Una semana después.
Escucho cómo las gotas de lluvia caen y se estampan con fuerza contra el suelo mientras que, de reojo, veo unos cuantos rayos de luz atravesar el cielo.
Lily me mira con el ceño fruncido y los brazos cruzados, pretendiendo lucir seria e intimidante, mas el lindo bigote de chocolate que está marcado en su rostro sólo hace que luzca más que adorable. Minutos antes había estado bebiendo chocolate caliente, pero había dejado su vaso con el contenido sobre la mesa para poder cruzarse de brazos.
—Vas a salir —eso ni siquiera estuvo cerca de parecerse a una pregunta—. Mami, está lloviendo, no puedes salir.
—Sé que está lloviendo, linda, pero tengo algo muy importante que hacer —informo, cruzando mis brazos también.
De alguna manera me divierte que actúe de esta manera.
—¿Saldrás sola? —interroga.
—No, el hermano de April vendrá conmigo.
—¿Keith? —pregunta y entonces deja caer sus brazos a ambos lado de su cuerpo. Su pequeña cabeza se ladea en un gesto que indica confusión antes de volver a hablar—. ¿Él es tu novio?
Mis cejas se elevan con incredulidad y mi boca se abre ligeramente, formando una pequeña "o", debido a la sorpresa que me ha causado escuchar a Lily preguntando ese tipo de cosas. Solo tiene cinco años, se supone que no debería preguntar eso..., ¿cierto?
—No. —Niego, aún sin salir del todo de mi asombro—. ¿Por qué me preguntas eso, Lily?
—Seth dijo que tú y el hermano de Pril serían novios. —Se encoje de hombros y entonces vuelve a tomar su vaso con chocolate caliente de la mesa—. Mami, ¿qué es un novio? —curiosea al tiempo que vuelve a clavar sus ojos en los mios.
Voy a golpear a Seth, juro que voy a golpearlo.
—Te prometo que luego voy a explicártelo —aseguro mientras tomo un pañuelo blanco que reposa sobre la mesa y limpio el bigote en el rostro de Lily—. Ten, cuando termines con el chocolate limpia tu boca con esto. Ya debo irme, nos vemos luego, linda. —Le entrego el pañuelo y planto un beso en su mejilla.
—Nos vemos luego.
Inicio mi camino hasta la salida de la casa, en donde visualizo rápidamente al Lobito idiota hablando con Adam. Ambos sostienen una sombrilla que evita que las gotas de lluvia logren mojarlos.
El vampiro no tarda en notar mi presencia y voltea a verme, logrando de ese modo que su acompañante también mire en la misma dirección. Adam le dice algo al Lobito idiota antes de empezar a acercarse a mí y, cuando ya se encuentra de pie a una distancia prudente, se dispone a hablar.
—¿Lista para encontrarte con los miembros del Concejo? —curiosea.
—Estoy más que lista —digo con seguridad.
La charla con mi querido primo deberá esperar.
~•~
Las enormes puertas que dan paso a la gran sala de reuniones se abre, dejando que atravesemos con pasos firmes la habitación y nos plantemos frente a todos los miembros del Concejo.
—Buenas tardes —saludo antes de dirigirme a los cuatro líderes del Concejo—. Si no les molesta, me encantaría saber de una vez cuál es el motivo por el cual hemos sido convocados a esta reunión —suelto sin más.
No dispongo de muchos ánimos para estar aquí mucho tiempo.
—Es un gusto verte después de tanto tiempo, Eimy —habla Elizabeth con voz calmada, omitiendo los que he dicho—. También nos da mucho gusto saber que tú y tu novio están manejando las cosas tan bien.
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Princesa Vampírica
FantasyUn encuentro no muy apropiado. Una rivalidad que se convierte en algo más. Una venganza jurada. Una chica vampiro con un carácter fuerte y un chico lobo arrogante y mandón. Sólo queda una interrogante: ¿Qué es lo que se puede esperar si sus camino...