Sus ojos rojos se abrieron mientras aquellos brazos fuertes le sostenían de una manera delicada la calidez de un cuerpo vivo que la sacaba de la oscuridad, todas sus defensas bajaron rápidamente.
- mi honorable señor
Dijo mientras su vista se enfocaba mejor en su salvador y en su alrededor para darse cuenta de su error.
- ¿Morgiana-san?- dijo con una voz trémula mientras se ponía en pie lentamente algo avergonzada por su error, con las mejillas vueltas granadas maduras- me disculpó...
- eso fue muy arriesgado de tu parte como es posible que una señorita salga así...
- ¿Momo-san quién es tu honorable señor?
- ¿Alibaba-san?- pregunto la peliroja algo intrigada mientras la más baja negaba con la cabeza.
- Alibaba-ko es mi nuevo señor... Pero nunca será como mi antiguo señor...
- no se si es un cumplido o un insulto- dijo el rubio un poco desanimado por la negativa de la peliplata.
- no es ninguno de los dos... Ustedes son diferentes, es una realidad indiscutible, por eso no eres como el ni el como tú...
- ¿Por qué?- dijo el rubio mientras la peliplata se acercaba a la orilla de la columna lo único que había era una oscuridad absoluta, parecia que no importara hacia donde fuera siempre terminaría ahogándose en las tinieblas.
- por qué el está muerto- dijo mientras le hacia algunas señas a la peliroja para decidir su ruta bajo la mirada de los dos príncipes que le miraban curiosos.
- lo siento... ¿Cuando murió?
- hace 455 añosLos presentes le miraron asombrados por sus palabras incrédulos, mientas el peliazul parecía un poco asombrado.
- entonces cuántos años tienes
- cumpliré 500 en dos días
- no estás bromeando
- soy un demonio mi vida es más larga que la de un humano, mi cuerpo es más resistente que el de un humano... Solo yo puedo ponerle fin a mi vidaSus ojos parecían estar vacíos al pronunciar aquellas palabras como si recordar que estaba viva le llevará al borde de algún precipicio, sus puños se apretaron como si fuera a dar un golpe e incluso la temperatura bajo tan drásticamente que sus compañeros temblaron hasta que la mano del joven magi tomo la suya con una sonrisa.
- Momo-san... Hay que explorar el calabozo... Hay cosas increíbles que nadie más ha visto será divertido- la de cabellos de nieve le miro hasta que sus ojos volvieron a adquirir esa llama, sonriendo mientras se agachaba frente al menor, aquella mano tan cálida rodeando la propia era agradable a niveles que ella no entendía.
- Morgiana-san... Yo llevaré a Aladdin- hizo que el menor rodeara con sus manos su cuello antes de dar una salto....
Cuando al fin llegó a aquel lugar acomodo al menor en el suelo, mientras sus ojos se perdian en el mundo ante sus ojos; todo era tan colorido y extraño pero al mismo tiempo hermoso como un hermoso jardín de un señor feudal, había flora y fauna de formas que nunca imaginó se acercó a una pequeña criatura y la miro y está le miro y después se fue hasta desaparecer en una de las puertas.
- es increíble no Momo-san
- es lindo...- toco su libro con nostalgia- nunca creí que llegaría a verlo
- ¿Pasa algo?
- me siento inquieta- acepto mirando el libro pero este no le mostraba demasiado.
- busquemos el tesoro del calabozo- el menor tomo su mano mientras iban con el resto, les vio sonrreir de manera alegre mientras iban de un lado a otro abriendo aquellas puertas y siendo atacados por esas criaturas.- alto...
Dijo deteniendo la mano de Alibaba en una de las puertas.
- ¿Sucede algo?- dijo el rubio mirandola, hasta que ella toco y una de esas criaturas les abrió ella hizo unas señas pero parecian que no se entendían- no funciono...
- oh... Momo-san es increíble.
- intento hablar con esa cosa
- parece una clase de civilización... Tienen casas, familias y al parecer trabajan
- se molestaron por qué abrimos sus puertas sin llamar- sonrió el peliazul.Los cinco miraron como un grupo iba desapareciendo en una clase de túnel y le siguieron.
- Momo-san hay muchas cosas que desconocemos de usted
- ¿He?
- Momo-san es increíble por qué no nos cuentas más cosas- dijo el rubio con una sonrisa mientras la peliroja afirmaba.
- ¿Como que cosas?
