No sé cuánto tiempo ha pasado desde lo ocurrido con Alex. Tampoco sé cuándo tiempo pasó antes de mamá decidiera que lo mejor era venir a esta casa. Mucho menos sé cuánto tiempo he permanecido en silencio, pensando en lo que pasó en este lugar la última vez que estuve aquí; rememorando todo lo que supe ese día.
Sé que hace ya varias horas que todos esperan una explicación de mí parte, y se que es mi deber dárselas, pero no me siento con ganas de pronunciar palabra alguna ahora mismo.
—¿Piensas quedarte callada todo el día? —cuestiona, y el dejo ansioso en su voz no me pasa desapercibido.
Mi mirada recorre todo el espacio, pasando por todos los que aquí se encuentran, y se detiene en ella.
Guardo silencio.
—Necesito una explicación, Eimy —continúa diciendo—. Necesito que me digas qué fue lo que pasó, porque no entiendo nada. Te vi morir; todos lo hicimos... ¿Cómo es que estás aquí ahora? —pregunta y, la desesperación, las ansias de obtener una respuesta que encuentro en sus facciones hacen que suspire con resignación.
Tengo que explicarles todo ahora mismo. No puedo posponer esto.
—Nunca morí, mamá. —suelto sin más—. No fui yo la que recibió ese disparo, fue mi clon —explico y soy testigo de como la sorpresa tiñe su expresión.
—¿Qué?
De reojo, soy capaz de ver cómo la mirada llena de reproche e incredulidad de Keith se posa en Seth.
—Tú lo sabias —afirma.
Mi primo levanta ambas manos, como si lo estuvieran apuntando con un arma, y sacude la cabeza en una negativa.
—Sí, pero no podíamos decirles nada —refuta—. Lo siento.
—¿Por qué nos engañaste? —Papá pregunta y suena más que dolido.
—Tenía que hacerlo —susurro.
Vergüenza y culpabilidad pura se inyectan en mi sistema y no puedo evitar sentirme la peor persona del mundo. No puedo evitar pensar que tal vez, y solo tal vez, podía idear otra manera de engañar a Alex y así evitar todo el sufrimiento de quienes me querían y me creyeron muerta.
"No seas tonta" escucho que dice esa vocesita en mi cabeza. "No tenías tiempo para idear otro plan. Hiciste lo correcto" asegura, pero me niego a aceptarlo.
No puedo hacer lo correcto al engañar y lastimar a tantas personas, ¿no?
—Antes de que Alex intentara controlarme, entre a su cabeza y fui capaz de ver sus planes —empiezo a explicar y mis ojos pican debido a las lágrimas que empiezan a acumularse en ellos—. Él iba a obligarme a matarlos... Sabía que no me lastimarían y por eso me eligió a mí para acabar con ustedes. Quería convertirme en su arma y sabía que, con ustedes muertos, le sería más fácil convertirse en el nuevo líder de nuestra especie.
Me cruzo de brazos ya que me siento inquieta y no sé qué más puedo hacer con mis manos.
—Estaba decidido a convertirse en el nuevo rey y, cuando lo lograra, tenía planeado acabar con el pacto establecido con los hombres-lobos para así poder matarlos a todos —una sonrisa amarga se dibuja en mis labios—. Lo tenía todo perfectamente planeado. El beber sangre de brujas y utilizarlas a ellas mismas para aumentar su poder, el hecho de que fuera capaz de neutralizar nuestros poderes por eso mismo, el control mental en mí, que yo los matara... Todo era parte de su plan.
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Princesa Vampírica
FantasyUn encuentro no muy apropiado. Una rivalidad que se convierte en algo más. Una venganza jurada. Una chica vampiro con un carácter fuerte y un chico lobo arrogante y mandón. Sólo queda una interrogante: ¿Qué es lo que se puede esperar si sus camino...