Capítulo 10

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Kylie sale corriendo detrás de Elijah en dirección al patio, voy atrás de ellos algo preocupado.

-Chicos, tengan cuidad...

Elijah cayó al suelo. Rodé los ojos algo divertido, mis precauciones no habían servido de nada.

-Tío Nate, yo... No hice nada.

-No te preocupes, Ky. Eli sólo se cayó. ¿Te puedes levantar, pequeñín?

Asintió mientras se levantaba con una sonrisa.

-¡Nate! Debemos cortar la tarta.

-Bueno, niños, ya escucharon a Mamá Osa, debemos entrar para ver si tendremos un niño o una niña.

-¡Te escuché!

Reí mientras veía como los dos chicos entraban en nuestra casa. Violet, con ya cinco meses de embarazo, tenía los brazos cruzados justo arriba de su precioso vientre y tenía un semblante molesto. Puse mis manos en su cintura, atraje su cuerpo al mío y la besé, pero no me correspondió. Fruncí el ceño.

-¿Qué sucede, cielo?

Sus ojos se llenaron de lágrimas para luego abrazarme fuertemente.

-Malditas hormonas, las odio.

-Tranquila, ya se irán... Además, estaré aquí siempre, no me iré a ningún sitio. Por más odiosa que te pongas.-di un leve toque en su nariz.-Ya sabes que te apoyaré en lo que más pueda.

-Es fácil para ti decirlo, no eres el que llora porque te pones un zapato en el pie equivocado.

Solté una carcajada, por lo que recibí un golpe en mi brazo.

-Lo siento, preciosa. Debía reírme.

-¿Te puedo pedir un favor antes de que vayamos a partir la tarta?

Asentí.

-Los que desees.

-¿Puedes quedarte conmigo? Digo, sin soltarme. Quiero abrazarte, no me siento muy bien. Te necesito conmigo...

-Por supuesto, Vi.

Rodeé su hombro con mi brazo y deposité un pequeño beso en su sien. Caminamos hasta donde nuestras familias se encontraban, mi suegra se había preocupado de llevar la torta hasta el centro del salón. Estaba nervioso.

-¿Que creen que sea?-preguntó mi tío Darren.

-Yo, personalmente, quiero una niña pero presiento que es un niño.-confesé y luego miré a mi esposa.-¿Qué hay de ti?

-Creo que es una niña.

Sonreí. Todos comenzaron a sacar sus teléfonos celulares, cámaras de vídeo y demás objetos para tomar fotos y para poder grabar. Le pregunté a Violet si ya era hora de tomar el cuchillo, asintió en respuesta. Lo cogí con una sola mano y la dirigí al centro, corté una línea. No lograba ver el color todavía. Mi esposa cortó la otra línea, creando un triángulo, y entre los dos sacamos la porción. Todos gritaron.

Un pedazo de tarta de color rosado.

-Dios mío, ¡es una niña!

Besé a Vi repetidas veces. Era una pequeña bebita que venía en camino y sería la más hermosa de todas.

-¡Felicidades!

-¡No lo puedo creer!

-Tío Nate, yo quería un niño.

Miré a Eli, estaba triste, así que lo cogí en brazos y besé su mejilla.

-Lo siento, campeón. Pero no es algo que podamos elegir. Piensa en que podrás jugar con ella, con las muñecas, al fútbol...

-Pero... Las niñas no juegan fútbol.

-Claro que sí. Todos podemos jugar.

-¿De verdad?-asentí.-¡Genial!

Me pidió que lo bajara, así que cumplí sus deseos y me dediqué a aceptar las felicitaciones de mi familia y de la de Vi. Y ésta última, al pasar un rato, me jaló del brazo repetidas veces. Entre los invitados, sobresalía uno que era mucho más alto y venía llegando. Violet me miró asustada.

-Tranquila, todo está bien...-susurré.

Llegó al frente nuestro y sonrió. Nos extendió una caja envuelta en papel de regalo y arriba tenía una cinta roja.

-Felicidades, chicos. Serán excelentes padres.

Mi esposa aceptó el regalo con algo de miedo y sonrió.

-¿Cómo... Cómo lo supiste, Shawn?

-Taylor me dijo.-se encogió de brazos.-Supongo que era la única manera de saberlo.

-¿Podemos hablar los tres en privado?

Nos dirigimos a la habitación de huéspedes y cerramos la puerta. Shawn se veía bien, algo cansado, diría yo.

-Estás libre.

-Lo sé. Me dejaron hace una semana. Además de entregarles el regalo, venía a agradecerte, Violet, en especial a ti. Gracias a ti, y a Karen, puedo ser parte de la vida de mi hijo, y eso es algo que no tiene precio.

-Era lo correcto para Taylor y para tu bebé, Shawn.-susurró mi esposa a mi lado.-No podía vivir con la culpa de que lo dejé vivir sin su padre. Y disculpa por haberme sumado a la demanda...

-No tienes que hacerlo, Vi. Gracias a eso, abrí los ojos y pude darme cuenta de muchas cosas que antes no sabía. Voy a cambiar, y ésta vez no habrá vuelta atrás.

Puse mis manos en mis bolsillos delanteros algo nervioso. No sabía a dónde llegaríamos con todo esto.

-Nos alegra mucho saber eso, Shawn.-murmuré.-Y me alegra saber que estás bien, viejo.

-Gracias. Ahora, me iré a casa. Suerte con la bebé, chicos. Es la bebé más afortunada de tenerlos a ustedes como padres.

Pasó frente a nosotros, dispuesto a irse, pero lo detuve. Me miró confundido.

-Quédate.

-No creo que...

-¿Por qué no? No nos haría mal estrechar lazos nuevamente. ¿Cierto?

Me sonrió levemente y asintió.

La fiesta avanzó con risas, anécdotas y hasta con Shawn cantándole una canción de su disco a nuestra bebé. Se movió demasiado mientras sucedía, según Violet. Nuestras familias se fueron a sus casas y Shawn igual. Vi se encontraba acostada a mi lado, con su cabeza descansando en mi pecho mientras acaricio su vientre. De vez en cuando, puedo sentir movimientos por dentro y eso hace que mi corazón se acelere.

-¿Puedes creerlo?

-¿Qué cosa?-pregunté besando su cabello.

-Que es una niña.

-Ay, Dios. Estoy tan emocionado. La adoro, Vi. No sé como, pero la amo demasiado. Será la niña de mis ojos.

-Hey, me dejarás en el olvido.

Hizo un puchero tan ridículo, que me hizo reír.

-No. Nunca podría hacerlo. ¿Y sabes por qué estoy tan seguro de eso?

-¿Por qué?

Se levantó y se puso encima mío. Subí mis manos por sus piernas.

-Porque eres especial. Un rostro tan hermoso y perfecto, no se olvida tan fácilmente. Y además porque eres mi perfecta esposa y el amor de mi vida.

Y pasó lo que no había pasado en cinco meses y medio. Amaba a Violet, con mi alma.

¿Podríamos tener algo amigable con Shawn? Eso esperaba.

Dusk Till Dawn [WS #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora