazos estaban conectados a mangueras que subían a una maquina que goteaba un liquido transparente. Mi respiración era pausada y podía escuchar el molesto piteo de la maquina que regularizaba mi pulso, había un asiento al lado de mi cama y sobre él estaba mi madre, dormida con una revista sobre su regazo y sus gafas para leer caídas hacia un lado.

—Ma... mamá

Me sorprendí de lo mucho que me costó articular una palabra, sentía que todo mi cuerpo estaba dormido y a medida que yo me acostumbraba a la fuerte luz del cuarto ellos despertaban conmigo.

Sentía... que había vivido un sueño, que todo se había tratado de una simple pesadilla de las que tenía cuando era una niña, dejé de sentirlo cuando mis manos se fueron a mi vientre de manera involuntaria buscando el bulto que debería haber ahí. Al sentirlo, al sentir a mi hijo dentro de mí sentí el alivio que deseaba sentir en cuanto desperté.

Cuando la desesperación se fue, mi madre despertó asustada.

—Aurora, hija — exclamó.

Se aproximó a mí y tomó mis manos, había olvidado mencionar que tenía una mascarilla que me impedía hablar con claridad. Mi madre aturdida, llamó al medico y a la enfermera quienes no tardaron en aparecer de manera veloz, dejaron a mi madre a un lado y comenzaron a hablar tan rápido que no era capaz de entenderlos.

Sentía una angustia... un dolor en medio de mi pecho que no me dejaba reaccionar con claridad. Estaba perturbada, asustada, quería llorar en los brazos de mi esposo... quería ver sus ojos y asegurarme de que todo iba a estar bien. Pero era obvio que no iba a pasar.

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