Somnus

15. Rey

El general Glauca atacó a Regis sin piedad, pero él pudo pararlo con un poco de suerte y un escudo mágico que no parecía poder resistir demasiado sus ataques.

-¡Ya tenéis el Cristal! ¿Qué más pretendéis arrebatarme?- Le encaró.

Pero de poco le sirvió. Glauca destruyó el escudo, agarró a Regis del brazo y con un movimiento seco, le cortó dos de sus dedos con la espada liberando un grito de dolor. El Sello de la Luz salió rodando de su mano hasta toparse con las de Ravus.

-"El Sello de la Luz". Perdí a mi madre, mi patria, mi derecho de cuna... Niflheim fue lo único a lo que pude aferrarme.- Le echó en cara a Regis, quien le miraba reprimiendo un gesto de dolor.-Todo para llegar hasta aquí... ¡Por fín el anillo me pertenece!

Glauca hizo el amago de atacarle, pero en cuanto Ravus se colocó el anillo en su dedo, todo se detuvo a su alrededor.

-¡Oídme, ancestrales Señores de Lucis! ¡Yo soy Ravus Nox Fleuret! ¡Y estoy aquí para reclamar vuestro poder!- Sin embargo nada pasó. Ravus escuchó murmullos huecos.- No... ¿Por qué? ¡¿Por qué me rechazáis!?- Gritó mientras su mano se envolvía en llamas de repente.

El anillo cayó al suelo, junto a Ravus retorciéndose de dolor y con su brazo izquierdo consumiéndose entre poderosas llamas. El tiempo volvió a su curso y Nyx, Kaze, Lunafreya y Axel llegaron a la sala donde se desarrollaba la pelea. El anillo volvió rodando hasta los pies de su dueño, quien lo cogió con cuidado y Glauca, percibiendolo, se levantó para volver a arrebatarselo a como diera lugar. Sin embargo, los recién llegados lo vieron también.

-¡Cuidado!- Dijo la princesa corriendo hacia el rey mientras los tres glaives se abalanzaban contra el general, a pesar de que los dispersó de un plumazo.

La princesa cogió el bastón de Regis y le ayudó a levantarse mientras los otros tres volvían a la carga. Kaze le lanzó su chakram con fuerza mientras Axel aprovechaba la ocasión para acercarse a él. Nyx, con un grito de furia, efectuó un ataque electro y a continuación ayudó a Axel con su ataque. Kaze siguió lanzando su chakram hacia el general mientras cubría al rey y la princesa es su huída.

Llegaron hasta una extraña pared donde Regis, con la ayuda de su magia, activó un mecanismo que hizo que se abrieran dos puertas ocultas.

-¡Aprisa! ¡Por aquí!- Les indicó el rey a Nyx y Axel.

-¡Vamos!- Inquirió Kaze viendo la situación. Ambos glaives hicieron un potente ataque electro en conjunto que consiguió desplomar a Glauca en el suelo durante unos instantes, que aprovecharon para proyectarse al interior.

Una vez dentro, la princesa se arrancó un jirón de su vestido para vendarle la mano a Regis.

-¿Estáis bien?- Les preguntó Kaze a sus compañeros. Ambos asintieron respirando fatigados.

-Esto lleva hasta una salida secreta. Seguidme, y una vez fuera dirigíos a Altissia, Noctis aguarda allí.

-Majestad...- Pronunció Lunafreya.

-Sabíais que esto pasaría.- Le echó en cara Nyx.

-Sí. Era la única forma de desviar su atención de Noctis.- Aclaró el rey.

-¿Es eso digno de un rey? ¿Sacrificar a los hijos de Lucis para salvar al vuestro?

-¡Es cierto! ¡Eso es una injusticia de lo más egoísta!- Gritó cabreado Axel.

-Calla.- Le cortó Kaze dándole un codazo.

-Para salvar al mundo.- Aclaró la princesa. Regis se giró hacia ellos.