Doble Vida.

Capítulo 15

Maratón 3/3

—Ya está todo arreglado con doctores y más, ahora lo unico que falta es que te cases con Alfonso —dijo Andrea, ambas acababan de salir del consultorio de la doctora Renata.

—¿Pero si el no se quiere casar conmigo? No es por nada pero ahí anda rondando una tipa que no es por nada, pero está guapísima y el estupido de Alfonso se nota que se muere por ella.

—¿Y? Nada es competencia para nosotras.

—¿Nosotras? —preguntó en burla.

—Bueno, para ti. Lo que haremos es que le vas a pedir matrimonio tú, porque para que el te lo pida a ti estará barbaro.

—Ay mamá, ¿cómo crees que yo le pediré eso? Estás loca.

—¡Loca mis calzones! Diana, ahorita no estás para ponerte tus moños, si el de por si ni te pela, menos si es que dices que hay una mujer que le interesa por ahí.

—¿Y si no acepta?

—Pues para eso está el plan C, lo vamos a hacer sentir culpable cuando le digamos que por la fuerte impresión casí pierdes al bebé, ya esta arreglado con Renata todo, no te preocupes hijita.

—Oye mamá, que mala me saliste.

—Deberías de aprender de mi, estás como el idiota de tu padre.

—Deja de insultarlo y de insultarme ¿sí?

—Mejor vamonos, hoy mismo le pedirás matrimonio en la casa, hay que aprovechar antes de que el banco nos la quite.

—Pues espero es esto funcioné, porque si no, ya no sabré que hacer.

...

—¿Estas bien? Te molesta que esté aquí ¿verdad? —preguntó Anahí pero Alfonso negó.

—No, solo que ya estoy harto de estar acostado.

—Pues te aguantas, aunque sea hoy recuestate como indicó el doctor —su celular comenzó a sonar e hizo señas para que lo esperara—. ¿Bueno mamá? Si soy Any, ¿saliste antes? Ah bien, llamaré a Christian para ver si puede recogerte antes...

—Ve por ella, no te preocupes —dijo Alfonso y Anahí asintió.

—Ya iré yo mamá, me dió chance de ir por ti. No te preocupes, en un rato estoy allá, bye —dijo y colgó.

—¿Quieres que Peter te lleve?

—No Poncho, no te preocupes, no vaya a ser que lo necesites para algo, yo tomo un taxi.

—¿Segura? —preguntó no del todo convencida.

—Sí, segura —dijo y le dio un pequeño beso—. Nos vemos en un rato.

—No te preocupes, regresa hasta mañana para que cuides bien a tu mamá.

—Okey, entonces hasta mañana —dijo y se despidió por ultima vez y salió de la habitación.

Tomo sus cosas y fue en busquéda de su mamá. Mientras Alfonso seguía sumido en sus pensamientos.

Creo que es mejor dejar las cosas como están y decirle lo que pasa a Anahí, no me gusta mentirle con cosas como estas.
Y si no hay amor no tengo porque casarme con Diana, eso es todo. En sus pensamientos, Alfonso.