Y luego...nos encontramos

Capítulo IV- Que, ¿casualidad?

***Amanda***

Estaba sentada justo al lado de mi hermana, me puse el cinturón ya que el piloto había aunuciado el desenso de el avión. El enojo que tenía hacia mi madre se disipó por completo así que nada más me sentía emocionada por ver cómo es la ciudad, la casa y empezar a explorar aquel sitio con mi hermana. Había recibido un mensaje de mi madre:

-"Nena, cuando se bajen por favor esperen donde se recogen las maletas. Lance y yo nos tardaremos un poco ya que tenemos que cerciorarnos de que la mudanza ya esté en casa y tenemos que hacer varias llamadas. Las amo y les ruego que perdonen los inconvenientes que esto les pueda haber causado, saben que las amo más que a mi propia vida.

                                                  - Mamá

  P.S- Nanda, tienes que hacerle  caso a ese chico, está   guapísimo ;)

Mi hermana y yo no pudimos dejar de reír en un buen rato gracias al pos-data de mi madre. Ella al parecer también se ha fijado en las miradas que David ha estado enviándome, quien, de hecho, desde que compartí mi desayuno con él ha hecho más evidentes sus violaciones visuales, y para mi sorpresa, no me molestan, para ser sincera me encanta que me mire. Esto nunca me ha pasado antes, si hubiese sido otro ya le hubiese soltando un insulto de coña y hasta le hubiese propiciado una buena bofetada pero a él no puedo decirle nada, no lo sé.

Sin intenciones de hacer que mi madre se vuelva loca pensando que todavía estamos enfadadas con ella al no responder su mensaje, le envié uno, con parsimonia, para que sufra un poco más.

-"Mi querida Señora Fritsburg, me da un placer informarle que la estaremos esperando, tal y como usted nos ha pedido, en el área de recoger el equipaje. No te preocupes mamá, ya no estamos encojonadas contigo, pero no quita que nos guste hacerte sufrir, dadas las circunstancias. Nosotras tambien te amamos, lo que sabes que, por lo menos para mí, es muy molesto expresar, dado mi carácter. Ahora te dejo porque todo este vómito escrito me va a hacer tener una crisis de identidad.

                                                                                   - Nanda

P.S - No te importa un carajo lo que haga o deje de hacer con ese chico, aunque en realidad está guay, pero me da igual. Te amo.

En realidad no me apetece en estos momentos discutir con nadie y aunque mi madre se pasó veinte pueblos al hacernos esto y no decirnos nada hasta el día del viaje, pues, ahora mismo me gusta la idea de vivir en un sitio nuevo, conocer otras personas y por primera vez en mi vida buscar un amigo o amiga de verdad, no simples mequetrefes con aire de grandeza y en busca de popularidad. Mi madre me envió otro mensaje y el tono de alerta me sacó de mis pensamientos.

-"Que no me hables así, mira que soy tu madre. "

-"¿Me lo dices por lo de el P.S?"

-"No, te lo digo por lo de Señora Fritsburg, soy tu madre y además no estoy tan vieja. Por lo del P.S me la suda que no me quieras contar nada, pero sabes a fin de cuentas que soy tu madre, que me debes tener confianza y que, para lo mínimo que necesites estoy aquí, ¿Vale?"

-"Si mamá, ahora ya déjate de cursilerías que estas mierdas me hartan."

-"Está bien Srta. Scroodge, también quería decirte que tan pronto salgamos del aeropuerto iremos a conocer a tus tíos, ellos viven aquí en Westminster y conocerán de vez a sus hijas."

-"No sabía que tenemos familia en Londres."

-"Bueno ya te acabas de enterar"