Capítulo 40

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Luego de haber hecho un desastre en la cocina, el pastel había quedado muy rico debo admitir; para la cena logré que James se quedara en casa y comiera con nosotros, mis papás nos preguntaban sobre nuestro primer día y lo que había sucedido, no podía decirle a mi mamá que habíamos tenido una pelea de harina porque se enojaría así que lo omitimos, la cena estuvo entre risas y una que otra anécdota. Me gustaba ver como habían aceptado a James, tanto mis papás como los gemelos hasta mi hijo, porque lo veía e iba corriendo hacia él.

(...)

Viernes.

Los siguientes días en la Universidad habían sido tranquilos, pero llegando el viernes se había integrado un nuevo compañero, que debo admitir está de buen ver, James se dió cuenta de que lo miraba de más porque me pegó con su codo para que lo mirara a él y despegara mis ojos del nuevo compañero. Lo cual me dio algo de gracia, porque solamente tengo ojos y corazón para James.

-Recuerda que por aquí anda tu novio -me susurró una vez que se acercó más hacia mi.

-Obviamnete lo sé -le dedique una gran sonrisa, coloqué mi mano sobre su pierna dandole un ligero apretón, y lo había logrado, me he distraido del show que tenía frente a mi  pero para mi suerte tenía a Sharon a mi lado, la cual babeaba por el nuevo, y yo, ni sabía como se llamaba.

-¿Cómo se llama el nuevo? -le susurré para que nadie más escuchara.

-Se llama Tomas, pero no lo mires, es mio -me reí por lo último que dijo.

-Recuerda que tienes novio.

-Pero el no está aquí como otros -señaló a un lado de mi, así que giré hacia esa dirección y me encontré con un berrinchudo James, me acerqué hacia este.

-Te quiero solo a ti -me recargué sobre su brazo, al despegarmé volví mi atención a Sharon- solo te digo que está en el otro salón -si, su novio estudiaba Administración de Empresas.

-No me arruines la fiesta cariño -me reí y presté atención al frente porque me llamarian la atención si seguía platicando.

Así es como había sido el conocer a Tomas, luego de ese momento me di cuenta de que ya estaba hablando con James, lo cual me dió curiosidad, me ha ganado, quería hablarle yo. Decidí acercarme ha ellos y presentarme.

-Hola, me llamo Sara -extendí mi brazo hacia Tomas.

-Hola, un gusto, mi nombre es Tomas -me regresó el saludo; se veía educado.

-Le estaba comentando a Tomas que yo también soy nuevo aquí, y que podríamos llevarnos bien.

-Oh, es muy buena idea. Si quieres puedes venir con nosotros al almuerzo, ya verás que te va a gustar el campus.

-Hola jovenes -dijo Sharon cuando se acercó a nosotros- ¿A dónde planeaban ir sin mi?

-Vamos a llevar aTomas a la cafetería para que la conozca.

-Me uno a ustedes -comenzamos a caminar por el pasillo hasta llegar, estaba algo llena porque ahora es cuando la mayoría tiene tiempo libre; nos colocamos en la fila para dar nuestra orden, Sharon estaba junto a Tomas, mientras que James y yo atrás de ellos.

-¿Qué vas a querer? -le pregunté a James.

-A ti -levantó sus labios en una sonrisa.

-Que tonto eres, ya en serio -coloqué mis brazos sobre su pecho.

-Quiero un sandwich y un jugo de naranja con zanahoria.

-Me has adividano el pensamiento -me acerqué más hacia él hasta profundizar en un abrazo, no me importaba que nos miraran raro, quería disfrutar de cada momento.

Tan sólo una mirada #Wattys2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora