Capítulo 14

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Sonó la alarma a las 6:30 de la mañana, tardé un poco en levantarme, así que no dejaba de sonar hasta que me molestó y la apagué.
Me levanté de la cama y me dirigí hacia el baño para darme una ducha rápida ya que no tenia ánimos de bañarme.
Cuando salí tomé mi ropa interior negra y me la puse, después el uniforme del cine ya que era Miércoles y hoy me tocaba trabajar.
Me peiné como siempre; de una coleta alta.
Tendí mi cama como todos los días,  después revisé mi celular pero esta vez no tenia ninguna notificación.

Decidí volver a llamar a James,  quería volver a escuchar su voz. Pasaron unos segundos y no pasó nada,  no volvió a responder, hizo que me cabreara un poco pero decidí calmarme porque apenas comenzaba el día.
Salí de mi cuarto y me dirigí hacia las escaleras,  las bajé y fui al patio para darle de comer a Sparck y jugar un poco con él ya que tenía tiempo; cuando estaba de regreso mis padres y los gemelos estaban sentados en el comedor.

-Hola Sara,  espero que estés mejor -dijo mi mamá.

-Hola mamá,  si estoy bien ya no me duele el estómago -dije sonriendo de lado.

-Eso me alegra mucho porque ya pensaba en llevarte al doctor,  ¿Entonces ya vas a trabajar?- tomó un trago de su café y señaló mi ropa.

-Si,  no quiero que me descuenten el día por no ir. Necesito el dinero para la universidad -dije empezando a caminar hacia la puerta del baño para lavar mi boca ya que habia comido algo.

Salí del baño y me dirigí a la mesa para tomar mis llaves y la bolsa,  la había dejado ahí para poder desayunar algo.
Las tomé y salí por la puerta.

-Adiós, nos vemos en la tarde -dije saliendo.

-Adiós -Dijeron en unísono.

Subí a mi auto y conduje por media hora hacia el centro comercial, me dirigí hacia el estacionamiento para aparcarlo ahí.
Bajé y caminé hacia la entrada,  era un poco tarde ya que no encontraba un lugar cerca de la puerta que me llevaba directo al cine.
Así que comencé a caminar un poco rápido pero no tanto porque no me gustaba correr.
Llegué por fin al cine después de una caminata que no estaba contemplada.

-Hola Sara -dijo una voz a mi costado, era Sharon.

-Hola Sharon,  me espantaste. Creí que era un psicópata que venía a robarme -solté una pequeña risa por mi comentario.

-Jajaja lo siento Sara,  por no ser lo que esperabas -dijo con una voz entre cortada por reírse.

-Jajaja eres una idiota Sharon -dije pegándole en el brazo.

-Pero me quieres aún así - señalándose- Ándale ya, vamos a trabajar que llegaste apenas.

Caminamos hacia la oficina para que yo checara la entrada,  salimos y hoy nos tocaría trabajar en la dulceria,  es un poco menos difícil que la taquilla ya que no a muchas personas les gusta comprar dulces o palomitas.
Me puse en la primer caja y Sharon a un costado de mi, en la segunda.

Comenzamos el día con poca gente aunque hoy era día en que iban más personas que el lunes pasado.
Fue pasando el día e iban llegando más personas.
Hubo un tiempo en el que se formó una gran fila,  lo cual me estresaba porque tenía que trabajar más rápido que lo normal para que la gente no se empezara a enojar e hicieran malos gestos.
Después de un rato se tranquilizó de nuevo todo lo cual agradecí demasiado,  me empezaba a cabrear por tanta gente, estaba acostumbrada a estar con muchas personas pero en mi situación quería solamente estar encerrada o aclarando las cosas con James, pero creo que ninguna de las dos era posible.

(...)

-Sara es hora de ir a comer -dijo Sharon cerrando su caja.

-¡Vaya!  A pasado demasiado rápido el día -dije cerrando mi caja para acercarme a Sharon- Vamos a comer algo.

Tan sólo una mirada #Wattys2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora