Tan sólo una mirada #Wattys2018

Capítulo 13 (parte 2)

Empezó a sonar, pasaron unos segundos y nada pasó.
Volví a marcar. Pasó lo mismo.
Así que decidí ya no hacerlo de nuevo, antes estaba mi dignidad.
Bueno lo poco que me quedaba en estos momentos era muy poca en realidad.

-No quiere hablar conmigo Sharon -Dije para soltar mi celular en la cama.

-A lo mejor se quedó sin pila -dijo tratando de encontrar mi mirada, la cual desvíe.

-No, nada de eso. Ya te dije que si me pasara haría lo mismo que él -dije frunciendo el ceño.

-Puedes esperar a mañana e intentarlo de nuevo -levantó mi rostro con su mano.

-Lo voy a pensar Sharon; aunque no creo que quiera.

-Está bien Sara, ¿Qué quieres hacer para que ya no sigas así? -Dijo mirandome con algo de intriga.

-Retroceder el tiempo y que jamás hubiera pasado eso- Dije tapandome de nuevo la cara.

-Sara deja de hacer eso; ambas sabemos que eso es imposible -dijo- así que mejor otra cosa.

-Ver una película de amor.

-De amor no, eso no es bueno; mejor solo una película de comedia -dijo codeándome.

-Está bien, prende la televisión para buscarla-le di el control para que ella la buscara.

-Listo -dijo Sharon pero en realidad no le tomaba del todo atención y solo asentí para que lo creyera.

Empezamos a ver la película que estaba en la televisión, era de comedia así que le empecé a poner un poco de atención.
Pasó media hora cuando decidí hablar de nuevo para romper el silencio que habia.

-¿Crees que lo pueda ir a su casa a buscarlo?-dije, esperando con ansias la respuesta.

-¿Acaso sabes donde vive?- miraba hacia la televisión.

-Amm no, en realidad no -dije riendo de lado un poco- No se que pensaba.

-Pensabas en que en realidad quieres arreglarlo todo para empezar de nuevo -mencionó.

-Si, pero como te dije al principio es algo difícil cuando en verdad no conoces del todo a la persona que hace que tus días sean diferentes y tu comportamiento no se diga -dije recordando el día que lo vi en el centro comercial.

-Solo te puedo decir que todo es posible-terminó de decir para regalarme una sonrisa.

(...)

No hablamos más y esta vez puse más atención que antes ya que ahora había dejado de pensar en como podia solucionar mis problemas o que si en verdad el quería algo.
Durante la película le dije a Sharon que si quería unas palomitas, dijo que si solo que la condición era que ella bajara por las palomitas. Yo no quería que me vieran tan mal; mis padres se espantarían.
Después de renegar un poco aceptó bajar.

Solo podia decir que seguía con mi dolor de estómago, que era por algo que habia comido ayer cuando fuimos a trabajar.
Cuando regresó ya estaba más calmada y empezaba a poner atención a la película.
Se sentó a mi lado comiendo palomitas,  me ofreció un poco pero negué con la cabeza ya que con tan sólo oler comida mi estómago se revolvía.
Me paré rápidamente al baño, cerré detrás de mi la puerta y comencé a vaciar lo poco que tenia mi estómago. Después de estar intentando, bajé el inodoro, lavé mi boca y salí del baño con ojos llorosos.

-¿Que te pasó Sara? -Dijo Sharon algo preocupada.

-Creo que en realidad ya me empezó a doler mi estómago -dije sonriendo de lado.

-Y yo creo que en verdad te causa algo y debes arreglarlo lo antes posible porque si no hará que te quedes en cama por más tiempo.

-Ya lo haré.

-Eso espero Sara, ya me voy porque ya es tarde, son las 8 de la noche y mañana hay que trabajar- tomó su bolsa.

-Vamos te acompaño,  ya estoy mejor -arreglé mi cabello un poco y tomando el molde de las palomitas para bajarlo.

Salimos del cuarto y como es costumbre cerré mi puerta roja detrás de mi.
Caminamos por el pasillo hasta llegar a las escaleras y empezar a bajar por ellas.
Llegamos a la cocina y no estaban mis padres,  solo los gemelos viendo un programa de televisión como era costumbre. No nos vieron y lo agradecí.
Dejé el molde en el fregador y empecé a lavarlo junto con lo que estaba ahi. Dándole una sonrisa a Sharon para que me comprendiera y esperara un poco.
Cuando terminé salimos a la cochera donde estaba el audi negro de Sharon, se acercó un poco y abrió la puerta para meter su bolsa.

-¿Mañana irás a trabajar?

-No lo sé,  todavía lo estoy pensando -dije algo confundida.

-Está bien Sara,  espero que decidas ir y si es así mañana nos vemos -terminó de decir y al mismo tiempo se acercó a mi,  me regaló un beso y se subió a su carro para irse.

La despedí y decidí meterme a la casa porque empezaba a hacer frío y con lo mal que estaba no quería que ahora se agregara estar enferma de la garganta.
Entré y cerré la puerta con llave,  no creo que alguien salga a esta hora.
Cuando estaba adentro vi de nuevo a los gemelos viendo todavía su programa así que no hice ruido alguno,  me acerqué a ellos y grité.

-¡Boooo! -Dije golpeandoles la espalda a ambos.

-¡Ahhh! ¿Que te pasa Sara? -Dijeron al unísono, no pude decir nada y empecé a reír.

-Perdón -dije riendo todavía- No creí que se fueran a espantar tanto.

-Pues así lo fue -dijo Jared.

-Disculpa, vámonos a dormir que ya es tarde-tomé el control de la televisión para apagarla.

-Está bien -dijeron enojados y caminando hacia las escaleras.

Apagé las luces de la casa y subí detrás de ellos,  cuando llegamos arriba caminé por el pasillo para llegar a mi cuarto.

-Duerme bien Sara -dijeron los gemelos en unísono.

-Igual ustedes chicos- cerré con cuidado la puerta de los gemelos para después ir a mi cuarto.

Entré y cerré la puerta con como era costumbre,  no quería que nadie me molestara tan temprano.
Me puse mi pijama,  tomé mi cabello para arreglarlo y hacerlo de nuevo una coleta.
Puse alarma en mi celular porque había decidido ir al trabajo y seguir con mi vida,  no me podría cambiar.
Era más factible encontrarlo en la calle que en estas cuatro paredes.
Dejé mi celular en la mesa y me acosté en mi cama tapandome perfectamente porque todavía tenia la necesidad de sentir protección de alguna forma.
Cerré por un momento mis ojos pero no conseguí mantenerlos así,  asi que decidí voltearme un poco. Cuando hacia eso a veces podia dormir,  como era de esperar funcionó y ya no pude despertar.