Coming Home.

나쁜?

Me encontré con Jeunguk un par de veces más, no sé si se podían llamar citas, pero salíamos por un café, a comer, al cine o simplemente a pasar el rato caminando por ahí, era relajante estar así, Jeung no era tan conocido como otros artistas así que la mayoría de las veces nadie se percataba de nuestra presencia.

- Así que... ¿Haz vuelto a hablar con Jooheon?- últimamente el tema de Jooheon sale en todas nuestras conversaciones, no sé por qué, pero me pregunta si he hablado con él cada vez que puede.

- No realmente... A veces nos topamos en el canal pero siempre está bastante acompañado y por eso nunca hemos hablado por más de 5 minutos.

- ¿Siempre está acompañando? Supongo que te refieres a que siempre está rodeado de mujeres.

¿Hay algo malo si es así? Me pregunté. Es verdad que no conozco al tipo ese, pero no comprendo la afición de Jeunguk por hablar tanto de él y tratar de dejarlo siempre como si fuera un mujeriego ¿A mí qué me importa si lo es o no? No entiendo nada.

Ya era hora de volver a casa así que me despedí de Jeung y llamé a John para que viniera por mí, hoy me quedaría en su departamento junto a su familia.

- Llego en 15 minutos, pequeña.

-Está bien.

- El viernes hay una celebración especial en un nuevo club de por aquí... Yo... Yo me preguntaba si querías acompañarme.

Jamás he sido muy amiga de los clubes y las fiestas, ni siquiera bebo, pero por lo que Jeung me estaba diciendo hace ya bastante rato mientras esperábamos la llegada de John, esta podría ser una buena oportunidad para conocer gente nueva y que se dedicara a lo mismo que yo, cosa que siempre se me ha hecho una labor bastante difícil.

- Está bien, veré si estoy libre. Te avisaré.

- Bien.- Una sonrisa se dibujó en su rostro.

El viernes llegó y mi oportunidad de conocer gente nueva me estaba poniendo algo nerviosa. Si bien, mi trabajo está relacionado directamente con la interacción con las personas, en lo personal siempre me he considerado una persona bastante reservada y tímida cuando hay mucha gente desconocida a mi alrededor y eso, en este momento, estaba comenzando a jugar a mi contra.

Jeung me había recogido hace unas horas, cerca de las 9pm. en el lugar que acordamos unos días atrás, y junto con un te ves radiante esta noche, _____ me invitó a entrar en su carro para terminar en el famoso y nuevo club del que me había hablado.
Era un lugar bastante fancy, de hecho, su nombre era fanncy fantasy y estoy segura de que si Jeunguk no me hubiera invitado, jamás me hubiese llamado la atención entrar a este club... O en cualquier otro.

La noche siguió su curso y realmente no estaba interesada en quedarme mucho tiempo más así que estaba planeado el despedirme de un Jeunguk con unas cuantas copas en el cuerpo. Mala idea.

- Vamos preciosa, no puedes irte aún, no haz hecho ningún amigo todavía.- susurró en mi oído, tomando mis caderas.

- No es necesario que los haga hoy, Jeungkuk.

- No te vayas.- Hacía un puchero mientras me miraba y cortaba nuestra distancia.

- No me siento cómoda aquí.

- Podemos ir a algún otro lugar.- Sonrió.- algo más privado.

- Estas borracho, Jeung.

- No lo estoy, muñeca, solo quiero un poco de diversión.

¿Para eso se había acercado a mí? Idiota.

- Sueltame, Jeunguk.- Traté de soltar su agarre, pero lo que logre fue todo lo contrario. Me apretó más contra él y me besó en los labios de una manera torpe.

- Vamos muñeca, muéstrame cómo lo hacen las chicas como tu.- Antes de poder darle una cachetada, me soltó, supongo que se dió cuenta de mi enojo.- Está bien, te llevaré a casa.

- No quiero que me lleves a ninguna parte.- pero nuevamente me ignoró y comenzó a tirar de mí hasta la salida trasera del club.
No puse mayor resistencia, de todos modos me quería ir y mi plan era salir del lugar para retirarme sin su compañía. La puerta trasera daba a un callejón, mal plan.

El chico dulce y comprensivo había desaparecido gracias al alcohol y apenas se cerró la puerta del club, Jeunguk me había acorralado en la pared. Sentí miedo, a pesar de que él estaba con bastantes copas en el cuerpo, yo no tenía la fuerza suficiente para quitármelo de encima, también había bebido un par de cervezas. Pensé lo peor, sentí un nudo en la garganta cuando inmovilizó mi cuerpo y besaba mis labios desesperadamente. Lo mordí para que se detuviera y en ese momento, cuando ya veía venir una cachetada o algo por el estilo, una silueta se encargó de empujarlo y dejarlo tumbado en el suelo.

- ¿Así es como impresionas a las chicas, Kim?

- Bastardo.

¿Jooheon?