Me coloco de rodillas en el suelo y estiro los brazos a ambos lados de mi cuerpo para recibirla con un abrazo cuando ella llega hasta mí.
—Mami, te extrañe mucho —habla la pequeña aún sin separarse de mí.
—También te extrañe mucho. —La aparto un poco para poder verla a los ojos y le dedico una pequeña sonrisa—. ¿Por qué no me dijiste que venías? —le pregunto.
—Era una sorpresa —interviene Alana.
Vuelvo a mi postura normal y miro a las chicas mientras que Lily se queda de pie a mi lado.
—Gracias por traerla —les agradezco—. Ustedes son las mejores amigas del mundo.
—No nos agradezcas, Eimy. Sabíamos que estar con Lily te haría bien así que Alana y yo fuimos por ella —Lyn se encoge de hombros—. Además, esta niña hermosa ya nos hacía falta, ¿verdad linda? —pregunta mirando a Lily, quien no tarda en asentir.
—Me alegra mucho verte de nuevo, Lily —Seth se acerca a ella y la carga en sus brazos—. ¿Cómo has estado?
Ella le da un rápido abrazo y le sonríe antes de contestar.
—Hola, Seth. Yo he estado muy bien, aunque extrañaba mucho a mi mami —dice ella.
—¿Cuándo será el día en el que me llamarás "tío Seth"?
—Es que tú no eres mi tío Seth —la pequeña niega con la cabeza—. Eres primo de mi mami así que también eres mi primo —alega ella y eso hace que mi primo sonría.
—Qué inteligente eres.
—Esperen un momento. No estoy entendiendo nada —interviene Dante—. Eimy, ¿tienes una hija? —pregunta con asombro.
Me acerco más a él y al Lobito idiota y susurro para que Lily no pueda escucharme.
—No es mi hija biológica, pero igual sigue siendo mi hija —respondo.
—Entiendo —asiente con comprensión.
—Lily es una niña muy dulce; con sólo una sonrisa te roba el corazón —comenta April colocándose a mi lado—. ¿Cuántos años tiene?
—Sólo tiene cinco —respondo.
Seth deja a Lily en el suelo y ella viene hacia mí con una linda sonrisa dibujada en su rostro. Estira sus pequeños brazos en mi dirección, haciéndome saber que quiere que la tome en mis brazos, y yo así lo hago.
—Pril, ¿él es tu hermano? —le pregunta a la chica a mi lado mientras señala al Lobito idiota.
¿Pril?
—Así es —la mencionada asiente—. ¿Quieres que te lo presente? —propone.
—¡Sí!
La dejo de nuevo en el suelo y solo me limito a observar cómo April se acerca junto con Lily a Dante y al Lobito y luego dice algo que no me molesto en escuchar.
No voy a negar que me pone muy feliz tener a Lily aquí, pero también estoy preocupada.
No puedo estar tranquila sabiendo que la niña ha llegado justo cuando mis poderes han regresado y están más ansiosos por ser utilizados que nunca. No puedo estar tranquila sabiendo lo que está pasando conmigo. Y, definitivamente, no puedo estar tranquila sabiendo que, si no tengo cuidado, en cualquier momento puedo perder el control de mí misma y muchos pueden salir lastimados.
Lily entre ellos.
~•~
Lo único que se escucha mientras caminamos es la voz dulce y angelical de Lily haciéndole todo tipo de preguntas a las chicas y a mi primo. El Lobito idiota va adelante junto con Dante y April y yo vamos caminando detrás de todos.
Ahora mismo vamos camino a la aldea de los lobos porque la vez pasada no pude conocer a los miembros de la manada por motivos ya mencionados, pero ahora estoy bien y me encuentro más que dispuesta a conocer a todas esas personas que me serán presentadas.
—April, además de esta, ¿puedo hacerte una pregunta? —hablo en voz baja, rompiendo el silencio que se había cernido sobre nosotras.
La castaña voltea a verme.
