The Loveliest Boy I've Ever Fucked (L&Lightxtú)

En el que otro shinigami entra en escena

-____-san, por favor, dime algo- pidió el detective, sin dejar de seguir con la mirada los movimientos que realizaba la chica para empacar sus cosas. Era claro que estaba recibiendo el tratamiento de la ley del hielo, por la forma en que esta se puso a tararear como si no hubiese nadie en la habitación mas que ella.

No había mucho que empacar. Solo su cepillo de dientes, una peineta, su bolsita de tampones, una cajita de condones nueva, y un par de cambios de ropa que L no le había comprado, y ya podía decirse que era todo. Ni siquiera tomo la toalla de baño, pues esa, como casi todo lo que había ahí, no le pertenecía.

-____-san... Sabes que trate de decírtelo desde el inicio. Me fue imposible hacer nada por Amane, con tantas evidencias señalándola a ella.-

La cancioncita que tarareaba su interlocutora no hizo mas que aumentar de volumen.

-Lo lamento. No fue mi intención sacar provecho de la situación, ni de tu agradecimiento. Fue una conducta deplorable, y entiendo que no quieras hablar conmigo, pero, por favor, deja de empacar.-

Obedeció, aunque solo lo hizo por que había acabado de meterlo todo en la bolsa y ahora se la había colgado al hombro y se dirigía a la puerta a pasos agigantados.

-¿___-san?-

-Adiós, L.-

-Por favor no...-

-No me gustan las jaulas. Y no me gusta ver a la gente en ella. ¿Me culpas? Ahora que Light ha pedido ser encerrado también, Soichiro no tardara en seguirle. Pobrecillo. Lo siento... No hay nada de que hablar.-

-Debe haber algo que te convenza de quedarte...-

-No creo que puedas ofrecermela...- le paralizó con una mirada y siguió avanzando -Adiós-

Y eso fue todo.

Al de salir del hotel, la jovencita hizo una escala en un solitario baño publico solo para echarse agua en el rostro y convencerse a si misma de que no estaba llorando.

Si hubiese sido mas atenta, se habría dado cuenta de que un trocito de papel flotaba de manera extraña en el aire cerca de ella, y habría estado preparada para cuando este le rozó el codo, no obstante, se encontraba pensando tantas cosas al mismo tiempo que de no ser por que el shinigami blanco apareció de pronto tras su espalda, con un dedo sobre los labios a forma de indicar que no gritara, si que habría gritado.

Lo que sucedió, no obstante, es que después de parpadear varias veces se convenció de que era real todo aquello.

-Ummm... Hola- dijo, con la voz apagada.

-¿Por que estas ayudando a Misa?- la voz de la criatura era profunda, fuerte, y le sorprendió poder entenderla.

_____ se encogió de hombros. No lo tenía muy en claro. No sabía, ni siquiera, si lo mejor era negar haber querido ayudarla o confirmar que lo había hecho.

-No me gustaría estar en su lugar.- confesó al fin - Eso es todo. Entre chicas deberíamos ayudarnos, seguro tu debes de saberlo.-

-¿Habias visto a uno como yo antes?-

-No.- mintió la callejera.

-¿Y sabes lo que soy?-

-Una shinigami-

La monstruosa criatura asintió.

-Quiero que convenzas a L de liberar a Misa.-

-No puedo hacerlo. - ____ suspiró. -Si pudiera, ya lo habría hecho.-

-¿Es que no quieres ayudar a Light?-

-Ayudar a Light es lo último en lo que pensaba...- gruñó - Escucha, no quiero sonar grosera pero ¿por que necesitarías mi ayuda siendo una diosa de la muerte?-

-Tengo mis razones- dijo Rem. Y las tenía. Si mataba a L y a todo el equipo, para salvar a Misa, moriría.

-Bueno, pues... Lo siento. De verdad me gustaría poder hacer algo. Pero mi palabra no vale mucho en consideración de L. Ya lo he intentado.-

-Él te escucha.- sentenció Rem, logrando solo que el corazón de la jovencita punzara más. -Ví como trataba de convencer al resto de esos hombres para que te creyeran. No lo logró, no obstante, si le insistes un poco...-

-¿Por que puedo verte de pronto?- la interrumpió - Vi como Misa hablaba contigo ahí dentro de su celda, pero no te veía y ahora aquí estas. ¿Por qué?-

-Te he tocado con un trozo de mi death note.-

-¿Death note?-

-Por eso puedes verme. Si tocaras un trozo de otra, podrias ver al shinigami del humano al que pertenece. Pero supongo que si no vas a ayudar a Misa lo mejor sera que te mate ahora que lo sabes...-

-L se vengara con ella si muero de pronto. Sabe que es el segundo Kira. No le será difícil señalarla culpable.-

Rem sabia que aquello era cierto, pero no por eso dejo que la amedrentarán.
-Dijiste que no le importabas.-

-¡No dije eso! Dije que... Bueno, que no escucha mis consejos como tu te crees.- _____ se enfurruñó. -Di mi mejor intento para sacarla de ahí, y solo jugaron conmigo. ¿Que vuelva? No, gracias.-

-¿Y si a cambio mato a quien tu quisieras?-

-¿Como le matarías? ¿Con la libreta?- un nombre y un rostro. Un nombre y un rostro. Un nombre y un... ¿Acaso habia resuelto el caso sin la intencion de hacerlo? Como Rem no contesto, la chica cambio de tema -¿Puedes matar a Light Yagami?-

-No, no a él- eso rompería el corazón de Misa Misa, aunque también a la shinigami le agradaría que él muriera.

Pero ____ ya pensaba en otra persona. Charlie. A nadie le afectaría la muerte de Charlie. Al contrario, sería un regalo para la humanidad. -¿Y puedo ver cuando lo hagas?-

Rem entrecerro los ojos con sospecha. Aunque era verdad que aquella chica extraña también era parte del séquito de Kira. Era una aliada. En algún momento u otro se habría enterado de la libreta por medio de Light, tomando en cuenta lo embobado que parecía por ella.

-Supongo que puedes- concluyó.

____ se lo pensó un buen rato, y finalmente soltó un largo suspiro.

-Bien, ¿Que sugieres tú que haga para convencerlo? Tu fuiste la del plan.-

Si Rem sonriera, habría sonreído justo entonces.

-Eso no es mi asunto. Tengo mas cosas que hacer.- como por ejemplo, buscarse un nuevo Kira desconocido al cual dar la libreta, justo como había planeado Light. -Buena suerte, humana... ¡Ah! Y si dentro de un mes L no la ha liberado... Considerate muerta.-

-¡Seguro! ¡Vaya! ¡Deberías de postularte para presidenta, con esas charlas tan motivadoras que das!-