°Perfecto Desconocido°

Feria

Servimos la mesa, nos sentamos y comenzamos a almorzar entre una conversación muy agradable.

-¿Y que piensas estudiar Amy?- Preguntó Lucas.

- Economía, ya que soy la única heredera de la empresa de mis padres- Dije y los tres sonrieron.

- Al igual que Adam. ¿Cuántos años tienes?- Preguntó Lucas de nuevo.

- Diecisiete - Dije.

- ¿Último año de preparatoria?-Preguntó y asentí con mi cabeza.

- ¿Donde viv...- Trina lo interrumpió a su próxima pregunta.

- Debes aprender a tener más respeto Lucas, deja de hacer preguntas- Dijo Trina y reí.

- Tranquila son preguntas normales que son muy buenas saber y compartir en amigos- Dije y miré al chico de quince años- Vivo en un conjunto residencial cerca de aquí, junto a la playa, ¿Sabes? Tengo una cuatrimoto color amarillo estacionada en el garaje, casi no la uso, algún día puedes venir a casa junto con Adam y andar en ella.

- ¡Eso es genial! Siempre quise una, pero Trin...Mamá dice que es peligroso- Se interrumpió a si mismo.

Recuerdo que a esa edad, también llamaba a mi madre por su nombre lo cual le enojaba y molestaba demasiado.
La cena la terminamos entre charlas y preguntas sobre mí, fue un almuerzo muy agradable, aunque miradas serias por parte de Adam, recalcando que casi no hablaba en la cena.

- Iré a lavar los platos- Se disculpó Trina entrando a la cocina con los platos- El baño esta en el pasillo en el segundo piso, por si quieres lavarte las manos.

Sonreí y miré a Adam subiendo las escaleras, mientras acomodaba las mangas de su camisa, subí detrás de él y lo hale del brazo.

-¿Que te está sucediendo Adam? Llegamos a casa muy bien y ahora tienes un mal humor- fruncí el ceño.

- No es nada- Dijo y suspiré con pesadez, me voltee y entré al baño, cerré la puerta y me apoyé en el lavamanos.

La puerta se abrió y por el espejo divise a Adam, cerrando la puerta detrás de él, se acercó a mí y me abrazó por la cintura colocando su mentón sobre mi hombro.

- Lo siento - Dijo y me mordí el labio.

-¿Que sientes Adam?- Pregunté volteandome para verlo de cerca, se quedó callado - ¿Qué pasa? Dime.

- Estoy celoso joder- Dijo y fruncí el ceñon

- ¿De quién?- Pregunté y se escondió en mi cuello, pensé y recordé como miraba mal a Lucas- ¿De Lucas?

Asintió con la cabeza aún en mi cuello

- ¿De tu hermano menor?- Pregunté - Adam pero si es un niño.

- No es un niño, va a cumplir dieciséis, ya lo vi masturbarse en su cuarto- Dijo y no pude evitar reírme.

- Si es un niño Adam- Lo tomé de la cara- Tú eres un hombre, ya mayor de edad, no puedes estar celoso de tu propio hermano.

- Claro que si, se que él te desea, tú le gustas...- lo interrumpí tomándolo de la cara.

- Repito que es un niño, y que de igual forma no es mi gusto, a mi me gustan lo castaños de ojos avellana, con tatuajes en su brazo, un cuerpo bien formado y sus boxers de bob esponja- Dije y rió

- Te amo princesita - Dijo y sonreí.

- Yo más idiota - Dije y salimos juntos del baño cuando iba pasando Lucas.

- Joder...Tuvieron sexo en el baño- Dijo con cara de asco.

- No, sólo estabamos hablando- dijo Adam y él niño alzó ambas cejas incrédulo.

Adam sacó un billete de 10 dólares y se lo dio, Lucas lo miró dos veces y salió disparado al primer piso.

-¿Ya no estás enojado con él?- Pregunté y sonrió.

- No, porque solo yo te puedo tener- Dijo bajando conmigo, besó mi cuello y llegamos a la sala- Mamá ya nos vamos.

Trina sonrió- Fue un gran placer haberte conocido Amy, cuando quieras, puedes venir, ésta es tu casa.

- Igualmente fue un gusto en conocerte y muchas gracias por la confianza- Sonreí y salimos de casa.

Entramos al auto y sonreí

- Pensé que iba a ser peor que la primera vez que Amber conoció a su suegra- Dije y Adam rió - Dijo que había roto su vajilla favorita, cuando intentaba levantarse de la mesa.

- Estuvo bien- Dijo comenzando a manejar.

- ¿A donde vamos? No quiero ir a casa

- ¿A la feria?- Preguntó y mi sonrisa se expandió por mi cara.

Unos minutos más y llegamos a la feria de la ciudad, muchos juegos y luces de colores adoraban un lugar gigante, lleno de niños corriendo y parejas tomadas de la mano.

Nos bajamos y Adam me tomó de la mano- ¿La montaña rusa?- Preguntó y abrí mis ojos.

- ¿Qué tal el tobogan de agua?- Pregunté mirando el tobogán de agua para niños.

- Solo se permiten niños menores de diez años señorita- Dijo el guardia a mi lado.

- ¿Te da miedo la montaña rusa?

- Si- dije y rió él

- Conmigo no pasará nada, vamos- Me tomó del brazo y nos subimos al aparato ese.

- Adam si muero que te quede de conciencia- Dije

Rió y me abrazó... Minutos después ya estábamos en el suelo, viendo a gente vomitar y bueno, sentí todo revolcar, tapé mi boca con ambas manos y cuando vi un bote de basura vomité casi todo el almuerzo.

- ¿Estás bien? - Preguntó riendo a lo que le contesté con un empujon.

- Estaba bien antes de subirme a esa cosa - Dije para volver a expulsar mi almuerzo.

Luego de beber agua, nos dirigimos a la parte donde puedes ganar peluches o regalos pequeños .

- Que lindo- Dije mirando un panda

- ¿Te gusta?-preguntó y asentí con la cabeza.

- Debe derribar los bolos- Dijo el señor con amargura, le pasó a Adam unas pelotas y este comenzó a tirarlas, miré como derribaba cada bolo.

El señor abrió ligeramente la boca de impresión.

- Nadie había podido derribar todos los bolos- Dijo impresionado cuando Adam terminó con el juego, Me entregó el peluche y lo abracé.

Esto si es cómodo, y lindo. Lo miré de nuevo y sonreí.

- Gracias- Dije sonrojada y me abrazó, nos sentamos en una banca y compramos un helado.

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Hola chicas, les prometí un capítulo, perdón si es corto, pero subí lo que alcancé a escribir en cuatro horas.

Las quiero

K.N