Dusk Till Dawn [WS #2]

Capítulo 43

Habían pasado exactamente dos años desde que me habían quitado la custodia de Emma.

Dos años desde que había perdido por completo a Lexi.

Dos años desde que comencé la preparación de mi propio restaurante.

A decir verdad, la nueva custodia funcionaba perfectamente. Me dolía no poder vivir con Emma, pero la visitaba cada vez que podía y que quería.

Hoy era uno de mis días de visitas.

-¡Papi! ¡Vamos al parque!

-Vamos al parque.-afirmé.-Pero debes despedirte de Mamá primero.

Emma corrió hasta la habitación de Violet, quien trataba de descansar por un dolor de estómago bastante fuerte. Tenía el período.

-Adiós, Mami. Papá y yo iremos al parque.

-Me alegro mucho, bebé. Disfruten del día.

Hice un gesto con mi mano, el cual fue imitado por Violet. Subimos a mi coche y comencé el camino hasta el parque. No nos demoramos nada en llegar. Emma me pidió que la ayudara con los columpios.

-¿Cómo has estado, pequeña?

-Muy bien. Auque... Algo nerviosa.

-¿Y por qué es eso? Eres demasiado hermosa como para andar tan nerviosa.

Emma rió.

-La próxima semana entro a la escuela. Mamá debe habértelo dicho. Iré con Holly.

-Sip. Tu mamá me lo comentó hace unos días y es por eso que te tengo un regalo en casa.

-¡Siii!

En eso, mi teléfono comenzó a sonar.

-Discúlpame, Em. Es tu madre...

-Está bien. Dile que la quiero.

Reí mientras contestaba con una boba sonrisa en mis labios.

-¿Hola?

-¡Nate! Dios mío... Estoy tan agradecida de que contestes.

Violet estaba jadeando.

-¿Qué? ¿Por qué? ¿Qué pasa?

-No sé que me pasa. Pero estoy segura de que no es mi periodo. Tengo miedo, por favor... Ven.

Me vi algo acorralado en aquella situación. Los nervios siempre me salían en contra de la vida y buenas decisiones.

Shawn no podía llevarla porque se encontraba en California grabando su nuevo álbum. En coche, eran doce horas de viaje, y en avión, solamente dos.

Pero en dos horas, Violet ya se hubiera desangrado.

Emma se bajó del columpio en cuanto se lo pedí. Corrimos hasta el auto. Conduje con mucho cuidado mientras le comentaba de otros temas a mi hija, con tal de que no pensara en el estado de su madre.