Soy tu Esclava (Fanfic Reylo)

25

La siguiente parada fue en Gatalenta, el planeta natal de la difunta Amilyn Holdo. Al bajar de la nave Leia recordó sus visitas al sistema, vitas que disfrutaba con su amiga, Leia no estaba lista para perderla, una lágrima ligera bajó por si mejilla tras el rastro de recuerdos. Han la tomó del hombro para consolarla, sabía lo que esa mujer significaba para su esposa.
-Siempre fue impredecible.- dijo Leia casi en un susurro.
Gatalenta era un planeta cálido y tranquilo, la gente de ese planeta mantenía vivas las tradiciones Jedi después de la purga. El amor, la compasión y la serenidad eran enseñanzas primordiales en ese sistema.
Fueron recibidos cortésmente por el gobernador del sistema, la emperatriz debía realizarse unas revisión de rutina y que mejor que hacerlo en un planeta así de tranquilo.
Ahsoka miró a su alrededor y al igual que los demás, notó  que la fuerza era intensa en ese sistema.
La revisión terminó en orden, los tres tenían salud y no había ningún problema con los pequeños, aunque pronto comenzarían a absorber la energía de Rey. El médico Preguntó a los padres si querían saber el sexo de sus hijo a lo que ambos contestaron negativamente.
-Queremos que nos sorprendan.- dijo Rey tomando la mano de su marido.
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Horas más tarde una nave pequeña aterrizó. De ella descendieron Poe y Rose para dar el informe de su situación.
Al mirar alrededor Poe  no entendió como es que Amilyn Holdo actuaba tan diferente al resto de ciudadanos. Él general de la Resistencia fue a hablar con Leia mientras esperaban la llegada de los emperadores.
-Ella era tan diferente.- dijo el piloto en voz baja refiriéndose a Holdo.
-Cuando éramos jóvenes, Ella decía que no quería ser como el resto, que quería destacar.
-Me hubiera gustado conocerla más, no haber dudado de ella.
-Siempre fue impredecible, entregada, cariñosa. No lo olvides.
-No lo haré.
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La pareja llegó con sus compañeros, el grupo subió a la nave de Ahsoka y tomaron haciendo en los viejos sillones de piel. Leia preguntó por el estado de su nuera y sus nietos, respondió afirmativamente explicando lo que había dicho el médico.
-Al parecer lo más duro viene ahora, él médico dijo que a partir del quinto mes comenzaron a consumir mi energía, por lo que en unos días debería comenzar a debilitarme.
-¿Eso que quiere decir?- cuestionó Poe.
-Que van a consumir su energía vital.- respondió Ahsoka – Si lo hacen en exceso podría morir antes de dar a luz.
-Por ahora estamos bien.- dijo Rey de inmediato. -El médico quiere acompañarnos para asegurarse se que todo salga bien, también tiene conocimientos en la fuerza, por lo que resultará muy útil.
-Partiremos mañana, y el médico con todo su equipo irá con ustedes, Dameron.- dijo Ben.
-Creo que no me puedo oponer ¿verdad?- dijo burlón, después se aclaró la garganta y continuó. -Uno de nuestros transportes ligeros ha sido interceptado, para nuestra suerte al no encontrar a Rey se marcharon, según el reporte de mi teniente a cargobles leyeron las mentes, pero no encontraron nada, ellos no tenían información al respecto de la misión.
-Eso quiere decir que sí son adeptos a la fuerza.-Dijo Han.
-Así es.- aún no saben en que nave están, por lo que van a continuar interceptando naves al azar, probablemente hasta que den con el Halcón.
-Parece que la estrategia ha estado funcionando.
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Al llegar el amanecer y avistarse los primeros rayos de los múltiples soles de Gatalenta, continuaron su viaje. Poe se marchó con el médico que atendería a Rey, cargando con equipo médico y droides que podrían llenar un hospital entero.
  Las naves despegaron al mismo tiempo yendo en direcciones contrarias. Poe  se comunicaba con Finn que iba en otro transporte escoltado al Halcón Milenario.
-Dice el peludo que Threepio ya lo está cansando.
-Dile que lo desconecte, es la única forma de callarlo.- Finn soltó una leve risa al escuchar lo que Poe  le decía.
-Seguro le agradará hacer eso.
Poe manipulaba los controles de su nave mientras revisaba la ruta que debía seguir hasta hacer el cambio de guardia.
-Te veré en Dathomir, ahí haremos el cambio.
-Algo me dice que es una mala idea, Poe.
-Estando los dos ahí ¿Qué ha de pasar?
Finn dudaba de la decisión de Poe, había escuchado historias sobre ese planeta, historias que no le gustaría averiguar si eran verdaderas.
Suspiró ampliamente.
-Muy bien, te veré en diez rotaciones.
- Sí, ten cuidado.- dijo tiernamente mientras cortaba la comunicación.
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En Coruscant.
Hux dormía plácidamente a lado de su esposa, un jarrón rompiéndose llamó la atención de ambos, aunque no se querían levantar, su jornada había sido muy pesada y sólo pensaba en dormir.
-Debió haber sido Millicent.- dijo somnoliento.
-Ve a ver.- le ordenó Amisa.
Hizo el esfuerzo por levantarse se la cama, aún con los ojos cerrados puso los pies sobre la alfombra que estaba al pie de su cama y sintió como su gata color naranja se atravesó entre sus pies. Un ruido menos sonoro hizo que se le quitará el sueño y corriera a buscar si bláster al cajón se su cómoda.
-¿Qué sucede?
-No lo sé.- le dijo casi en un susurro -Quédate aquí y llama a Zynda por el comunicador.
