Y luego...nos encontramos

Capítulo XXX- Una película

***Amanda***

Me levanté algo aturdida y adolorida por la fantástica madrugada de sexo que tuve hoy. Jamás pensé que iba a disfrutar tanto después de una salida en la que estuvieran David y Josh juntos, me fascinó ver lo sobreprotector que puede llegar a ser David y lo imprudente que puede llegar a ser Josh, esos dos son polos opuestos, se repelen.

Son las 8:03 de la noche y me siento algo repuesta, al sentir los brazos de mi David alrededor mío me siento protegida, bien, en calma. Me giro para verle y mi sorpresa fue pillarlo observándome, tenía el pelo revuelto y una sonrisa gigantesca y hermosa en su rostro de modelo.

-Buenos días/noches preciosa- me dijo, ensanchando su sonrisa- ¿cómo te sientes?

Le sonreí- Bien, muy bien- le besé cortamente- ¿Y usted señor Strauss?

Me acercó más a él, me abrazó y besó mi cabello- Si todas las mañanas fueran como esta noche, sería el hombre más feliz de este y todos los universos.

Nos levantamos hambrientos, bajamos hasta a cocina donde, para nuestra sorpresa, nos esperaban los chicos y ¿Josh? ¿Qué demonios hace Josh aquí?

-¿Buenos días?- pregunté, de veras habían invitado a Josh aquí.

-Buenos días hermosa- me dijo Josh- Por lo que veo has dormido bien pero descansado poco- retuve las ganas de reírme al escuchar esa frase que una vez había utilizado él mismo para referirse a un fin de semana en las montañas que prácticamente se resume en sexo. Lo vi luchando tratando de reprimir las ganas de reír pero no me pude contener más y empecé a reírme, el también explotó y nos reímos los dos al unísono mientras que los demás nos miraban confundido, excepto Delilah que mordía su labio inferior con fuerza para no dejar salir las carcajadas pero que nos miraba como cómplice.

-Pueden contarnos el chiste para poder reírnos nosotros también- dijo Eliot, mirándonos como si fuéramos un par de locos.

-Pues es muuuy gracioso, de hecho, recuerdo que a Amanda le encanta contar esa historia- me miró y como me fascinan los retos, acepté encantada.

-Bueno, lo que pasa es que esa frase nos recuerda una etapa muy cómica en nuestra vida, ¿no Josh?- le miré entrecerrando los ojos.

-De hecho es cómica solo para ti- me dijo tornando su rostro serio.

-Bueno, creo que sí.- Miré al resto del grupo y continué hablando- Queridos hermanos de otra sangre, lo que pasa es que, aquí, mi amigo Josh, tuvo una etapa de, a ver ¿Cómo decirlo? De…gay- los chicos abrieron los ojos, incluyendo a Josh, quien luego volvió a su habitual sonrisa burlona- Si chicos, Josh fue marica.

Todos empezamos a carcajearnos como locos.

-Bien, pero aún no entiendo- dijo Blake entre risas y secando algunas lágrimas que salían de sus ojos sin permiso.

-Lo que pasa es que cuando estuvo en esa “etapa”- hice comillas con los dedos- me invitó un fin de semana a la casa de campo de sus padres, me prometió un fin de semana de locura, bebida y otras cosas que no voy a mencionar, la cosa es que no hicimos nada, no creo haber salido de esa casa en todo el fin de semana, solo vimos películas y cuando nos fuimos de allí, terminó diciendo la frase que dijo. Lo hubieran visto llorando como una niña cuando vió que Lassie se había perdido o cuando Jack muere en la película de el Titanic.- volvimos a reír con ganas.

-Oyeee, ese era mi secreto- me dijo Josh con una mano en el pecho y fingiendo que se sentía traicionado- Además- continuó mirando a los chicos con su actitud normal- luego de eso conocí a una chica hermosa, una diosa en la cama- dijo lanzándome un vistazo