Vampiros y Lobos, libro 3:
Gabriel jamás se imaginó que sería la novia del diablo, pero sólo había que echar un vistazo al desastre que era su vida para comprobar que no estaba equivocada.
Como si eso no fuera problema suficiente, su tío paterno, Ta...
¡¡Llego el momento de decir adiós a Gabriel y Lucifer!! Es duro, lo sé, todos le hemos cogido mucho cariño a esta pareja pero en el fondo sabíamos que este día iba a llegar y que una parte de nosotros se iría con ellos, pero bueno, para no entristecernos más... Os tengo dos noticias, una buena y una mala.
Y como no sé cuál preferiréis primero, aquí os dejo las dos:
★ La buena noticia:
Aún nos queda el cuarto y último libro de la saga. El cual será narrado por nuestra pareja favorita de todos los libros: Kira y Johnny.
★ La mala noticia:
Este libro no será publicado en breve, ya que necesito tiempo para corregir lo fallos de los libros anterior, además de continuar con el resto de mis historias. Por ende el libro no será publicado hasta dentro de varios meses.
Sé que muchos estaréis sufriendo pero no os preocupéis porque tengo muchas otras historias que aunque no son de la talla de Vampiros y lobos, creo que os podrán gustar.
Y ahora sí que sí, os deseo una feliz lectura.
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Narrador omnisciente:
Lunes, no había día que Johnny odiase más que los jodidos lunes. Soltando un largo suspiro, se sentó en el borde de la cama y observó su celda. Era blanca, como el resto de celdas pero de repente las paredes cambiaron y dejaron de ser blancas para mostrar un paisaje boscoso.
Al menos la pared de su derecha, seguro que esto era cosa de Kira. Y como si ella hubiese escuchado sus pensamientos, entró en su habitación con una alegre sonrisa. En sus manos traía una bandeja con dos platos tapados con una fuente, una jarra con sangre, otra con zumo de naranja, una taza de café vacía y finalmente una cafetera.
Kira llevaba una camisa de manga corta blanca, una chaqueta vaquera, unos vaqueros oscuros y botas marrones. El pelo lo llevaba suelto, como lo solía llevar cuando se conocieron y a Johnny le pareció que estaba realmente hermosa.
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- ¿Qué haces tú aquí? -Le preguntó Johnny mientras soltaba un suspiro y miraba a otro lado.
-John me ha dicho que no has querido comer nada, así que supuse que sería por la comida, entre tú y yo...es horrible. Así que te he traído dos filetes muy poco hechos, café recién hecho y zumo de naranja por si acaso no te apetece café. Y como es muy triste lo de comer solo, me he traído una jarra de sangre para mí -Le respondió Kira mientras se sentaba en el suelo y ponía la bandeja delante de ella.
Luego palmeó el hueco libre que quedaba al otro lado de la bandeja, mientras miraba a Johnny con una sonrisa.
¿Por qué se empeñaba en hacerlo todo más difícil? Se supone que debería odiarlo por haber matado a su hijo nonato pero en cambio, Kira venía a verle y le traía el desayuno.
