- ¡Despierta, cup cake! –Grité fuertemente en el oído de Harry.
- ¿Qué? ¿Ah? ¿Qué pasó?
Miré a Harry mientras me desabrochaba el cinturón de seguridad y no necesitaba concentrarme mucho para saber que no tenía idea de lo que estaba pasando. Reí al ver su desconcierto y sin decir nada, me encaminé fuera del avión.
El viaje había sido largo y aburrido… Harry se había quedado dormido y yo no lograba hacer lo mismo debido a sus ronquidos. Aterrizar y llegar al aeropuerto, era algo que estaba esperando ansiosamente en el avión y no quería perder mucho tiempo en sacar las maletas.
- Ángel –Susurró una voz en mi oído.
Sentí como unas manos rodeaban mi cintura y una cabeza se acomodaba en mi cuello. Di media vuelta y me encontré con esos ojos verdes mirándome fijamente. Harry estaba allí, tan cerca de mí, tan perfecto como siempre...
- Noto en tu mirada el deseo de besarme –Río.
- ¡No es cierto! –Me apresuré a decir- Solo… Te ves lindo al despertar.
Él lanzó una carcajada al notar mi nerviosismo y tomó mi mano para continuar hacia nuestro destino. Las maletas eran pesadas y ciertamente, necesitaba la ayuda de Harry aunque no lo admitiera.
(...)
- Llegamos, Harry… ¿Quieres soltarme?
- ¡No quiero! –Gruñó- Quiero que estemos juntos por siempre.
No pude evitar sonreír ante su ternura y le di un fuerte abrazo antes de despedirme. Sabía que Harry debía tener un último ensayo vocal antes de mañana, además debía descansar y prepararse para el concierto, así que no podía permitirme más tiempo con él… Por más que quisiera.
- Harry, debes irte –Susurré- Por favor… No quiero que en el concierto algo salga mal ¿Ok? Debes prepararte y yo quiero entrar al departamento.
- Tú podrías acompañarme, ángel.
- Tengo sueño. No seas testarudo y ándate, nos vemos mañana en el concierto.
- Primera fila, ángel. Quiero verte ahí, quiero ver tu rostro al cantar, quiero que estés ahí conmigo. Ni se te ocurra escabullirte.
Reí al ver que hablaba en serio y negué con la cabeza. Puede que en mi estancia en _______ (TuPaís) no haya escuchado de los chicos, pero ahora amaba su música y además ¿Cómo perderme un concierto de mi novio? “Mi novio” Repetí internamente. Sonreí; sonaba muy bien cuando lo pensaba.
- ¡Planeta Tierra!
- Lo siento –Dije entre risas- Me distraje, anda a tu ensayo vocal Harry, nos vemos mañana.
- ¿No te vas a despedir? ¿Un beso?
- ¡Sabes la condición! –Exclamé tras entrar a mi hogar.
Incluso dentro del departamento, pude oír el suspiro de Harry. Quizá esté siendo un poco mala con él. O quizá esté todo bien… Nadie se muere si no besa ¿cierto? Aunque Harry es una especie rara de persona, no es lo suficientemente anormal para morirse si no da un beso en algunas horas; de eso estaba segura.
- ¡_______! ¡Llegaste!
- ¡Llegué, Summer!
Tras ver a mi amiga avanzar hacia mí, estiré los brazos para sumergirme en uno de sus abrazos. Seguramente quería que le contara todo. Seguramente me llenaría de preguntas y comentarios estúpidos. Pero no me molestaba. Había extrañado a Summer después de todo y un poco de tiempo con ella, me haría bien. Especialmente por el hecho de que, ya necesitaba contarle a alguien el nuevo título que teníamos Harry y yo: Novios.
- ¡Aaaaw! ¡_______! Todo es tan lindo, tan romántico. Harry se portó de una forma tan perfecta en París.
- Ya sé –Reí- Es la trigésima vez que me lo dices.
Y no era por exagerar, pero era una cifra bastante aproximada al número de veces que Summer había comentado lo mismo a lo largo de mi historia.
- Pero es que, es inevitable –Comentó entre risas- Harry es un amor.
- Ni me lo digas… Él es tan lindo, tierno, divertido, infantil, romántico y…
- Cálmate amiga –Dijo nuevamente riendo- Mira tu mirada de enamorada.
Me ruboricé un poco al escuchar esto y acto seguido, reí. ¿Enamorada? Vaya que lo estaba… Pero ¿Cómo no enamorarse de alguien como Harry?