Hux salió de la habitación con el blaster en mano, vio que su amiga peluda salió de la habitación, la alcanzó para tomarla, meterla de regreso a la habitación y cerrar la puerta. Caminó lentamente a la sala de su departamento, veía desde la esquina del muro para verificar que no había nadie ahí, después caminó a la cocina y tampoco había nada.
Suspiró de alivio y se rasco la nuca. Llamó  a uno de sus droides de protocolo, sintió sed y se sirvió un vaso con agua, la bebió y su droide nunca llegó, volvió a llamarlo y no obtuvo respuesta.
Mientras iba a la estación de carga de C-8OP, encontró el jarrón que le había dado el Gobernador de Gatalenta como regaló de bodas, se agachó para verlo mejor.
-Millicent, estarás castigada un buen tiempo cuando Amisa vea esto.
En cuestión de microsegundos Hux escuchó un cristal romperse y el grito de Amisa desde la habitación, se puso de pie con brusquedad y trató de correr cuando sintió un doloroso golpe en la cabeza, calló al suelo y sus ojos se cerraron involuntariamente.
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Zynda respondió su comunicador y al escuchar a Amisa fue de inmediato a responder a su llamado. Era una suerte que estuviera en Coruscant entregando reportes y recibiendo instrucciones.
Al llegar, llamó por el comunicador de la puerta principal, pero no obtuvo respuesta, llamó por segunda vez, y un silencio total, llamó una tercera y tampoco. Decidió usar el código de emergencia del departamento para obtener acceso. Al poner el primer pie en la casa vio a Hux tirado en el recibidor, parecía mal herido. Corrió hasta él  y lo llamo por su nombre, al cabo de unos segundos reaccionó.
-¿Qué…qué pasó?- Preguntó el hombre confundido, recordó a su esposa -¡Amisa!- gritó poniéndose se pie y corriendo tambaleante a la habitación.
Entró y observó el cristal de la ventana roto, trago duro y sintió como un nudo se le formaba lentamente en la garganta. Zynda entró detrás de él, y le entregó un holomensaje que encontró en la mesita de la sala.
-Será mejor que veas esto.
Encendió un mensaje se encontró con la imagen de Ventress.
-Para cuando encuentres esto, ya habrás notado que nos llevamos a tu amada esposa- dijo con su característica voz que se arrastraba casi por el suelo -Dame las coordenadas a Ahch-To y la devolveré sana y salva, niégate y morirá. Tienes 5 días para pensarlo. Te veré en el nivel 5 de esta asquerosa ciudad. 
Hux enfureció al término del mensaje, lo lanzó tan fuerte que se rompió el dispositivo.
-¿Qué haremos?
-Llamaremos a Kylo. Mientras tanto informa en el Senado y envía a un grupo a buscar por las calles, aún deben estar en el planeta.
Millicent hizo que Hux la abrazara, él lo hizo con melancolía.
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Habían llegado a Dathomir, los dos líderes de la Resistencia aterrizaron sus naves en el planeta rojizo, en cuanto se vieron corrieron a abrazarse el uno del otro.
-Mas tarde tendrán tiempo para eso.- Dijo Rose sarcástica -Ya no tardan en llegar Kaydel y Nefereth para el cambio de guardia.
- Si, lo sabemos.- Respondió Finn.
-Enviaremos sondas a explorar el planeta, mientras esperamos.
-¿Por qué escogieron este planeta?- preguntó el médico gatalentiano.
-Por las historias terroríficas, según Poe. 
-¿Sabían que en este sistema también había quienes dominaban la fuerza y que en este planeta fue criado Darth Maul?-dijo el médico.
-¿Quién es ese?- cuestionó de vuelta Poe.
-¿No se han dedicados leer un poco de historia, cierto?- negó con la cabeza, se sobó la frente como si le dolerá y continuó. -Fue un zabrak que estuvo presente en la guerra contra los separatistas, fue alumno de Darth Sidious.
La noticia impactó a ambos, no tenían idea de donde estaban, pero no podían cambiar de planes, necesitaban hacer ese cambio para no llamar la atención o llamarla hacía el Halcón.
La mítica nave estaba por aterrizar, su piloto también necesitaba descansar un poco antes de continuar con el largo  viaje.
Antes de descender Chewie encendió de nuevo a C-3PO, quien se molesto al haber sido apagado.
-Esto es indignante, como es posible que me hayan desactivado.- se quejaba el droide mientras descendía de la plataforma. Antes de decir alguna otra cosa, realizó un rápido escaneo visual del sistema -¿en qué sistema estamos?
-Dathomir.- respondió Rose mientras activaba las sondas de reconocimiento.
-Ah…- respondió el droide y regresó a la nave.

Habían pasado varias horas desde que llegaron al planeta, las sondas estaban regresando de su misión de reconocimiento, sólo faltaba una. La técnico iba a ir a investigar, pero vio que estaba llegando la nave que transportaba a Connix y Nefereth, las siguientes guardias del Halcón.
Rose entregó el reporte sobre las Sondas a Poe, pero no le tomó mucha importancia.
-Debió haber sido un animal, aunque para evitar conflictos nos iremos en cuanto se haga el cambio.- dijo a Rose.
Hicieron el cambio y esa misma noche dejaron el sistema, sin darse cuenta que una sombra los observaba desde lejos.
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Rey estaba durmiendo en uno de los camarotes de la nave. Ben ayudaba a su padre a arreglar unas fallas mínimas de la nave de Ahsoka, con tantas fallas en el Halcón, ya estaban acostumbrados a lidiar con naves viejas.
Un leve pitido llamó la atención de Ben, de inmediato tomó si comunicador holográfico y respondió.
-La tienen.- dijo Hux desesperado.
-¿Qué? ¿A quién?- dijo de nuevo Ben.
-A Amisa.