Día veintiséis.Me sentía totalmente descansada, mis músculos estaban relajados y mi cabeza ligera.
Desperté, sin embargo, no abrí los ojos, me deje disfrutar de la suavidad de mis sábanas por unos minutos más.
Abrí los ojos con suavidad y me reincorporé de golpe al darme cuenta de que este no era el dormitorio de Dalton, y en efecto está no era mi cama.
Mis ojos se detuvieron en el despertador que indicaba que eran las 12:45 del día.
Saqué las sábanas de mi cuerpo y con rapidez, me puse de pie.
Caminé por los pasillos del apartamento totalmente desorientada, en la sala el televisor encendido y Bob Esponja junto a Patricio intentaban hacer una fogata bajo el mar.
La cabellera castaña y rizada estaba apoyada sobre el respaldo del sofá, un pequeño moño color rubio lo acompañaba.
- Rugge - lo llamé desde atrás y él y Jazmin se giraron para verme-.
-¡Karol! - Jazmín se subió al respaldo del sofá haciéndome correr para que no se cayera- Al fin despiertas, mi tío y yo te llevaremos a almorzar- se señalo orgullosa con su pulgar. La tomé en brazos y alcé la ceja hacia Ruggero-.
-¿Por qué me has dejado dormir hasta esta hora?, tenía clases.
- Lo se, lo siento pero te veías tan cansada, que pensé que nos deberíamos tomar el día todos - Se puso de pie y besó mi frente- Jaz y yo te queremos invitar a almorzar -Jazmín asintió rápidamente-.
- Bien- susurré acariciando el rostro de Jazmín- Pero debo ir por ropa a Dalton.
- De eso nos encargamos también Karol - Jazmín habló tratando de bajarse de mis brazos, la dejé en el suelo y la vi correr a la cocina-.
Segundos después volvió con un bolso.
- Mi tío y yo te escogimos una ropa en tu casa - dijo ella pasándome el bolso- Tienes la ropa más linda que vi.
- Gracias Jaz- me arrodillé a su altura y besé su frente. Ella corrió a la habitación de Ruggero para vestirse- No lo puedo creer - le lancé un mala mirada a Ruggero-.
-¿Qué?- frunció de ceño-.
- Ruggero, perdí la clase de hoy, la semana que viene tendré examen- caminé a su habitación con él detrás-.
- No es para tanto, yo pierdo clases todo el tiempo y aquí estoy- se señaló a si mismo y rodé los ojos-.
- Espero disfrutar de ese almuerzo- Cerré la puerta de la habitación en su cara y lo escuche reírse-.
**
Mantenía a Jazmín sobre mi cadera, ambas al lado de Ruggero mientras ordenaba nuestra comida.
-Tío, no olvides mi juguete- le recordó Jazmín por quinta vez a Ruggero-.
- Mierda, ya lo se Jazmín - utilizó el nombre completo de Jaz y ella frunció el ceño-.
- Muy bien, entonces ¿es una Cajita feliz y dos combos especiales?- preguntó el chico tras el mostrador-.
- Aja, y un maldito juguete- golpeé el brazo de Ruggero en cuanto las palabras abandonaron su boca-.
- Nosotras iremos por una mesa- le avisé y me llevé a Jazmín hasta una de las mesas donde había silla de niños-.
- Jaz quita esa carita- pasé mi dedo índice por su nariz-.- Mi tío está enojado- ella hizo un pequeño puchero y yo suspiré-.
- Tu tío está enojado la mayoría del tiempo - Susurré con una sonrisa y me reincorporé cuando Ruggero se acercó con la bandeja a la mesa-.
ESTÁS LEYENDO
Treinta. (Ruggarol)
RomanceTreinta, sólo dame treinta dias y lo conseguiré. Novela Adaptada, todos los créditos al autor