°Perfecto Desconocido°

Call

Comenzaron a bajar lágrimas

- Lo sabemos, solo queremos decir que debes ver como esta de preocupado Adam, te está buscando por toda la ciudad y a lo mejor puede hasta venir a nuestras casas a buscarte también.

- Ahora si se preocupa el imbécil ese- Espeté cerrando los ojos tratando de calmar mi ira.

- Siempre lo estuvo Amy, sólo no lo demostraba- Dijo Cameron.

- Mira vamos a dejar el tema aquí, y mañana es otro día les parece si hacemos comida antes de que llegue mi mamá- Dijo Amber y los dos asentimos.

- Ya no llores, lo siento, en parte tienes razón, convivir con alguien es difícil- Dijo Cameron y me abrazó.

Bajamos e hicimos unos sándwiches, subimos de nuevo a la habitación de Amber, con los sándwiches y con un pote de helado.

Nos sentamos en su cama mientras veíamos The Walking Dead y comiamos -¿Qué les parece si me hago pasar por muerta?- Pregunté.

- Seria genial, puedes comer mucho helado y hacer que moriste intoxicada de azucar, luego vamos a buscarte a la morgue y tendrás que cambiar de identidad y de país- Dijo Cameron señalandome como su cuchara.

-¿Qué? ¿Puedes morir de intoxicación por helado?- Pregunté.

-¿No sería diabetes?- Preguntó Amber y justo entró un niño de 8 años con un traje puesto.

-¿A dónde vas así?- Pregunté.

- Quería mostrarles la ropa que me compré para la cita con Angela- Dijo subiendo y bajando las cejas.

- Wow te ves increíble- Dijo Amber.

- Genial Campeón- Dijo Cameron.

- Que lindo y tierno te ves- Lo tomé de los cachetes e hizo una mueca.

- Me vas a desarreglar- Me quitó y abrí mi boca indignada.

- Niño estúpido- Dije y rió.

- Mañana será la cita, mamá tiene turno todo el día, así que espero un rico almuerzo después de que nos recojan en el colegio- Dijo y salió de la habitación.

- Genial- Susurré.

- Con los diez dólares compraré un almuerzo, se divide en dos y ya está- Dije y los dos rieron.

***

- Buenos días- Saludé a Teresa, que estaba en la caja.

- Hola cariño, que bueno que ya llegaste, una chica quería un desayuno sorpresa para su novio... Aún no entiendo que después de que le ponga cachos lo siga amando... Pero en fin- Se interrumpió a si misma- Allí está la caja que debes decorar, y en la mesa los marcadores.

Le sonreí y siguió haciendo cuentas en la caja, me senté en la mesa y tomé la pequeña caja de madera, donde se supone que va el desayuno, junto con globos de helio.

Comencé a recordar el maldito curso de letra que mi mamá me hizo hacer cuando tenía doce, porque según ella mi letra era pésima.

Cuando acabé, miré mi creación y quedó bien, genial, me gusta, colores llamativos, letra con marcadores y unos dibujitos a su alrededor.

Teresa se hizo a mi lado y me sonrió - Quedo precioso cariño- Dijo.
Si, me habia tomado confianza en un día

- Gracias, recuerdo el curso que hice- Le dije sonriendo.

La mañana paso bastante rápida ya estaba saliendo del almacén dirigiéndome a casa de Amber.
En la mañana hubo uno que otro pedido, algo simple, Teresa me dio 50 dólares.