Doble Vida.

Capítulo 23

Maratón 2/2

—Se llama igual que Anahí... —dijo Alfonso con sorpresa.

—Pero claro que no es Any.

—Pues sí, pero que coincidencia.

Y Anahí no salía, no quería. Don Manuel se percató de eso y rápidamente mando a los de seguridad para ver que le pasaba.

El público comenzaba a desesperarse porque no salía, le chiflaban al maestro de ceremonias que no sabía ni que hacer.

—Tenemos un pequeño inconveniente querido público —dijo el maestro de ceremonias.

—Que raro que no salga. Ahí está tu gran show —dijo Alfonso con sarcásmo.

—Es un pequeño inconveniente Poncho, ya oíste —dijo. Éste rodó los ojos.

Mientras tanto Christian trataba de calmar a Anahí.

—Wera, hasta estás temblando —dijo con preocupación.

—¡Anahí! —gritó uno de los de seguridad— ¿Por qué no sales a bailar? ¡Órale! Don Manuel está bien encabronado.

—Vayanse ustedes, ya va para allá —dijo Christian—. En dos minutitos.

—Si no quieres que el patron se enoje más de lo que está, en un minuto —dijo y salió.

—No puedo Christian...

—¡Ya sé! Usa otro nombre.

—Ay sí, ¿y la cara qué?

—Pues... —pensó— ¡Un antifás! —corrió hacia donde estaban los vestuarios y sacó varios.

—¿Tu crees que funcione?

—¡Sí wey! —le colocó uno color blanco que quedaba a juego con el babydoll de ángel que taría puesto.

—Bueno, ¡vamonos! —salieron corriendo.

Christian subio al escenario y le dió la señal al presentador porque sería él quien anunciaria a Anahí.

—Caballeros, que estén pasando una increíble noche pero ahora ya llega el show especial... ¡Y con ustedes...! ¡Ana! —presentó.

—¿Que no se llamaba Anahí? —le preguntó Alfonso a su padre. El solo se encogió de hombros.

—No sé, tu sólo disfruta el show.

Las luces se apagan y el reflector apunta directo a "Ana".

La mirada de Alfonso se clavó al instante en ella, empezó desde abajo a arriba, las medias de ligas que traía, el pequeño short ligado al sujetador que la hacía verse sexy pero que cubria perfectamente todo, el antifás con brillos, todo le fascinó.

Por un momento se sintió mal, no debía pero pensó en Anahí y algo le decía que se parecía tanto a ella.
Sacudió sus ideas absurdas y mejor prefirío admirar el show que ahora estaba completamente dedicado a él aunque éste no supiera.

Anahí caminó casí hacia él sensualmente y bailó al compás de la música, estaba nerviosa sí, su corazón parecía que se le saldría del pecho pero quíso dar lo mejor de sí, Alfonso la estaba viendo y quería que se diera cuenta que esto era más que una mujer con poca ropa, que era distinto.

Tomo fuerte uno de los tubos y empezó con su mágia. Hizo posiciones y demás que no había hecho en años, la gente estaba impresionada. Sin duda esta presentación sería una de las mejores de Anahí.

En un instante estaba en la parte de arriba del tubo y al siguiente abajo y viceversa.

Alfonso miraba el espéctaculo embobado, tenía una idea completamente distinta del show y de todo. Estaba fascinado.