Día veinticinco.
Ruggero.
- Mierda Katja, realmente me jodes tanto -dije mientras apretaba el teléfono a mi oreja-.
- Eres mi maldito hermano, necesito este favor -ella contestó-.
- ¿Por que no puedes conseguir una maldita niñera?, estoy malditamente cansando, me acosté muy tarde y además he hecho una reservación en un restaurante con clase para llevar a Karol está noche - apreté mi cabello y patee las casillas-.
Katja me llamó en medio de la primera clase y me sacaron.
- Ruggero se ha muerto el padrino del hermano de Mateos, necesitamos viajar a Bradford, mamá no va a estar en la cuidad y sabes que Jazmín es muy pequeña para dejarla con una niñera -ella rogó-.
- Katja.
- Rugge, te daré 150 libras.
- 250.
- 200.
- 240.
- 235.
- Bien la cuidaré,¿A que hora se van?- pregunté-.
- A las 4:30 de la tarde.
- Bien, déjala en el apartamento antes de irte, ¿Cuándo vuelven?
- Mañana temprano, iré por ella a la guardería.
- Bien.
- Bien, te amo.
- Que te jodan -colgué la llamada y me dejé caer hasta el suelo-.
Miré la hora en el móvil y aún faltaba media hora para mi siguiente clase.
La puerta de una de las aulas se abrió y vi como Karol y Sebastián salian riendo de algo. Me puse de pie.
Karol estaba de espaldas y la sonrisa de Sebastián era tan grande que mi estómago se contrajo.
Karol se giró y sus ojos se encontraron con los míos.
- Ruggero - susurró mientras me iba acercando. Miré a Sebastián cuya sonrisa ya no estaba-.
- Hola- tomé su mano y ella sonrió-¿Por que no estas en clases?
- Porque terminamos antes un examen en parejas, nos han dejado salir - dijo ella-.
- Oh, ¿Vamos afuera? - pregunté mirando rápidamente a Sebastián-.
- Me encantaría, pero Sebastian me ha dicho para ir a tomar un café con él.
- Pero tu vas conmigo - dije-.
- Rugge...- Karol comenzó-.
- Escucha amigo, la invité primero - Sebastián no la dejo hablar-.
-¿Quién está hablando contigo idiota?- Hale la mano de Karol y ella
se tropezó hacia adelante-.- Estoy enamorado de ella - me miró y la boca de Karol se abrió ligeramente- Y estoy tan enamorado de ella que acepto el hecho de que solo la puedo tener como amiga - ahora la miraba a ella y mis puños estaban sumamente apretados- Solo es un café, la respeto no intentaré nada.
- Oh por supuesto que la respetas, tanto así que la besaste frente a mi - le recordé con ironía-.
- Rugge por favor basta, estas siendo idiota, es solo un café e iré con él - Karol buscó mis ojos pero yo solo miraba a Sebastián-.
- No - di un paso hacia él pero Karol se puso frente a él-.
- Voy a ir con él - me miró severamente-
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Treinta. (Ruggarol)
RomanceTreinta, sólo dame treinta dias y lo conseguiré. Novela Adaptada, todos los créditos al autor