¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Capitulo 29 | Venganza
La vuelta a la vida de Jon Snow dejó a todos en el Castillo Negro conmocionados, los hombres ahí presentes jamás habían presenciado una cosa como esa, Robb había escuchado que incluso algunos pensaban que su hermano era algún especie de dios a causa de su resurrección; aún así Jon trató de mantener las cosas con calma y lo primero que hizo cuando se logró estabilizar, fue colgar a los traidores que apuñalaron su corazón, incluso al pequeño Ollye... "Mata al niño Snow, mata al niño y deja que el hombre nazca" se recordó a sí mismo las palabras del Maestre Aemon. El hombre tenía que nacer y Robb estaba orgulloso de eso, Snow cada día más se parecía a su padre... y Robb no hacía otra cosa más que estar orgulloso de su hermano.
Algunos días después, mientras Jon, Robb y Davos compartían en el salón del Lord Comandante, uno de los hermanos de la guardia nocturna se precipitó a entrar diciendo que Sansa de la casa Stark había llegado al Castillo Negro, Robb y Jon intercambiaron miradas incrédulas pero cuando se asomaron por el balcón, vieron a una chica alta, con el cabello rojo en una larga trenza que giraba sobre sí misma observando la estancia.
Los ojos de Sansa esperaron encontrarse con Jon, pero jamás pensaron en encontrarse con su hermano mayor Robb; Ramsey se burlaba constantemente en frente de ella en como su padre Roose Bolton había clavado una daga en el corazón del mayor de los Stark, se frotó los ojos ante la imagen que tenía frente a ella, era real... su hermano estaba vivo.
Consternados, Robb y Jon se aproximaron a Sansa para sumirse en un abrazo que jamás pensaron en volver a darse, luego de todas las desgracias del pasado, parecía que de pronto comenzaba a aparecer el sol para los Stark, al menos hasta ese momento.
Sansa les contó que se había casado con Ramsey Bolton para que él fuera el guardian del norte y así pudiera tener a la gente del norte de su lado, con una Stark en Winterfell, les contó también los horrores que pasó con él y como escapó de ahí con la ayuda de Theon.
—¿Estás hablando en serio? — preguntó Robb apoyado en la pared
—Ramsey le hizo mucho daño — susurró Sansa
—Merecía morir — escupió Jon, pero Sansa lo miró fijamente — mató a nuestros hermanos pequeños.
—Él no lo hizo — espetó sosteniéndole la mirada a Robb — Theon no mató a Rickon y a Bran, están vivos... en alguna parte.
Robb juntó sus cejas consternado, odiaba a Theon por haberlo traicionado, si volvía a verlo iba a partir su cuello con un solo movimiento de su espada, pero le producía curiosidad que Sansa hablara de él como un amigo, como si él no hubiera hecho nada malo.
—Tal vez te engañó — inquirió Jon confundido
—No, decía la verdad, Theon hizo muchas estupideces en el pasado...
—No lo defiendas — murmuró Robb entre dientes, incapaz de querer confiar en las palabras de su hermana y se volvió de brazos cruzados mirando el fuego de la chimenea dándole la espalda a sus hermanos, escuchó pasos gentiles moverse hacia él y luego las manos de Sansa en su espalda.
—Siento mucho lo de Aurora Robb, sé que la amabas — Robb continuó erguido sobre sí mismo mirando las chispas que lanzaba el fuego al quemar la madera — sobreviviste a ese horror por algún motivo hermano y estamos aquí por otro.
Robb la miró de soslayo mientras Sansa se dirigía ahora hacia Jon.
—¿De que estás hablando, Sansa?
—De recuperar nuestro hogar — dijo con elegancia — nuestro hogar. No pertenecemos aquí, ninguno de nosotros, Jon... tenemos que derrotar a los Bolton, vengar a nuestros padres.
Robb y Jon no podían quitar la mirada del rostro de su hermana, quien evidentemente había cambiado con el tiempo, los horrores no solamente les habían afectado a ellos dos, Sansa también había sufrido las consecuencias de su inmadurés.
Jon se levantó del asiento y caminó por la habitación con la mano en la boca.
—No puedo dejar el Castillo Negro, éste es mi hogar ahora
—No, no lo es — espetó Sansa a sus espaldas — Jon, vi la cabeza de nuestro padre en una lanza después de que se la quitaron del cuerpo, la cabeza de mi septa junto a la de padre, me hicieron casarme con un maldito enano y luego con un mal nacido Bolton, mataron a nuestros padres... ¡destruyeron a nuestra familia! ¡Tienen nuestro hogar!... tenemos que volver.
Robb se pasó una mano por la cara e intercambió una mirada con su hermano Jon, ¿Pensaban lo mismo? Probablemente sí, y tal vez Sansa tenía razón... y ambos pertenecían a Winterfell, de donde jamás debieron haber salido, pero tal vez Robb pensaba diferente... Tal vez pensaba en ayudar a su hermano a recuperar su ancestral hogar, pero tal vez... no pensaba quedarse ahí mucho tiempo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
