More than I would like [EN EDICIÓN]

HANNIBAL 6

Me desperté de forma violenta mientras intentaba calmar el ritmo en que iba mi corazón, estaba tan acelerado que me había causado bastante miedo en que algo llegase a pasar.

Todo fue un sueño.

Me sentía fuera de sí, aún no centraba mi cabeza en la tierra y parecía estar todavía durmiendo. Cuando por fin pude despertar adecuadamente toque mi pecho comprobando que todo estaba intacto.

─. ¿Que ha sido eso? .─Dije entre dientes.

Aun me encontraba un tanto distraída, no sabia concreta mente que estaba sucediendo, antes había tenido pesadillas un poco fuertes pero nunca de esta magnitud, al pensar en ella se me colocaba la piel de gallina, imposible razonar.

Me levanté de aquella cama y estiré mi espalda, llevaba puesto solo mi camisa de ayer noche, aunque estuviera absorbida por la adrenalina de la pesadilla esta aumento de manera extraordinaria al pensar en la noche pasada. maldita sea, había sido una de las noches que mejor había pasado, recordé aquella cercanía por parte de él, nunca imagine que llegase a pasar semejante cosa habiendo una relación tan firme de por medio.

Busqué por toda la habitación mis tejanos, aunque aun fuera muy de mañana no me parecía correcto bajar desnuda a la planta principal. Me dirigí a la primera sala y no puede presenciar actividad, todo estaba muy callado y el habiente se sentía frió, dirigí mi paso hacia la cocina y allí pude verle nuevamente.

Estaba luciendo su ya típica pijama, tenía el cabello bastante desordenado para lo que el solía portar y su semblante era neutral. Se encontraba tranquilamente tomando su café mientras miraba algo en su ¡Pad  (muy moderno el señor, eh?).

─.  Buen día...  .─Anuncie mi presencia al pronunciar estas palabras, un tanto tímida.

(Aun no podía creer que con todas las cosas que había vivido con ese hombre seguía sintiéndome inferior y avergonzada, idiota de mi)

─. Muy buen día, pensé que tendría que subir a despertarte  .─Comentó él muy elocuente.

─. Dios, que vergüenza .─Tomé asiento enfrente suyo y miré un poco la cocina, era obvio que estaba buscando el desayuno.

Aveces me era imposible poder despertar temprano de manera natural, mi cuerpo siempre se encontraba cansado por lo que caía en un estado de coma al dormir. A comparación de él que tenia pinta de despertarse a las siete de la mañana.

Le vi levantarse de su asiento y dejar el café a un lado, caminó hacia la otra esquina de la cocina y tomó uno de los platos que habían allí que estaban envueltos con una pequeña tapa.

─. Aun está caliente, buen provecho .─dejó el plato frente a mi y abrió este ultimo. Me llego a dirigir una pequeña sonrisa para luego depositar un pequeño beso en mi frente.

Wow, este acto me había dejado postrada en mi lugar y pensaba en derretirme en mi cómodo asiento, puede que mi mente este sobre reaccionando ante un pequeño gesto como este pero el simple hecho de que lo haya echo tan espontaneo es lo que me ha dejado para atrás. 

Había comenzado a devorar los alimentos mientras el seguía esa misma rutina de antes, yo por mi parte me encontraba mirándole con absoluta devoción, ahora ya nada podría ser como antes, habíamos cruzado aquella barrera que estaba llena de señales de advertencia, muy dentro muy dentro de mi había comenzado a crear sentimientos que no deberían ser ni germinados en la mayor profundidad de mi cabeza, aunque me daba igual completamente.

─. Mientras estabas descansando me abrí paso a la organización del evento, también me he comunicado con superiores para hacerles llegar a tus compañeros sobre esto.

─. ¿¡Has hecho todo eso en la mañana!?.

─. No me gusta perder el tiempo querida, usted muy bien lo sabe.

Si que lo sabia, y tanto.