𝕽𝖊𝖎𝖓𝖆 𝕸𝖆𝖋𝖎𝖆

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-Logan-, la de orbes azules miró severamente al muchacho frente a ella. No sabia como reaccionar, Logan habagrita, mi tío dejando caer unos libros que traía en las manos. Me quedo callado y abro -, dijo firme, casi gritando.

-Tío...-, me armé de valor para decir lo que tenía que decir-, no es tu decisión. Por si no te has dado cuenta soy mayor de edad y puedo tomar mis propias decisiones.

-Eso tu no lo vas a decidir -, me mira con decepción y furia.

-Tío..., lo siento pero no dejare que decidas mi vida. Fuí un estúpido al no imponerme en tu decisión de casarme pero ya no lo seré mas. No amo a Kimberly, siempre te lo deje claro.

-¡Qué no! - grita-, no te vas a divorciar. ¡Eso tu no lo decides! Y mis deudas, ¿quien las pagara?

-Si lo que te preocupa eso, ¡pues consigue un trabajo! Yo no seré mas tu mercancía.

De un momento a otro me había golpeado. Me dio una bofetada.

-¡Que no! Yo te crié ¿así es como me agradeces?

-Siempre te daré las gracias por haber cuidado de mi, pero no permitiré que decidas mi vida. Y si me voy a divorciar, vine a avisarte, no a pedirte permiso, ya lo hable con Kimberly y la decisión esta tomada. Me voy.

Salgo de la habitación.

Por fin todo acabo.

Tío de Logan

Todo había terminado.

Case a mi sobrino para cubrir mis gastos, y ya pague todas las deudas. Excepto una. La que tengo con la Mafiosa mas poderosa del mundo. Creí que había muerto pero hace unos días anunciaron que esta viva.
Le debo mas de diez millones de dólares. Ella no perdona y no hará una excepción conmigo.

-Estoy perdido.