Porque de elegir a alguien, te quiero a ti | Karmanami

"Mi ideal eres tú"

En un mundo paralelo...

Donde todo está al revés.

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—¿Huh?—Karma levantó la mirada, interrogante, encontrándose así con Nakamura Rio.

—Confiesalo, ¿Cuál es de tu tipo?—Cuestiono la rubia, con una sonrisa maliciosa y mirada curiosa.

—No se a lo que te refieres, Nakamura-san.—Sonrío tan solo. Nakamura chasqueo la lengua, internado ser tranquilizada por Okuda y Kayano quienes sabían cómo podría terminar una pelea, verbal, entre Rio y Karma.

—Sabes de lo que hablo.

—Si lo supiera no preguntaría.—Karma volvió a ver a la rubia. Esta bufo.

—Chicas.—El pelirrojo alzó una ceja.—¿Qué tipo de chicas te gustan?

—Lo lamento, Nakamura-san, no eres mi tipo, no te ofendas.—Soltó casi instantáneamente Karma. La rubia sintió la sangre arder.

—¡No sueñes, Akabane!, ¡Tampoco me gustas!

—¿Y a qué viene la pregunta?—Karma mostró curiosidad. Ser interrumpido a mitad de su almuerzo no era agradable. Y Nagisa, quien estaba junto al pelirrojo, parecía pensar igual, pues estaba siendo totalmente ignorado.

—Curiosidad. Aunque no lo entienda, eres bastante guapo para la mayoría, y tomando en cuenta lo sadico, malévolo, raro y brillante, nivel científico loco... Todas nos preguntábamos qué tipo de chicas considerabas atractivas.—Termino su explicación, Rio.

—Comprendo... Y gracias por los halagos.—Karma dió un sorbo de su leche, para así mirar de reojo a Okuda.—Pero.—El pelirrojo miro a Rio está vez.—A diferencia de lo que todas piensan, no tengo un ideal muy grande, y en atractivo, las considero a todas muy lindas.

La población femenina mostró un sonrojo. Varios chicos gruñeron ante aquello. Nakamura no estaba conforme.

Necesitaba algo más...

—¿Entonces nadie te atrae más de la cuenta?—Tanto la rubia como Karma sabían a que se refería. Más cuando ambos, por medio segundo, observaron a Okuda Manami al mismo tiempo.—¿Y...?, ¿Qué me dices, Karma?

El pelirrojo rodó los ojos.

—Alguien... Cómo Okuda-san, tal vez.—La susodicha mostró un fuerte sonrojo, acompañado de varias miradas.—Pero, menos tímida, con un carácter más fuerte tal vez... Supongo que así me gustaría.

—Oh...—Nakamura sonrió. Manami desvío la mirada.—Ya veo... ¿Entonces Okuda-chan con una personalidad parecida a la tuya sería la perfección?

—Puede ser... Sería interesante de ver... Aunque...—Karma suspiro.

"Ella ya es bastante perfecta para mi."

Con ese pensamiento callado. Koro-sensei interrumpió el almuerzo con otras nuevas ocurrencias. Y hasta ahí quedó el tema del ideal de Karma.