°Capítulo 33°

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Terminé de hablar con Ho Seok. No sabía si entrar a la tienda y saludar a Jungkook o simplemente irme y encontrarme con él luego.

Hope tenía que entrar de nuevo a trabajar y sin que pudiera decir algo, me llevó junto a él. Al estar dentro, Kook y yo nos miramos por unos segundos y al mismo tiempo sonreímos.

Se me hacía muy curioso. No sabía por qué me sentía como un niñita cuando veía a su primer amor de la infancia. Jung hacía que en mi estómago se le descontrolaran todas las mariposas que allí se encontraban, sentía como mis ojos se iluminaban al verlo y como mi sonrisa se dibujaba en mi rostro casi automáticamente.

Me acerqué a él y los dos agachamos la mirada sonriendo, esta forma de actuar de los dos era realmente hermosa.

—Buenos días Kook.— le dije mordiendo mi labio inferior, la verdad era que me alegraba mucho estar con él

—Buenos días nena.— nos reímos —me imagino que mi hermano te dijo que yo me encargaría de todo hoy.— me comentó

—Sí claro, más bien ahora solo vine a saludarte. Ya voy de salida.— lo miré, estaba muy lindo hoy

—Ya veo.— sonrió. Nos quedamos unos segundos así, ¿Qué nos pasaba?

—Creo que deberían volver a la tierra.— la voz de Hope nos sobresaltó, nos habíamos quedado un poco distraídos

—Es verdad. Ya me tengo que ir.— pronuncié acomodando mi bolso en mi hombro

—¿Cuando nos vemos otra vez?.— preguntó Jungkook mirándome

—¿Quieres pasar por mi casa al terminar aquí?.— sonreí y me mostró su gran dentadura en una sonrisa

—Allí estaré.— nos abrazamos como despedida e hice lo mismo con J-Hope antes de salir de la librería

Mientras caminaba hacia mi casa de nuevo, muchos pensamientos venían a mi mente. Tuve que haber pasado por un momento feo con Jimin para poder darme cuenta de que lo que realmente necesitaba en mi vida era a Jungkook.

Quizá aún necesitaba pensar bien las cosas, pero el simple hecho de que con tan solo mirar a Kook me ponía de esa manera, era totalmente lógico que mi corazón lo anhelaba.

Estaba abriendo el portón de mi edificio cuando mi celular empezó a sonar. Miré la pantalla y era un número desconocido, no tenía ni la más mínima idea de quién podría ser.

—¿Diga?.— contesté con duda

—Hola. Es Ana, la novia de Suga.— ¡Vaya! Suga era muy eficiente

—Ah, hola, ¿Qué tal?.— dije alegre, necesitaba salir de ese problema también

—Muy bien, gracias por preguntar. Él me dijo que querías hablar conmigo.— me comentó

—Sí, claro. ¿Estás ocupada ahora?.— le pregunté

—No. Si quieres nos vemos. ¿Te parece encontrarnos en el centro comercial?.— era buena idea, no quedaba lejos de aquí. En realidad, nada quedaba lejos

—Perfecto, nos vemos allá en veinte minutos.— le dije y luego de afirmar su asistencia, colgué

Agarré un taxi hasta allá. Como había dicho, no quedaba lejos, pero ya había caminado bastante el día de hoy. El auto me dejó en la entrada del centro comercial y luego de pagarle, me adentré a éste.

Habían bastantes personas, quizá se me haría un poco difícil encontrarla. Quise marcarle, pero escuché mi nombre y al girarme, Ana venía hacia mí.

—Llegaste rápido.— le comenté dándole un abrazo

—En realidad ya estaba aquí.— rió —¿Caminamos?.— me preguntó y yo asentí

—Primero quería decirte que lo siento mucho.— hablé mientras recorríamos los pasillos.— esa noche fue patética para todos, pero te agradezco demasiado lo que hiciste.— le dije dándole un abrazó de costado. Si no fuera por ella, no sabía que hubiese pasado

—No te preocupes.— me sonrió —tampoco sabía que ya sabías que había sido yo.— las dos reímos

—Kook me contó. Por cierto, ¿Me puedes decir como sucedió todo?.— le pregunté mientras nos sentábamos en un banco que quedaba en medio de uno de los corredores

