Un Amor Verdadero.. (Chris Evans y Tú) TERMINADA

Capítulo 14

No puedo contestar, no sé si es por el golpe, pero casi no respiro y cuando logro entreabrir mi boca siento sus labios sobre los míos...

Chris me besa suavemente y toma mi rostro con ambas manos, esto me toma por sorpresa... al principio no reacciono, sé que debo pararlo esto no está bien, somos amigos, mejores amigos de hecho... pero no quiero hacerlo, no quiero que pare.... porque oh Dios se siente tan jodidamente bien... me dejo llevar,  correspondo su beso,  ha introducido su lengua y tengo que reconocer que es exquisita, sus besos no son desaforados no, son suaves, apasionados, ricos muy ricos y supongo que esa manera de agarrarme por el cabello lo vuelve todo mas sexy y lujurioso, es posesivo y me gusta, me gusta tanto que quiero más....

Con ayuda de Chris logró arrodillarme y al hacerlo mi toalla se cae, y me deja desnuda y expuesta ante él, gime en mi boca,  muerde con delicadeza mi labio inferior y se aprieta a mi rodeándome con sus musculosos brazos y nos levanta, me sienta en el frío mármol del mesón y se coloca entre en mis piernas, besa mi boca, baja por mi mandíbula, mi cuello y llega a mi clavícula..., con delicadeza se inclina sobre mi, una de sus manos acaricia mi muslo y la otra acuna mi seno, un calor sobrecogedor me recorre todo el cuerpo....

A su paso deja un rastro de  besos húmedos y en cuanto su lengua hace contacto con mi endurecido pezón, me mojo y ahogo un gemido enterrando mis uñas de la mano izquierda en su hombro y enredado mi otra mano entre sus cabellos, la mano de Chris que antes estaba en mi muslo ahora se pasea por mi feminidad, aprieto mis ojos y me estremezco por su toque, mi cuerpo entero se contrae... me pierdo en él, en sus caricias y compruebo lo que horas antes solo sospechaba, Chris sabe como complacer a una mujer.... Es un completo maestro, sabe bien lo que hace y sé que esta consciente de todo lo que causa, no lo veo por que tengo los ojos cerrados pero puedo sentir su sonrisa .....

En todo este tiempo ninguno dice nada, sólo nos dejamos llevar por este excitante momento y  es que supongo que tenemos miedo de que el otro entre en razón y pare está locura..... siento que sacude mi cuerpo, y entonces él habla, me llama..

- Sunshine, - su voz se me hace lejana, inentendible -  Sunshine, Sunshine – repite acariciando mi rostro y su voz se va aclarando

- No la mueva tanto – escucho otra voz varonil que me paraliza, acaso alguien nos descubrió? y aunque quiero abrir de inmediato mis ojos no puedo hacerlo sino lentamente.

- Está despertando – esta vez es Kiara, reconozco su voz y comienzo a entrar en pánico.

Logro enfocar mi vista y veo a un hombre de unos 35 años, tez blanca, ojos grises y cabello castaño rizado, usa una bata blanca y de su cuello pende un estetoscopio.

- ¿Señorita me escucha? Señorita ... - insiste y me doy cuenta que no estoy en el mesón – hey señorita me escucha? Si lo hace asienta con la cabeza.

Asiento pues lo escucho aunque no entiendo nada, me duele la parte trasera de mi cabeza, me quejo y por instinto me aseguró de estar cubierta, y me tranquilizó cuando veo que llevo puesta la musculosa de mi pijama por encima de la toalla, ladeo un poco mi cabeza y logró ver á Chris de cuclillas al lado de la cama, y no, no está desnudo  – ¿qué pasó? Dónde estoy? – le pregunto consternada y confundida

Tranquila Sunshine, estás en tu habitación, te caíste de la encimera, te golpeaste la cabeza y te desmayaste – explica Chris y cuando ve que desvío mi mirada hacia el otro hombre me dice – él es el Dr. Hudson de aquí del Resort, está aquí para revisarte.

- Mucho gusto Sunshine – saluda el médico.

- En realidad me llamo ______ - explico

El Dr. Hudson mira a Chris y a Kiara  buscando validación de mi palabra y mis amigos asienten – ok ______, ¿puedes sentarte? – pregunta y yo me siento sin prisa con la ayuda de Chris – muy bien,  ¿te sientes mareada? – niego con la cabeza – perfecto, vamos a practicarte un chequeo simple – del bolsillo superior de su impecable bata saca un aparatito que emana luz – te voy a pedir que mires directamente a esta luz Ok? – obedezco mientras el mueve el aparato frente a mi de un ojo al otro – muy bien, ahora – se coloca el estetoscopio en lo oídos – necesito que tomes una buena bocanada de aire y lo sueltes lentamente cuando yo te diga – coloca el aparato frio sobre mi pecho – ahora – suelto el aire retenido como me indicó - una vez más por favor – pide y yo obedezco, repetimos el procedimiento un par de veces más, pero está vez con el aparato escuchando los pulmones – ok, ¿logras escucharme bien o tienes alguna molestia en el oído?