¡Miku-Senpai!┆LenKu

05: Rival-Kun.

—Leeeeeen, estoy aburrida.—Habló Gumi en el recreo.

—¿Y qué quieres que haga?

—No sé, has magia, supongo...—Dijo para después reír.—Vayamos a ver a Miku.

—Bueno.—Fingí estar desinteresado, pero era lo contrario.

Desde que Miku-Senpai me dijo lindo, trato de cruzarme con ella más seguido y esta será una buena oportunidad.

Caminamos por los pasillos hasta encontrar a la hermosa aquamarina.

Estaba en el segundo piso, después fue a la biblioteca y volvió a su sala.

La seguimos todo el recreo.

—¿Dónde estaban?—Habló Fukase.

—En el baño.—Mentí.

—¿Los dos juntos? ¿Todo el recreo? A menos que estés con una diarrea horrible es algo que no se puede creer. Debes mejorar tus mentiras, Len.

—¿Dónde estabas tú, Fukase?

El pelirrojo ignoró la pregunta.

—Andaba por ahí.—Se dignó a responder.

Dejamos ahí el asunto.

En el otro recreo volvimos a seguir a Miku-Senpai.

Y en el otro igual, al día siguiente lo mismo, y así toda la semana.

No teníamos nada mejor que hacer.

O por lo menos eso supongo.

Fukase, al enterarse comenzó a hacerlo también.

Yo tenía las sospechas de que su senpai era amiga de Miku-Senpai.

En ese momento estábamos en el comedor.

No seguíamos a Miku-Senpai solamente por curiosidad.

Sino que también recopilamos datos sobre ella.

—Veamos, los días martes, jueves y viernes va a la biblioteca y pasa el recreo de diez minutos ahí, la mayoría de veces repasa matemática, porque se le da mal.—Hablaba Gumi.

Dios, ella parece acosadora.

—Todos los días pasa el primer receso con sus amigos en su sala. Sale de ella solamente cuando va a la máquina expendedora a comprar bebidas.

Asentí.

—En los almuerzos se sienta en la tercera mesa cercana al pasillo derecho.—Ella revisó sus apuntes.—Y todos los viernes se queda después de clases para el consejo escolar.—Sí, esa es toda la rutina de Miku.

—Gumi, con todo respeto puedo asegurar que has sobrepasado el nivel de acoso existente.

—Pero soy la mejor shipper que has visto ¿No?

Fukase no tuvo otra opción que asentir.

—También podría conseguir su horario de clases, si lo deseas, claro, Len.

—¿Para qué querría Len su horario?

—No sé, ese sería su problema.—Dijo Gumi mientras se desperezaba.—Quizás le podría ayudar con las materias que le cuestan.

—No creo que eso pueda ser, Gumi.—Habló Fukase.—Ella es una senpai. Su orgullo sería herido si un kōhai le enseñase.

—En eso Fukase tiene razón, Gumi.—Admití.—Además Miku-Senpai es demasiado brillante como para que yo le enseñe. Ella es la que debe enseñarme a mí.

—Pero sólo te enseñará si eres su kōhai y ya sabes que en los planes de Miku no está elegir kōhai.

—Claro que lo sé, esta semana lo repitió muchas veces.

Terminamos de almorzar.

(...)

Con Gumi caminábamos hasta el departamento que compartíamos. He de explicar las razones de eso, pero no es momento.

El punto es que un chico y una chica nos frenaron el paso.

—Necesitamos un poco de su mal utilizado tiempo.—Dijo la voz masculina.

—Realmente vamos apurados.—Intentó Gumi que nos dejaran en paz.

—Pues deberán excusarse rápido.—Habló la chica.

Al mirarlos a la cara los reconocí. Eran Yuma Ayuzawa y Flower Tsukino, mejores amigos de Miku-Senpai.

—¿Qué quieren saber?—Pregunté sin interés.

—¿Por qué nos siguen?

Reí.

—No los seguíamos a ustedes, señoritos, mi atención va especialmente dirigida a una sola persona.

El pelirrosa abrió los ojos.

—¡Tú eres el mocoso rubio! ¡Tú eres Len Kagamine!

Sonreí.

—No sabe el honor que me provoca el saber que ha oído de mí.—Dije sarcástico.

Esta vez la mujer habló.

—Así que tú eres el chico enamorado de Miku.

—En eso tiene razón, señorita. Estoy locamente enamorado de Miku-Senpai, porque ella me salvó de una violación. Y hace dos años yo juré que mi corazón, cuerpo y alma pertenecen a Miku-Senpai.

Yuma hizo una expresión de asco.

—Eres demasiado empalagoso.—Miró a Gumi.—¿Y tú, niña, qué tienes que ver en este asunto?

—Mi trabajo es hacer que Miku-San y Len terminen juntos, se casen, tengan tres hijos, vivan en una casita en la colina y sean dueños de un perro llamado Gumi en honor a mí.

Flower lanzó una risa.

—Lindo cuento de hadas, chicos. Pero lamento decirles que Miku está lejos de sus expectativas.

—Sabes, chico, me diste una razón para venir a esta inservible escuela.—Habló Yuma.—No dejaré que Miku termine contigo.

Escuché sus palabras y comencé a caminar.

—Okey, suerte en eso, Rival-Kun. Sayonara~

Gumi y yo nos alejamos.

No dejaré que unas amenazas me asusten. Debo ser fuerte y valiente para Miku-Senpai.

•

Hola :)

¿Se han dado cuenta de que Len con sus amigos, Luka y Miku es tierno, pero cuando está siendo vulnerado se vuelve otra persona?

Es como un Len tierno y un Len salvaje.

Me gusta bastante eso.

En multimedia la ficha de Yuma.

Adiós.

19/05/18.