Doble Vida.

Capítulo 29

Anahí bajó del tubo como pudo, bajó del escenario y salió corriendo hacia los camerinos para poder cambiarse.

—¡Any! ¿Qué pasó? ¿Te sientes mal? —la detuvo Christian.

—¡Me vió! —estalló en llanto y entró al camerino.

—¿Quién te vió? —preguntó preocupado.

—Christian necesito verlo, ¡ayudame a quitarme estas botas! —gritó desesperada porque no podía.

—¿A quién Anahí? ¡Mírate como estás!

—¡Poncho me vió bailando! —gritó.

—¡¿Qué?! ¿Cuándo?

—¡Ahorita! ¡Necesito ir por él, se acaba de ir!

—Yo voy, no te preocupes —salió corriendo Christian para ver si lo alcanzaba.

Mientras se cambiaba de ropa, escuchó como abrían la puerta, indicando que alguien entraba.

Se asomó y no podía creer quien estaba frente a ella.

—Te felicito por tu show Anahí... —rió Diana con maldad— ¡Pero es que nunca se me pasaría por la mente! Ya sabía yo que eras una naca, que venías de un barrio pobre pero ay no... ¿Teibolera? ¡Pero que asco!

Anahí estaba en shock, todo lo que habia pasado, que seguro Diana estaba derás de todo, mientras ella solo reía a carcajadas.

—Tú.. —habló por fin— Fuiste tú quien le dijo todo.. ¿Tú le dijiste a Poncho que viniera?

—¡¿Yo?! —dijo burlona— Yo no fuí, en realidad le llegó un anonimo a Alfonso.

—¡¿Pero qué carajos ganas?! ¡¿Que te ganas?! —gritó exaltada.

—Ay no.. ¡No puedo creer que estuviste engañando a Alfonso desde que se conocieron!

—¡Eres..! ¡Eres una maldita hija de..!

—La secretaria del presidente de las empresas Herrera es una vil teibolera.. —la interrumpió— ¡Que asco! —hizo como si vomitara— ¡Y es que aún no me la creo! Alfonso tenía como novia a una vulgar stripper.

—¡A ver Diana! ¡¿Qué parte no viste que no me desnudo?! ¡No me quito la ropa!

—¡Pues si nada más eso te faltaba!

—¡Tú no sabes lo que es la necesidad! No tienes idea de porque hago esto ¡y es muy digno lo que hago! ¿Pero tu que vas a saber de dignidad? ¡Das pena! Mientes acerca del padre de tu propio hijo...

—Da igual Anahí, ¡Alfonso nunca te va a perdonar! Porque no eres más que una vil mentirosa.

—¡Si yo mentí fue por que lo amo! Pero es algo que tu jamás entenderás. Porque tu no amas, eres tan vacía que no entiendes los sacrificios que alguien hace por amor.

—¡Bla, bla, bla!

—¡Y eres una una ardida maldita! ¡Y todo esto es porque Poncho me ama a mi y no a ti!

—Anahí, no te preocupes, ya no te preocupes por eso.. Porque ese amor se va a acabar.

—¡Claro que no! ¡Ni tu ni nadie va a poder con el amor que nos tenemos, porque para tu información nos vamos a casar! —le mostró el anillo de su mano izquierda.

—¿Casarse ustedes dos? ¡Já! ¡Me invitas, eh! —dijo burlona— ¡Por favor Anahí! Alfonso jamás se casaría con una vulgar teibolera, con una corriente..

—¡Te voy a..!

—Aunque me mates, lo hecho hecho está. Alfonso ya te vió en el tubo, Alfonso ya sabe que lo engañaste.. ¡Y te lo dije! ¡Te dije que no sabías con quien te estabas metiendo gata de quinta! ¡Que no...!