—Fue algo muy loco a decir verdad.— rió

—Ya va.— la detuve y ella dejó de reír —antes de que sigas, primero cuéntame como era que estabas relacionada con Jungkook. Si puedo saber.— le sonreí, tenía que estar al tanto cada detalle

—Ah sí, eso.— rodó los ojos —conocí a Jung a través de unas amigas, fue hace un tiempo ya. Nos relacionamos, salíamos seguido, en realidad yo estaba muy enamorada de él.— se tapó la boca mientras reía —un día tuvimos sexo en su carro. Amaba ese carro.— suspiró

—¿Qué carro era?.— le pregunté. Él me había dicho una vez que tenía dos, uno rojo con el que salía siempre y el negro que según él, era el especial, en el que yo me había subido

—Era rojo, ¿Por qué?.— me dijo extrañada

—No, por nada. Continúa.— al parecer si me había dicho la verdad

—Después de eso, empezó a ignorarme y ya no nos veíamos como antes.— prosiguió —me enteré que estaba trabajando en una librería y lo fuí a buscar. Fue el día que te conocí.— me sonrió —dije que era mi novio porque así lo sentía yo, de verdad me gustaba, pero ese día me lastimó mucho.— bajó la mirada. Jungkook había sido malo con ella —cuando me fuí de ahí, pasé por su casa, extrañaba cuando iba. No entré ni nada, solo la observé un rato y luego me fuí. Estaba mirando al suelo mientras lloraba y mucho más adelante, choqué con un chico que salía de una de las casas.— me miró muy alegre

—Suga.— pronuncié y ella asintió

—Desde ese día, comenzamos a salir y ahora somos novios.— levantó una de sus cejas en forma de victoria

—¡Wow! Que pequeño es el mundo.— comenté

—Mucho.— me dijo —unos días después de eso, Jungkook me llamó pidiéndome disculpas y aprovechó para hablarme de tí.— abrí mis ojos de la sorpresa —por eso el día que te encontré saliendo de la casa de Jungkook mientras iba con Suga, te pregunté si eras su novia, pero me impresionó cuando nos dijiste que eras novia de Jimin.— se encogió de hombros

—Ah sí, eso. Mala decisión.— las dos reímos

—El día de la reunión.— siguió hablando —yo ví varias veces a Jimin con una chica, obviamente la misma chica del escándalo.— arrugué mi frente de la rabia, que descarado había sido —yo sabía que algo andaba mal y por eso llamé a Kook, me parecía que todo iba a terminar mal.— esta chica si que había sido inteligente —no me equivoqué al parecer.— rió —cuando saliste corriendo, en seguida Jungkook entró hecho un ogro. Ví como agarró a Jimin que se encontraba al final de las escaleras hablando con Suga y lo empujó hasta tirarlo al suelo.— abrí mi boca sorprendida —en eso, mi novio se metió en medio y fue cuando recibió el golpe en los labios que lo dejó tendido en el suelo. Ahí Kook se posicionó encima de Jimin y bueno, viste como le pegó.— terminó y no lo podía creer

—Esto es... demasiado. Que fuerte.— estaba muy impresionada, todo había sido muy feo

—Sí, la verdad es que sí aún me gustara él, te envidiaría mucho, pues se nota que le encantas.— dijo tocando mi hombro

—¿Tu crees?.— le pregunté algo nerviosa

—Claro, escucha todo lo que te estoy diciendo. Yo conozco un poco a Jungkook, sé su lado malo y él jamás se había comportado así por un chica. Te ama.— terminó de hablar y una sonrisa se dibujo en mis labios. Mi corazón saltaba de emoción

Luego de esa larga conversación, vimos que ya era algo tarde. Tomamos un café y luego cada una se fue a su casa sin antes acordar vernos de nuevo, tal vez de esto podría salir una gran amistad.

• • •

Estaba ya en casa, dejé mi bolso y me arreglé un poco, Kook seguro ya venía en camino. La librería cerraba siempre a las siete y ya eran las siete y media. Me asomé en la ventana esperando que llegara y en eso ví el auto negro de Kook estacionarse frente a la entrada de mi edificio. Se bajó de él y al verme, sonrió. Nunca me cansaría de esa sonrisa, nunca.

Trabajo de Verano.《Jungkook》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora