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Después de asegurarse que la Senadora no corría riesgo, los líderes tomaron unas flota de destructores estelares y siguieron la nave  de los inquisidores hasta Mustafar, al ver el sistema Ben sintió melancolía recordado que ese fue el planeta en que murió Anakin y nació Darth Vaider; ahora sería el lugar donde realmente se extinguirían los inquisidores.
La flota guardó reposo en la órbita del sistema volcánico mientras sondas de reconocimiento eran enviadas, BB9-E realizó un escáner indicando que, en efecto, había vida en el sistema, encontró la huella calorífica de  varios seres que se camuflada por el calor del planeta.
Al recibir el reporte de las sondas Ben envió la orden de disparar con sus cañones de iones a la base, en momentos como ese hubiese deseado tener una Starkiler o una Estrella de la Muerte para acabar rápido con el trabajo, desecho esa idea al notar que no tendría una venganza placentera, que no vería irse la luz de los ojos de quienes atentaron contra su familia.
El bombardeo comenzó, mientras bajaba con una tropa de troopers con equipo para soportar el calor. Al poner el primer pie en el planeta recibió ataques de sables rojos, el encendió el suyo, lo empuñó como se le había enseñado, con destreza y velocidad fue acabando sin piedad con todo ser que se cruzaba en su camino.
Hux guiaba los ataques aéreos desde su puente de comando, hubiese deseado estar presente y acabar con unos cuantos en nombre de su esposa y el dolor que le hicieron pasar. Pero permaneció ahí, aparentemente en paz, ya que la rabia corría por todo su cuerpo.
La tropa de fue abriendo pasó entre los cientos de cadáveres caídos.
En ese momento no era Ben Solo, sino Kylo Ren, el despiadado hombre que miró con asco a todos esos seres que detestaba tanto. Ni un segundo pasó por su mente lo que pudiera pensar su esposa, ni lo que diría cuando supiera que Kylo Ren seguía vivo, que no era sólo un nombre que representaba poder, que siguió guardando esa esencia oscura en lo más profundo de su ser.
El emperador no tenía ni un rasguño cuando llegó con los que creyó, eran los líderes, más capacitados, con más destreza en del uso de su sable. Los enfrentó uno a uno, eran más débiles que los guardias Pretorianos de Snoke, sin pensarlo hizo uso de la fuerza para ahogar a uno, lanzó un sable encendido a otro partiéndolo por la mitad cómo al antiguo líder supremo. A uno más lo decapitó, el cuerpo inerte cayó al suelo, Ren lo empujó con una patada al foso de lava.
Miró a su alrededor, sus soldados hacían lo mismo, lanzaban los cuerpos a los ríos de lava, caminó hasta si nave, comenzaba a ser Ben Solo, volvía a guardar a Kylo Ren en una caja en el fondo de su alma.
Al llegar a su destructor estelar contó a Hux que ya los habían acabado a todos, él pelirrojo respiró más tranquilo, la venganza estaba realizada.
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Al concluir el ataque, Hux se dirigió con la flota a Coruscant para cuidar de su esposa, que estaba internada en un hospital de la ciudad. Al verlo Amisa sonrió, le extendió su mano, necesitaba de su apoyo, él la tomó y besó su frente.
Hux observó alrededor de la habitación, estaba repleta de flores de distintos sistemas y varios obsequios.
-¿Quién trajo todo esto?
-Senadores y amigos.- respondió ella levemente.
-Hipócritas.- dijo Hux para sí mismo.
-¿Ocurrió algo cuando estuve ausente?- el general no esperaba esa pregunta, claro que había pasado algo, se habían negado a ayudarlo cuando la Primera Orden había ayudado a toda la galaxia.
-Nada en especial.- respondió para no traer preocupaciones a su esposa.
-Deberías ir a descansar.- sugirió -Te ves cansado.
-Lo haré en un rato.- dijo mientras acariciaba la cabeza de su mujer -Vendrá Zynda a cuidarte mientras arreglo los desastres de la casa. 
-Muy bien, no quiero que te malpases mientras estoy aquí.
Pasadas unas hora, Zynda se paró en el umbral de la puerta, saludó a su jefe y a Amisa que la recibió con una sonrisa.
Hux se despidió de su esposa y de la caballero de Ren y salió de la habitación.
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En La inmensidad del espacio, el wookie pilotaba el Halcón Milenario dando vueltas por la galaxia, pasó por segunda vez cerca de Dathomir.
La nave guardiana de la rebelión seguía al carguero, debían continuar con esa rutina por lo menos un mes más.
Algo llamó la atención de Kaydel, el radar mostraba una nave que salía del hiperespacio, alertó a sus hombres y los envió a sus puentes de batalla, fueron atacados sin aviso.
La nave que los atacaba contenía a los sobrevivientes de la masacre de Mustafar, entre ellos se encontraban Zigor y Ventress. 
El ataque no fue demasiado, las nave que transportaba a los inquisidores no tenía un armamento muy avanzado, sin embargo dispararon en los propulsores de la nave rebelde, por lo que tuvieron que abandonar la nave antes de que está explotará, las cápsulas de escape fueron recibidas por Chewbacca en el Halcón.
Ya en el cargero Kaydel corrió hasta la torreta del viejo carguero para contra atacar, se sentía un tanto tonta por permitirse perder una de sus naves por el enemigo tan fácilmente.
Disparó cuanto pudo, dañando la nave enemiga, en segundos terminaron los cálculos para saltar al velocidad luz en. Dirección a Coruscant.
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Hux estaba en su casa guiando a las personas que estaban reparando las cosas que rompieron los inquisidores cuando secuestraron a Amisa. Con el estaban Aneu y Noá, que suponían había espías siguiéndolos, las órdenes eran simples, encontrarlos y matarlo.
Nefereth llegó al departamento, fue directamente al despacho de Hux para entregarle su reporte.
-Como habíamos imaginado, tanto en Naboo como aquí hay espías, son caza recompensas que, según mi informante, fueron contratados por una tal Asvent, supongo que es un pseudónimo.
-Muy bien, ya conocen las órdenes del emperador, mátenlos sin piedad.
-Estamos regresando a nuestros antiguos yo.- exclamó Noá.
- Es sólo por la situación.- dijo Aneu -Trataron de hacerle daño a Amisa y a Rey, no podemos dejar las cosas así.
- Sí sienten alguna clase de remordimiento, sólo recuerden que hicieron daño a nuestra familia.- argumentó Nefereth.
Después de esas palabras, todos salieron de la habitación, recibieron las direcciones de los escondites y comenzaron a acabar con todos los caza recompensas. Ninguno sintió remordimiento, todo lo contrario, creían que ya era hora de volver a actuar como antes, cuando ellos imponían las reglas en sus batallas y no tenían que limitarse por caridad o humanidad.
Cuando los caballeros hicieron su trabajo, Hux avisó a Kylo que ya no había amenazas.
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Después del ataque en Mustafar, Ben viajó en su Tie Silencer hasta una de las lunas de Endor, ahí descansaban mientras regresaba el emperador de resolver el problema del secuestro de la Senadora.
Fueron recibidos por los Ewooks en sus bellas chozas que se encontraban construidas en las alturas, aunque quisiera, Rey no podía pasar el tiempo con las adorables criaturas, su estado empeorará cada vez más.
Ahsoka le hacía compañía, para evitar el aburrimiento Rey le pidió que le contará historias sobre sus batallas en la guerra de los clones, eso emocionó a la vieja troguta, tenía historias maravillosas sobre sus compañeros clones, en especial el día en que conoció a Anakin, Obi-Wan y el líder del escuadrón 501 Rex.

Ben llegó varas rotaciones después, y lo primeros hizo fue ir con su débil esposa, al verla palideció, realmente se encontraba grave, sólo dormía y parecía tener anemia.
Leia le dijo que debían ir a Ahch-To lo antes posible, debían dejar   estar en el espacio lo antes posible, Ben accedió contando a su madre lo sucedido en Mustafar, también le contó sobre los caza recompensas que los estaban cuidando.
-Eso es imposible.- dijo ella -¿Cómo es que no lo notamos?
-Nunca lo imaginamos, uno de ellos ayudó al secuestro de Amisa, gracias a la fuerza está bien, pero delicada.- miró a Rey que dormía -Aunque aún tiene mejor salud que Rey.
-Tranquilo hijo,- dijo Leia tomando a Ben del hombro -Todo saldrá bien.
-Eso espero madre.- dijo colocando su enorme mano sobre la de su madre aún en su hombro. -Partiremos al amanecer.

Soy tu Esclava (Fanfic Reylo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora