5. Año Nuevo

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-¿Aún no estáis listas?- Se quejó Gladiolus desde el salón de su casa esperando a que tanto Iris como Jenne terminaran de prepararse para poder ir a la Ciudadela sin pillar demasiado atasco. Bufó y se dejó caer en el sofá con aburrimiento. Mira que las había avisado para que estuvieran ya preparadas a la hora a la que habían quedado. Odiaba llegar tarde a los sitios.

"¿Habéis salido ya?" Recibió un mensaje de Prompto. "No. Aún se están vistiendo Jenne e Iris." Respondió simplemente. Pasaron unos minutos hasta que recibió un nuevo mensaje de Ignis. "¿Cómo váis a ir? ¿Paso a recogeros?" Se ofreció. "¿No ibas a llevar a los otros tres?" Pregunto de vuelta. "Solo a Prompto. Amnis y Noct fueron antes"

Gladiolus soltó un largo suspiro. En un principio iban a ir con su padre, pero las chicas no habían terminado así que Clarus tuvo que marcharse y a ellos no les quedó otra alternativa que optar por un taxi o el transporte público. La primera opción no parecía tan mala, aunque cara, y la segunda quedaría totalmente descartada por las chicas que, tras arreglarse tanto, no querrían ir de un lado para otro. Lo cierto es que el ofrecimiento de Ignis se le parecía como un milagro traído por los Sidéreos pero tampoco quería hacerle esperar demasiado.

"¿Tienes mucha prisa por llegar?" Le preguntó finalmente. "No demasiada. ¿Necesitáis tiempo?"- Le respondió el de gafas.

La paciencia se le estaba agotando así que subió rápidamente las escaleras en dirección a la habitación de Iris y abrió la puerta sin más, pensando en sus propias cosas.

-Chicas, ¿os queda mucho má...?- Un peluche de un Moguri se le estampó en la cara con un grito de "¡Fuera!", ambos salidos de su hermana. Consciente de por qué le estaba lanzando cosas a la cara, cerró la puerta con un "¡Lo siento!"- Que si os queda mucho más. Ignis dice que puede venir a recogernos, pero tampoco se va a tirar esperando aquí hasta las doce de la noche.

-Ya estamos terminando casi. Dile que en media hora se pase.- Respondió Jenne. Gladiolus suspiró y le escribió lo correspondiente a Ignis con la consiguiente respuesta afirmativa. Pasaría antes a recoger a Prompto y después se pasarían a por ellos tres.

Media hora... ¿Real o interpretada por ellas? Suspiró. No conocía a nadie más que le hubiera hecho esperar tanto como ellas... Bueno, sí, Noctis. Ese crío iba a su bola a todo momento y le daba igual llegar tarde a los entrenamientos porque se había quedado dormido. Solo pensaba en divertirse y dormir. Él a su edad ya había espabilado lo suficiente como para que no tuvieran que estar detrás de él todo el rato. Pero el principito parecía necesitar a Ignis y Amnis detrás de él casi en todo momento. Bien visto tampoco se llevaban tanto... apenas unos tres años...

Interrumpiendo el hilo de sus pensamientos, las chicas bajaron las escaleras del salón y le mostraron el resultado final. Lo cierto es que Jenne tenía una mano estupenda para todo lo que requiriera algo de color. Nunca había visto a su hermana pequeña tan guapa y bien maquillada y sobre su novia, apenas tenía palabras. Ambas chicas se rieron al ver a Gladiolus sin poder articular palabra. Realmente sería un evento único. Gladiolus carraspeó un poco y tras decirlas lo guapísimas que estaban se sentaron a esperar a que el bendito Ignis llegara con el coche.

***

Noctis observó su antigua habitación como si fuera un lugar completa y absolutamente nuevo. En el fondo le invadía la nostalgia pero no dejaría que Amnis, concentrada en hacerse un recogido en el pelo en el otro extremo de la habitación, se percatara de ello. Cada esquina, cada recoveco del techo le recordaba a algo distinto. Su escritorio seguía intacto, se veía que el Servicio había seguido limpiando exhaustivamente la habitación. No sabía si todos los días o solo con vísperas a que él llegara. Se dejó caer boca arriba sobre la cama con un suspiro. Aún no se había puesto el traje. Seguía con el mismo chandal con el que había llegado, claro que tampoco tenía prisa. Hasta que comenzara la fiesta aún quedaban un par de horas...

SomnusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora