Alguna vez alguien pregunto:
"Puede esperar un amor toda la vida?"
Y otro alguien contesto:
"Si, si es un amor verdadero.."
En su momento esa respuesta me causo ternura pero no le dí crédito alguno, hasta que hace unos días me di cuenta que a lo...
El fin de semana termina y con el los festejos y nuestra estadía en los Hamptons..
A pesar de la presencia de Maximillian en la empresa, la semana transcurrió sin mayor novedad, de hecho hasta habían buenas noticias...
- Hablé con Maritza sobre tus vacaciones.
- Y ¿qué te dijo?
- Que ella y Santino, están más que felices de recibirte..
- ¡No lo puedo creer!! – grito emocionada.
- Pues créelo corazón, de hecho ya le di tu número de teléfono y tu correo para que se pongan en contacto y puedan coordinar el tema de la fecha y esas cosas...
Me abalanzó a mi amigo y lo abrazo – gracias Chris no se que haría sin ti..
- Pues probablemente viajar hasta Viena y de ahí tomar un vuelo a Trento – bromea.
***
Por extraño que parezca Max casi ni ha tratado conmigo, lo que llama mi atención, pero en el fondo lo agradezco, *tal vez ya encontró una nueva obsesión y al fin he quedado libre* pienso y cuando estoy por celebrarlo la vida me enseña que no hay que cantar victoria antes de tiempo, pues a la semana siguiente Max me dedica toda su "atención", con la excusa de querer supervisar y colaborar en el proyecto que esta a mi cargo y por desgracia sus observaciones e ideas son brillantes, así que no me queda de otra más que tenerlo pegado a mi como chicle y es que al menos por unas semanas compartiremos oficina..
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(Max Tucker everybody..)
- ________, primor – saluda entrando a mi oficina, y en cuanto me tiene acorralada pone sus manos en mi cintura y me da un doble beso en las mejillas, saludo que devuelvo sin mucho agrado.
- Maximilian, que gusto – digo con fingido entusiasmo y me separo lo más rápido posible refugiándome tras la seguridad que me brinda mi escritorio.
- No, no por favor muñeca llámame Max – pide casi ofendido y toma asiento – lamento no haberte dedicado tiempo la semana pasada, pero tenía que tratar unos asuntos específicos.
- No te preocupes Maximi.. – me da una mirada de reto – Máx – corrijo – a decir verdad tenía mucho trabajo, al igual que ahora.. – insinúo.
- Tenemos – agrega.
- Si..... con respecto a eso... estaba pensando que talvez estarías más cómodo tomando posesión de mi oficina y yo puedo acomodarme con Nadia...
- No, claro que no preciosa, recuerda que debemos trabajar juntos, además por los puntos que quiero empezar lo más probable es que estemos la mayor parte de tiempo fuera de la empresa...
- Eso va a ser complicado ya que debo atender asuntos aquí y..
No terminó la idea cuando veo a Alex entrar en mi oficina.
