[Recuerdos] •YM•YoonMin •

#39

Sentí su perfume muy cerca de mí, podía emborracharme de nuevo con solo ese delicado olor; y del cual no me resistiría.

Pero no solo sentí eso...

También pude palpar un cuerpo cálido arrollando el mío con una desesperación desigual y cautivadora. Mi piel se quería doblar y volverse un suave conjunto de aire, para percibirlo mejor el tacto.

"Curioso...demasiado curioso. Pero cuál es la causa..."

— Mmhm...

— No...—susurró con voz pasífica—...hables, por favor...

Cerré mis ojos para poder entender las emociones que nos rodeaban, de ser capaz de encontrar lo que tanto había dejado pasar...y de dejar de recordar el pasado.

"Que bien se siente este abrazo...tan cálido....tan dulce...tan suave y lleno de sensibilidad...Realmente es como..."

Antes de terminar la frase, mis labios soltaron una palabra.

—...Hy...ung...

Los cabellos con fragancia de mi contrario, hacían cosquillas en mi mejilla, me causaba risa y una pequeña felicidad en mi interior.

"Se parece a la felpa de un oso de peluche."

Reí un poco por lo que pensé.

— ¿Jimin...?

— ¿Yoongi...?

— ¿Estás...molesto? —continuó mascullando. En tanto me daba un estrujón en mi espalda alta, y notaba que sus manos vibraban tiernamente.

Eso me dio una gran respuesta.

Él estaba triste y enojado consigo mismo, yo no salía de una ruptura amorosa. Los dos no queríamos recordar el pasado, y aún más...ninguno quería aceptar que solo fue una mala jugada del destino.

— No, no lo estoy.

Mi voz pareció ahogarse por un momento, mas al parecer solo había sido mi imaginación nuevamente pues el mayor no hizo ningún movimiento.

— ¿Enserio? —Se alejó de mí, y me sujetó por los hombros— Tiene que ser una mala broma de tu parte ¿no es así? —Levantó una ceja en busca de mi afirmación— Es tu venganza ¿verdad Park?

"¿Por qué se complica las cosas?"

— No te quedes callado y habla —continuó—, si sigues en dejarme con problemas, te vas a ver conmigo. Te vas a enterar de todo el daño que puedo ocasionar —habló con un tono más malicioso.

Rodé los ojos, para enseguida volverlos a la vista del contrincante.

— ¿Por qué no simplemente te callas? —Dije con un tono de cierto enfado— Lo único que me haces es maldad, y cuando te quiero perdonar empiezas otr...

El chico de cabello color menta me quedó observando con una mirada demasiado atenta a cualquier palabra que dijese. Mas ya no quería hacerlo, era demasiado complicado.

Hasta que...

— Perdón, perdón —me arrepentí, cogiendo las manos de Yoongi—. Yo no estoy enfadado, solo...—chisté la boca—...bueno sí, estoy enfadado pero...solo un poco, tal vez...sí, o no...pero sí...—mis palabras se sobreponían una con otra sin dar demasiadas explicaciones concretas.

La antes mirada temerosa y enfado del más alto, ahora se había vuelto una sonrisa casi oculta pues no quería dejarla escapar.

— Hey —protesté con cierto tono infantil—, ni se te ocurra reírte en un momento así. Que aún estoy enfadado contigo —terminé con un puchero gracioso, mientras soltaba las manos del ya mencionado.

En realidad ese no era totalmente yo, ese era el Jimin más tierno que existía gracias a tantos mimos de Jungkook. Solo con él era sí, pero sin siquiera proponérmelo, algo en mí, me dijo que ya no era solo de él.

Esta vez el contrario no aguantó, y dejó ver sus lindos dientes junto a su rosada encía que lo hacía ver como un pequeño niño travieso.

Percibí sus manos intentando escapar, así que por reflejo las volví a tomar.

— Jimin —dejo escuchar como si fuese un suspiro.

— Oh, sí, lo siento —parpadeé muchas veces con un cierto calor en mis mejillas, cuando vi nuestras manos—...fue un reflejo...

Ahora la esencia de Yoongi, ya no era solo un aroma...era más que un solo perfume.

Éste había suspirado cansado, una vez nuestras manos de soltaron.

— Park Jimin, tengo una sola pregunta para ti —volvió a hablar el ya mencionado— ¿Estás enfadado conmigo...o por lo que pasó?

"La pregunta..." mi subconsciente sabía la respuesta "CONTIGO..."

Pero...los recuerdos de un celular, unas lágrimas amargas y un corazón partido, fueron suficientes para que tomara una decisión respecto a esa pregunta.

— No lo sé...como dije antes, fue culpa de los dos, así que no sé cómo se podría llamar a eso —hablé casi con vergüenza.

— Eres complicado ¿lo sabías? —Respondió a su estilo, acompañado de esa sonrisa burlona y encantadora más una ceja levantada— Pero no importa, así eres lindo.