—Claro —accede.
—¿Te molestarías si me vieras tratando de hacer rabiar a tu hermano? —curioseo.
Ella frunce el ceño ante mi pregunta ante un claro gesto de confusión, pero luego una sonrisa se curva en sus labios.
—Claro que no —asegura—. Molestar a mi hermano es uno de mis pasatiempos favoritos, solo que no cuento con mucha imaginación y no se me ocurren muchas cosas para hacerlo enojar —se sincera.
Una sonrisa llena de complicidad tira de las comisuras de mis labios.
—Yo tengo una idea —apunto—. ¿Estarías dispuesta a ayudarme a llavarla a cabo?
—Eso no tienes ni que preguntarlo.
Luego de esa pequeña conversación ninguna de las dos volvió a hablar en lo que restaba de camino. Cuando llegamos a la aldea, el Lobito idiota los convocó a todos a una reunión de última hora y no pasó mucho tiempo para que estuviera de pie junto a él frente a todos los miembros de su manada. Sus palabras fueron breves y concisas al presentarme ante todos y no tardé muchos en empezar a saludar a todo aquel que él iba presentándome.
—Él es Matthew —habla el Lobito idiota, refiriéndose al chico que ahora se encuentra frente a mí.
—Sólo dime Matt —corrige el chico mientras toma mi mano entre la suya y deja un beso en ella—. Es un gusto poder conocer al fin a la famosa princesa de los vampiros.
—¿Famosa? —inquiero al tiempo que aparto mi mano del agarre de la suya.
—Había escuchado decir que eras una chica muy hermosa, y ciertamente no se equivocaron al decirlo —menciona—. También escuché que tienes un carácter bastante... fuerte, ¿eso es cierto? —curiosea.
—Yo no me dejo llevar por lo que dicen las personas de los demás, Matthew. —La mueca que esboza al escucharme pronunciar su nombre me hace saber que eso no le ha agradado mucho—. Si tengo un carácter fuerte o no es algo que deberás averiguar por ti mismo.
—Me encantaría tener la oportunidad de hacerlo —sonríe coqueto—. Yo...
—Hola —saluda una chica de cabello castaño claro y ojos cafés que ni siquiera sé de dónde ha salido. Matthew da un pequeño respingo en su lugar por el susto que ella seguramente le ha dado y toda rastro de una sonrisa en su rostro se borra por completo—. Soy Melissa, su novia —apunta, refiriéndose al chico a su lado, mientras estira su mano en mi dirección.
Una sonrisa socorrona tira de mis comisuras.
—Es un gusto conocerte, Melissa —digo, estrechando su mano—. Así que Matthew es tu novio —esa no es una pregunta.
—Así es —asiente con una radiante sonrisa en su rostro.
—Ustedes hacen una linda pareja —comento. Matthew evita mi mirada y eso me resulta algo un poco divertido.
—Ustedes dos también hacen una hermosa pareja —dice y mi sonrisa se borra—. Creo que Eimy es la chica que tu necesitas, Keith.
¿Él y yo... hacemos una hermosa pareja? ¿Yo siendo la novia de él? Diablos, ahora no sólo mi mamá piensa que "hacemos una linda pareja" sino que Melissa también piensa así. ¿Acaso me ven cara de querer ser algo del Lobito idiota? Sí, lo admito, él es más que guapo, pero no me cae bien; no lo soporto, así que está más que claro que entre nosotros nunca va a ocurrir algo. Aunque... si con eso de ser la chica ideal para él se refiere a querer golpearlo cada cinco minutos, entonces sí, yo sería la chica ideal.
ESTÁS LEYENDO
Princesa Vampírica
FantasyUn encuentro no muy apropiado. Una rivalidad que se convierte en algo más. Una venganza jurada. Una chica vampiro con un carácter fuerte y un chico lobo arrogante y mandón. Sólo queda una interrogante: ¿Qué es lo que se puede esperar si sus camino...