- Sobre su señor- dijo el rubio
- sobre su país- opino la peliroja.
- sobre tu vida...- dijo el magi
- sobre que eres- continuo el príncipe del imperio Kou.El demonio se sentía agobiada pero afirmó con la cabeza.
- mi país esta muy lejos, rodeado por el mar, era el país del sol naciente... Estaba repleto de islas y una extensa tierra fértil, bosques, montañas y arroyos, había ciudades repletas de gente y pequeñas aldeas donde veías casas cada kilómetro... Pero era hermoso en la tierra crecían flores y en el cielo titilaban estrellas... Las mujeres eran hermosas de cabellos de ébano y con buenos modales y los hombres eran honorables y valientes... Había puestos de comida y onsen...
Una sonrisa se formó en su rostro mientras caminaba lentamente por la zona, recordando cada color, aroma y sensación de su lugar de origen.
- también había guerra tras guerra, mi familia fue asesinada y yo solo espere la muerte pero no tenía el valor de acabar con mi vida... Pero un día mi honorable señor me acogió...
Se giro para clavar sus ojos en los del príncipe de Kou, haciendo que una sensación de asfixia le invadiera, junto a la ilusión de que su cuerpo se quemaba lentamente.
- soy un demonio... Nací del odio de la guerra y el olor a carne fétida... Nací como una muestra del odio de las personas, del rencor y de la ambición...
Cerro los ojos lentamente como si se sintiera aliviada al decirlo.
- los demonios deben morir por qué atraen las desgracias... Pero mi honorable señor no lo creía así...
Miro a las pequeñas criaturas pasar y se acomodo en el suelo.
- el me tendió una mano y me llevo a su hogar, su padre le recriminó y me hecho de aquel lugar, el pago a una anciana para que me dejara quedarme con ella no muy lejos del lugar, durante años vivi con esa mujer aprendí a cuidar del campo y de los animales y él venía a verme siempre al atardecer
Podía recordarlo con tanta claridad esa sonrisa y ese cielo rojo tras trabajar todo el dia, tomo entre sus dedos aquella espada corta que se sentía como hielo fue uno de sus obsequios.
- pero como dije los demonios traen la desgracia y un día por mi culpa el se levanto contra su padre y hermano...
Retomo sus camino por los senderos con la mirada baja y una sonrisa en los labios.
- pelee a su lado... Empuñe una espada para el y derrame sangre por el... Fue lo más excitante que pude sentir, crei que siempre estaríamos juntos que el país sería nuestro y por qué no el mundo
Todos se habían detenido, incluso Aladdin la miraba preocupado, negó con la cabeza mirándolos de manera tranquila.
- pero él no lo deseaba así... El solo peleó por mí y por mantener a salvó a Kai...
Podía sentir una pequeña corriente de aire que le movía el cabello mientras esos ojos brillaban intensamente.
- y si eso lo que deseaba lo haría... Quería permanecer a su lado, fue muy ingenuo de mi parte
Podía sentir aquel ruhk tan característico suyo rodear su cuerpo, abrazándo su delgado cuerpo.
- el murió como lo hacen todos los hombres y fue solo cuando ví que murio que me di cuenta de ello... De lo inútil que había sido todo aquello ¿para que quería un país o un mundo? Todo lo que el necesitaba era una cama cálida una mujer, algo de sake, sus amigos y su pueblo...
Bajo la cabeza antes de ver a aquella bestia que pedía miel de manera torpe, desenfundo su espada larga y sin dudar la corto a la mitad.
- creo que solo necesitaba de el
Sentía como un escalofrío le subía por la espalda y como aquella sangre le empapaba el cuerpo, el rojo de sus mejillas era limpiado por pequeños rachuelos salados que emergian de sus ojos, nublando su vista al sentir como su garganta se oprimía por el dolor al recordar como el tomaba su mano y la llamaba: hermana.
- Momo-san- escucho los pasos adelantandose a ella, llamándola y como todos esos brazos le tocaban de manera cariñosa abrazándola mientras ella soltaba en llanto.
Perdonen la tardanza...
Estaba estresada por un examen
:3
Espero que les guste
7v7
Ya empieza el romance

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El Ruhk carmin
De TodoMomo Torahime, es un ser frio que odia su destino, el mismo que la une a Aladdin y sus amigos. Tras un tragico pasado, se vera obligada en confiar en las personas a su alrededor. Tal vez alguien pueda salvarla de su propia depravacion.